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Una semana. Una completa semana llena de preguntas. Seok Jin no ha querido responder ninguna, diario nos hemos hablado, sin embargo cuando hago una pregunta respecto al beso, cambia el tema o simplemente deja de responder mis mensajes. ¿Por qué se comporta así? Hoy será él quien me lleve al hospital así que espero conseguir al menos una respuesta de alguna de las miles preguntas que tengo. Es el último día que mis niños estarán en aquel lugar, los podré traer a casa y que duerman en las hermosas habitaciones que tienen gracias a HaNi y Seok Jin. No sé cómo empezar a pagarles lo que han hecho por mi. Arreglaron las habitaciones, compraron las cosas necesarias para mis hijos, ¡Seok Jin incluso me ha regalado un auto! ¡Un auto! ¿Quién regala un auto tan fácilmente? Esto es demasiado, ni siquiera Ji Min ha hecho tanto por mí, bueno, si lo ha hecho pero no es lo mismo que lo haga tu hermano mayor a alguien que conociste hace poco, ¿cierto? Es completamente distinto, a tu hermano le puedes "pagar" con cualquier otra cosa pero ¿a un amigo cercano? No sabes por dónde empezar. Primero le estás completamente agradecido, y aún así se siente que debes hacer algo por él, algo más grande de lo que ha hecho por ti. Al menos yo me siento así.

Solté un suspiro y sonreí mirándome al espejo. Me he puesto un lindo vestido, iré a buscar a mis hijos y no quiero verme mal. Tal vez es algo "extra" el que me vista bien pero bueno, lo mejor para los hijos, ¿no? También he pensando en invitar a Seok Jin a comer, sé que ama demasiado la comida y creo que sería una forma de mostrarle lo agradecida que estoy, en cuanto a HaNi no tengo remota idea de que hacer para mostrarle mi gratitud. Pero ya pensaré luego en eso. Hoy se trata de Seok Jin.

Cuando ya había terminado de arreglarme fui a la cocina y tomé un vaso de agua. Miraba por la ventana de la cocina mientras daba sorbos al agua en mi mano. Mi cuerpo estaba allí pero mi mente en otro lugar. Vagamente pensando en todo lo que me ha pasado estos últimos meses. Si que he pasado por mucho.

Terminé mi agua y cuando giré sobre mis talones me llevé el susto del año. Solté un fuerte grito, Seok Jin, el causante de que mi corazón casi saliera de mi pecho soltó una fuerte carcajada. Puse la mano en mi pecho, como si eso fuera a ayudar a mi corazón a latir con normalidad.

— Tu expresión no ha tenido precio. Cuanto quisiera haber tenido la oportunidad de tomarte una fotografía. — siguió riéndose, puso sus manos en sus rodillas, pareciera que se asfixiaría en cualquier momento. Luego de casi morir de risa se puso completamente erguido y secó una lágrima  imaginaria de su ojo con su dedo índice. Le dí un suave golpe en el pecho.

— Te odio tanto. — dije, pareciendo estar molesta.

— No, no me odies, yo quiero que me ames. — sonrió, mis mejillas se calentaron. — Eres linda cuando te sonrojas. — acercó su rostro al mío y yo di un pequeño brinco y me alejé.

— ¡Seok Jin! — chillé — No hagas eso.

— ¿No te gusta tenerme cerca? — mi corazón latió rápido.

— Ya debemos irnos a buscar a mis hijos. — caminé fuera de la cocina y él me siguió.

Salimos de la casa, cerré con llave y nos subimos a su auto. Él manejó en silencio, yo cantaba partes de las canciones que ponían en la radio. Al llegar al hospital él me dejó en la entrada y se fue a estacionar el auto. Entré al gran hospital e hice todo lo necesario para llevar mis hijos a casa: firmar papeles, registrarlos, escuchar detalladamente lo que la doctora tenía que decirme.

Con mis hijos ya listos para irnos, Seok Jin llegó y tomó en brazos a Dae-Hyun y yo a Hee Shin. Caminabamos por los largos pasillos del hospital, miraba a cada paciente allí, aveces algunos ponían cara de ternura al vernos y yo solo sonreía de lado.

Salimos del lugar, caminamos hasta el auto que no estaba muy lejos, Seok Jin puso a Dae-Hyun en su asiento de bebé y yo hice lo mismo con Hee Shin. Nos subimos nosotros y yo solté un suspiro.

— ¿Todo bien? — preguntó Seok Jin mirándome detalladamente.

— Si, es solo que... Mi vida cambiará tanto. Ahora soy madre. — sonreí.

— Estarás bien. — dio un pequeño apretón en mi mano para luego encender el auto.

— Seok Jin... Te invito a comer. — dije rápido, sin siquiera mirarlo, me avergonzaba un poco.

— ¿En serio? — asentí — Vale, vamos. — sonrió ampliamente.

Nos dirigimos a un restaurante, no lo conozco pero Seok Jin ha dicho que es muy bueno. Y como ahora, no puedo bajar del auto y seguir caminando, tuve que tomarme el tiempo de bajar un coche para los bebés, era doble, muy bonito. Puse a los bebés en el coche y cuando por fin estábamos listos para entrar, vi mi reflejo en el espejo para asegurarme de verme bien. Al entrar, rápidamente nos dirigieron a unas mesas ya que no había mucha gente.

Mientras esperábamos a ser atendidos hablábamos de temas aleatorios. Los bebés han estado durmiendo, este sentimiento es extraño, completamente nuevo para mí.

Mientras Seok Jin y yo hablábamos animadamente una señora se acercó a nosotros. Miró a mis hijos y luego a nosotros con una sonrisa en su rostro.

— Hacen una familia muy bonita. ¿Son esposos? — nos señaló.

— ¿Disculpa? ¿E-Esposos? No, no. Él es solo un amigo. — sonreí algo nerviosa. Miré a Seok Jin que no parecía muy feliz de mi respuesta.

— Oh, que lástima. Realmente se ven muy bonitos juntos y tu pareces feliz junto a él. Pensé que estaban casados por la manera tan feliz que sonreías al hablar. Juré haber visto ese brillo especial en tus ojos. — sonrió — Y tu, muchacho, te ves muy enamorado. Hacen pensar cosas erróneas a esta pobre anciana. — carcajeó.

La señora se alejó, dejándonos algo incómodos, o al menos a mi, quien aún tengo miles de preguntas que hacer.

R u mine? | HoSeok ; SeokJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora