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HoSeok se puso de pie, miró la puerta y luego volvió su mirada a mi. Parecía estar impactado igual que yo, la única diferencia que él tenía una pequeña sonrisa en su rostro. Se sentó nuevamente a mi lado, sostuvo mi mano y depositó un suave beso sobre ella. Mi corazón latía a mil por hora. Él estaba feliz por la noticia o parece estarlo. Por otro lado yo no me sentía preparada para ser madre.

— HaNeul, estás embarazada. — sonrió, sus ojos se cristalizaron.

— Tal parece. — bajé mi mirada y alejé mi mano de la de HoSeok. Él me miró extrañado.

— ¿Qué pasa, linda? — agarró mi mentón y me obligó a mirarlo a los ojos.

— HoSeok, por favor, sal de aquí. — mis ojos comenzaron a humedecerse.

— HaNeul, dime qué está pasando. ¿Por qué quieres que me vaya? — acarició mi mejilla y puso un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

— Solo vete, por favor. Hablaremos cuando yo esté lista para hacerlo. Tal vez en unas horas o en unos días, no sé. Han pasado algunas cosas y ahora saber que voy a ser madre... — mordí mi labio para tratar de contener las lágrimas — simplemente no puedo con tanto. Así que por favor, sal de aquí.

— ¿Cuánto tiempo necesitas? — dijo con una expresión seria.

— Dame hasta... — miré la hora en la pantalla de mi celular — las 7pm. — lo miré, él no parecía muy convencido.

— Bien. — se acercó a mi, iba a darme un beso en los labios pero giré la cara, haciendo que me lo diera en la mejilla.

Salió de la habitación y yo solté un suspiro. Debo pensar bien si debería o no decirle sobre la violación. La felicidad de él se irá directamente a la basura. Aparte de ese tema tan delicado también está su esposa, puede que las cosas vayan mal entre ellos pero ¿y si ella aún lo ama? Eso sería un terrible problema, ella sufriría y yo no me sentiría cómoda.

HoSeok se le veía tan feliz cuando escuchó que estoy esperando un bebé, me duele saber que el bebé que llevo dentro podría de ser de otro hombre.

Me levanté de la camilla, cuando abrí la gabeta del pequeño armario que se encontraba allí para mi suerte contenía ropa. Hye debió traerla. La tomé y caminé al baño. Acomodé la ropa en un lugar dónde no se cayera y caminé para el frente del espejo. Al ver mi reflejo me horroricé un poco. Me veo más pálida de lo normal con esta bata blanca que tengo puesta, pequeñas bolsitas debajo de mis ojos, mi pelo hecho un completo asco. Ignorando el aspecto de mi cara, recordé la criatura que ahora crece en mi vientre. Ambas manos tocaron mi vientre, lo acariciaba mientras que las lágrimas recorrían mi rostro. Me auto-abrace. Tratando de controlar las emociones dentro de mi.

— Bebé  que crece dentro de mi... — limpié las lágrimas que salieron sin autorización  — tu no eres culpable de nada de lo que está pasando. Por tal razón te amaré muchísimo. — sonreí débil — serás la pequeña princesa o el pequeño campeón de mamá. — caí de rodillas al suelo, mis manos hechas puños sobre mis rodillas.

Cuando logré tranquilizarme me puse de pie, quité la bata y ropa interior y entré en la ducha. Al encender la ducha el agua fría como el invierno calló sobre mis hombros. Me sobresalté pero luego mi cuerpo se fue acoplando a la temperatura de esta. Tomé una ducha de casi una hora, mientras me duchaba pensaba en HoSeok y en lo que le diré. Aunque no quiera debo hablar con la verdad.

"Porque por más que escondas la verdad, por más que intentes no sacarla a la luz, ella por sí sola saldrá."  Esa es una frase que mi mamá me enseñó desde pequeña. Siempre me dijo que las mentiras solo se hacen más grandes y más dolorosas.

Salí del baño ya vestida. Para mi sorpresa YoonGi se encontraba en la habitación. Al verme sonrió de lado.

— HaNeul, ¿estás mejor? — se acercó a mi — me preocupé demasiado. — me rodeó con ambos brazos, envolviéndome en un abrazo.

— Estoy bien, YoonGi. — le devolví el abrazo.

— Ven, acuéstate. Deberías estar descansando. — dijo cuando se alejó de mi y me ayudó a caminar hacia la cama.

Me acosté y él tomó asiento a mi lado. Sus ojos seguían sobre mi, su mano sobre la mía, cuando bajé la mirada un mechón de pelo cayó frente a mi cara y YoonGi lo apartó.

— HoSeok está afuera desde hace un rato. Me dijo que lo has hechado y que está esperando a que tú decidas hablar con él. Hye también está ahí. — acarició mi mano con su pulgar.

— YoonGi... — lo miré y él me devolvió la mirada, esperando a que hablara — ¿puedes pedirle a HoSeok que pase? — pregunté y él solo asintió. Se puso de pie sin decir nada y salió.

No pasaron ni dos minutos cuando vi a HoSeok entrar. Nuestras miradas chocaron y yo sonreí de lado.

HoSeok tomó asiento a mi lado y me miró, esperando que yo hablara pero de mi boca no salía ni una palabra. No sé como decirle lo que tengo que decirle. Pareció notar que yo no sabía como comenzar hablar así que decidió hacerlo él.

— Sé que esta es una noticia bastante impactante para ti pero a nuestro hijo no le faltará nada, te lo aseguro. — suspiró — En cuanto a mi esposa, no te preocupes por ella ya me encargo yo. — tomó mi mano — HaNeul, te puedo dar todo, dinero, casa, carro, todo lo que necesite nuestro hijo, todo. Seré un padre...

— No sé si es tu hijo. — le corté y él me miró extrañado.

— ¿Qué has dicho? — su boca abierta en forma de una pequeña "o".

— HoSeok, el niño que llevo dentro... no sé si tu eres su padre. Me violaron después de unos días de haber estado contigo y... — comencé a llorar — ¡no sé si este bebé es del violador! — sollocé.

— ¿Te han violado? — se puso de pie, su expresión cambió a una enojada.

— HoSeok yo... — las lágrimas bajaban por mis mejillas como una catarata.

— Encontraré al bastardo que lo hizo y lo mataré. — volvió a tomar asiento — en cuanto al bebé, haremos una prueba de ADN. — suspiró — todo estará bien. — su expresión cambió a una más relajada.

Esta no era la reacción que esperaba...me pregunto qué pasará si este bebé no es suyo.

R u mine? | HoSeok ; SeokJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora