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El beso era lento, sin prisa. Lo estábamos disfrutando. Sus labios encajaban perfectos con los míos. Sus manos se posaron en mi cintura y mis brazos rodearon su cuello. De un momento a otro el beso se volvió un poco más apasionado, había introducido su lengua en mi boca, explorándola. Una de sus manos acariciaba mi pierna. Sé que debo irme, no debo caer en su juego pero sus labios me han hecho su prisionera. No quiero que el beso termine. Es como si estuviera hechizada, un hechizo que no puedo romper. Mi corazón late rápido y mi subconsciente no deja de recordarme que HoSeok le pertenece a otra persona y que esta persona que se encuentra besando a un hombre casado, no soy yo.

— HoSeok, yo...— me alejé rompiendo el beso — Debo irme. — Alejé su mano de mi pierna, él miró a otro lugar y asintió.

— Lo siento.  — dijo antes de yo cerrar la puerta del auto.

PDV: HoSeok

Vi a HaNeul entrar a su casa y arranqué. El beso con ella me había dejado con muchas ganas de hacer otras cosas, más que besarla.  En cuanto llegué a casa me apresuré a ir a mi habitación, HaNi estaba durmiendo plácidamente en nuestra cama, pero tengo otros planes para ella. Me quité los zapatos y camisa, pasé por el lado de HaNi y acaricié su brazo con la punta de mis dedos. Ella se giró y fue abriendo sus ojos poco a poco.

— HoSeok, ¿qué hora es? — preguntó con voz adormilada.

— Olvida la hora, quiero hacer algo divertido contigo. — me subí encima de ella y comencé a besarla.

Sus labios para nada se parecían a los de HaNeul. El beso era con menos pasión, parecía que HaNi me besaba por obligación. HaNeul al contrario, me besaba con un deseo y pasión que nunca había sentido. Desearía que la chica que se encuentra debajo de mi, fuera HaNeul y no HaNi. Sé que no debería ser así porque HaNi es mi esposa, pero tristemente ya no es lo mismo, el sexo es sólo sexo, sin pasión.

— HoSeok, ¿qué te pasa? Es tarde y estoy muy cansada. — trató de sacarme de encima de ella.

— Vamos, HaNi. Hace mucho no hacemos el amor. — besé su cuello — ya te extraño. ¿Tu no me extrañas...tocándote así? — metí una de mis manos en el pantalón de su pijama y otra debajo de la camisa, jugando con sus pechos — porque yo sí...y muchísimo. — volví a besar su cuello.

HaNi estaba cediendo a mis toques. Sé sus debilidades, así que es fácil hacer que se prenda rápido y quiera tener sexo. Mis dedos se movían en forma de círculos en su intimidad, ella se retorcía de placer. Sus uñas enterradas en mi espalda y sus gemidos bajos, era excitante.

— H-HoSeok. — gimió.

Cerré mis ojos e imaginé a HaNeul en esta situación. Gimiendo mi nombre y pidiendo por más. HaNi gemía debajo de mi pero mi mente me jugó una muy mala y en vez de escuchar la voz de mi esposa, comencé a escuchar la de HaNeul. Miré el rostro de HaNi y pude ver el de HaNeul en cambio.

— ¿HaN...? — estuve a sólo unas letras de decir el nombre de HaNeul.

— HoSeok...— volví a la realidad cuando mi mente dejó de jugar y me dejó ver quién realmente estaba debajo de mí.

Me había imaginado a HaNuel y estuve tan cerca a decir su nombre. Me salí de encima de HaNi y me metí al baño. Ella probablemente esté preguntándose que demonios pasa conmigo, pero es que simplemente no puedo dejar de pensar en HaNuel y como le haría la follaría en todas las poses que conozco . De tan sólo pensarlo me prendo. Quisiera tenerla ahora mismo, en mi cama, desnuda, esperando por mí. Que cuando la toque ya esté mojada para mi, que sólo yo provoque eso en ella. Quiero ser yo que la vuelva adicta al placer del sexo.

Sacudí mi cabeza, tratando de espantar esos pensamientos tan sucios que tengo con HaNuel. Me saqué la ropa y me metí a bañar, puse el agua lo más fría que se me hiciera posible. Tenía que hacer algo con la erección que me había provocado HaNeul sin siquiera saberlo. Me pregunto si HaNeul se siente igual que yo. Aunque no lo creo, ella sabe que soy casado por el anillo en mi dedo, ella si que es observadora, probablemente otra chica hubiera pensado que era un anillo cualquiera. Eso es lo que la hace tan diferente. Salí del baño con mi miembro mas relajado, me puse unos bóxer y me acosté al lado de HaNi, dándole la espalda.

— ¿HoSeok? — HaNi me llamó, pero decidí ignorarla.

Mis pensamientos están siendo consumidos por HaNeul. No dejaba de pensar en ella. ¿Qué demonios? Debo de detenerme, sólo la quiero utilizar, la enamoró, la hago mía y la embarazo. Tengo un hijo con ella y fin de la historia. Le quitó al niño o la niña y ya. Por tal razón debo dejar de pensar en ella, no puedo enamorarme. Eso es estrictamente prohibido.

¡HaNeul sólo será la madre de mi hijo!

R u mine? | HoSeok ; SeokJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora