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—¿Pueden parar? —exclamó Jack entre risas mirando el ridículo que hacían los chicos en la sala de su casa.

—¡Buenas noches, Georgia! —gritó Marlo y entonces comenzó a tocar su guitarra haciendo ruidos graciosos, simulando una melodía totalmente eléctrica. —Piwiriruriun—canto como si fuera el solo de guitarra más épico.

—¿Por fin habrá grupies de verdad? —preguntó Sean con una gran sonrisa.

Dakota lo fulminó con la mirada— ¡En serio, Sean! —se quejó frunciendo su ceño.

—Oh, esto es genial, esto es genial, esto es genial —murmuró Faith repetitivamente mientras deslizaba sus manos por encima de su lacio cabello para reposarlas en su cuello y mirar el techo con un gran sonrisa. — ¡Esto es genial! —soltó un último gritito mientras Sean acompañaba a Marlo con una batería imaginaria.

—Tienen medio mes para perfeccionar sus propias canciones y los covers que tocarán —advirtió Jack con una sonrisa. — Y si se sienten muy creativos, pueden escribir más canciones suyas, solo que deberán usarlas como exclusivas, lo mejor será que toquen las que ya hemos registrado como su propiedad.

—¡Teníamos pensando hacer una canción sobre ho...! —intentó contar Marlo, pero rápidamente Dakota lo interrumpió.

—¡Hace años descartamos tu canción sobre hot dogs, ríndete!

—Jack, esto es genial —siguió Faith.

—Si, me quedo claro que es genial desde la primera vez que lo mencionaste —bromeó.

—Es genial —finalizó la rubia para soltar una gran carcajada de felicidad. Se acercó al viejo y le dio un gran abrazo, el cual él recibió con burla.

—Manos a la obra estrellitas de rock. —concluyó Jack dando pequeñas palmadas en la espalda de Faith.

{...}

—Tenemos que planear todas las canciones. ¿De acuerdo? Hagamos un setlist inteligente —propuso Faith mientras los cuatro chicos caminaban hasta la puerta del apartamento de Faith.

Nadie lo había estipulado si quería, pero ella era la líder de la banda. Así como ella, todos tenían sus propios roles.

Sean era un genio musical o algo parecido, todos sospechaban que tenía un oído absoluto y muchas veces lo confirmaba cuando corregía cosas de la guitarra, el bajo y la voz de Faith.

Dakota era una excelente negociadora, aparte de que su personalidad un poco más irascible que la de Faith y sus problemas de confianza los habían salvado de muchas situaciones ilegales y densas, eran ambientes difíciles si no ponías fronteras.

Y bueno, Marlo era Marlo, pero sin dudar el rol más importante lo poseía él, era el corazón del grupo y si no fuera por él ahora mismo quizás no estarían en este camino, o siquiera no juntos. Aun así sus ingeniosas habilidades de producción y mezcla de audio siempre les ayudaba a formar canciones más concisas y elaboradas, inclusive si quisieran grabar algo en cualquier momento ya tenían una idea de lo que querían gracias a los experimentos que hacía Marlo en la computadora.

— ¿Pedimos pizza? —propuso Marlo cogiendo su teléfono y sentándose en el cómodo sillón individual de Faith, el cual tenía forma de beso en la parte del respaldo.

—Uh, estoy dentro —afirmó Sean tomando los cojines del suelo para sentarse en uno a un lado del sofá.

—Pídanla, mientras voy por mi guitarra y algunas hojas y lápices, podemos festejar mientras creamos —propuso Faith, lista para salir al cuarto de ensayo que Justin le había ayudado a confeccionar.

Taboo |jb.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora