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Dia treinta.



—En algunos días llegan nuestros padres. —hablo Wayne feliz mientras corría a la nevera por helado.


—Si. —hablo Faith un poco desanimada mientras miraba a Justin tomar unas cucharas de el mueble.


—por fin tendré mi vida de hijo único de nuevo —bromeó el y Faith hizo una mueca, Wayne rio pero Justin la volteo a ver.— Es broma, si saben que los quiero demasiado. —hablo el riendo y Faith le sonrió un poco.

En tan solo 4 días llegaban sus padres de su tan divertido viaje exclusivo y Faith se sentía melancólica.


—Hoy iremos a comer con Mama Kara. —hablo ella mientras tomaba de su jugo.

—Genial yo digo que llevemos películas. —hablo Justin sonriendo.

—Yo digo que juegos de mesa. —palmeo la mesa y sonrío su hermano menor.


—Ella ama el jenga —sonrió ella al recordarla jugar algún día.


—Podemos llevar el jenga y algunas películas.  —asintió Wayne sonriendo. 




En el camino solamente Wayne y Justin iban platicando, Faith iba en el copiloto mirando por la ventana, en sus manos portaba unas medicinas las cuales apenas agraciaba tocar. 


Al llegar a la casa de la abuela los tres bajaron con todo lo necesario para que la Abuela Kara la pasara de maravilla.





—¡Demonios, Bieber solo sácala, eres más Indeciso que un gordo en una panadería! —grito mama Kara con euforia mientras Justin intentaba sacar una pieza de la torre de jenga.



Faith carcajeo por el ocurrente comentario de su abuela, por eso es que ella la amaba tanto.


Por eso es que ellas se querían tanto; por qué se parecían bastante. Igualmente era el motivo por el cual Faith no se llevaba tan bien con su madre, Rachel veía a su madre en Faith y es por eso que no aguantaba las actitudes de su hija, y tampoco aguantaba el hecho de que Faith se llevará más con Kara, todo un triángulo de problemas.

Su mama era algo especial; siempre quería todo perfecto, aveces se desinteresaba de las cosas de Faith, más las de Wayne no y Faith agradecía eternamente que Wayne no usaba eso de una manera malvada como algunos hermanos menores lo solían hacer; la mama de ellos dos también odiaba escuchar malas palabras y esperaba que a los ojos de todo el mundo su familia se viera totalmente perfecta, sin ningún defecto, y más aún Faith, quien era la chica de la casa, más Faith era lo contrario, ella no intentaba ser perfecta, ella solo era ella misma. Y su abuela era igual que Faith, las dos tenían cosas muy en común y era por eso que Faith consideraba a Mama Kara lo más importante en la parte de maternidad, junto con un pedazo de Patty, la mama de Justin.



Un movimiento y la torre se derrumbó gracias a que Duby la  golpeó con su pico. Nadie lo había visto llegar y tomar aquel asiento a un lado de Wayne, era un pato muy listo y por ende, muy viejo.


—¡No Duby! —grito Wayne frunciendo el ceño— eres un pato malo, estábamos en medio de un asunto importante!


Duby graznó mientras miraba las piezas caídas, todos reían mientras Wayne solo alegaba.


—No me importa tus excusas Duby, este no es un juego para pa–TOS —grito la última sílaba para salir corriendo con Duby graznando tras el.



Las carcajadas aumentaron mientras Wayne gritaba por toda la sala un "Perdón Duby".


Faith rió tan fuerte que tuvo que colocar sus manos en su estómago y una vez que ya no pudo más tuvo que recargarse al cuerpo mas cercano que tuvo en la mesa; el de Justin.



Taboo |jb.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora