-La chica de los libros- Luke Hemmings

#41-Hasta Pronto-Maratón 3/4

Narra Emma

Este era el adiós. Sabía que no iba a ser para tanto ya que ellos podrían venir cuando quisieran y cuando sus vidas se lo permitieran pero después de convivir tanto tiempo con ellos es difícil.

-Creo que es hora de despedirnos.-Hablo cam al lado de Patrick que se quedaría con nosotras mientras los chicos se van.

Ellos sólo sonrieron con malicia, nosotras los miramos confundidas.

-Así que... Este es el adiós.-Dije yo

-No, esto es un hasta pronto.¿Saben lo difícil que es conseguir una casa con...diez habitaciones?-Pregunto Louis. Y nosotras negamos sin entender a que se refería.

-Chicos, perderán su vuelo si se andan en divagues.-Dijo Patrick.

-¿Cual vuelo?-Pregunto Liam con una sonrisa.-No hay vuelo, nadie se va.

-¿De que hablas?-Pregunto Sam

-A lo que nos referimos es que tendrán a estos ocho rondando por aquí. No iremos a Londres ni a Sidney. Ya que viviremos aquí. -Dijo Luke. Y ellos rieron a lo que nosotras sólo sonreimos, todas estabamos apunto de llorar.

-¡Idiotas!-Dijo Camila y la miramos sin comprender mientras se limpiaba los ojos y reía.-Creí que con todo y su vida ocupada se olvidarían de nosotras.

-¿Como esas cosas pasan por tu cabeza?.-Le dijo Ashton y la fue a abrazar. Patrick los miro enternecido, claro que él no sabía de los sentimientos de Ash.

(...)

Camila

Espere un rato hasta que todos estuvieran ocupados, los chicos decidieron quedarse a dormir hoy. Patrick se había ido hace unas horas y los chicos habían aprovechado eso para preguntarme por él.

Sin que nadie se diera cuenta salí a la parte de enfrente ya que el jardín trasero contaba con un gran ventanal, por ende me verían.
De mi bolsillo trasero saque un cigarrillo y un encendedor, lo encendí y di la primera calada.
Había extrañado esto.

Llevaba unas cinco caladas cuando derrepente la puerta principal de abrió de golpe, causando que me asustara y empezara a toser.

-¡Joder Camila!-Demonios-¿Me estas jodiendo?

Aparte el cigarro en el borde de la ventana y me volví hacia Ashton que me miraba enojado y decepcionado. Decidí hacerme la desentendida.

-¿De que hablas?-Pregunte abrazandome a mi misma. La obscura noche de un momento a otro comenzó a enfriarse.
Ashton rodó los ojos y me entregó el abrigo. Antes de que yo lo tomara dijo.

-Estabas fumando.-Me extendió más el abrigo.

-Quedatelo, después olera a humo.-Respondí sin interés, si ya lo sabía no tenía nada que ocultar.
Él volvió a rodar los ojos y se acercó a mi, me puso primero el abrigo en los hombros y después metió mis brazos.

Miro hacía el borde de la ventana y arrugo la nariz, el cigarrillo seguía encendido. Yo lo tome y lo apagué, él me abrazo.

-Quiero que sepas que estoy decepcionado, pero no soy nadie en tu vida para decirte que puedes y que no puedes hacer.

-No seas idiota. Eres una persona muy importante en mi vida, pero no te puedo decir que no lo volveré a hacer. No quiero mentirte. -Susurre mientras sentía su respiración el la curva de mi cuello.

-Intentalo.-Dijo a lo que yo sólo asentí.

Entramos a la casa y todos estaban en un silencio muy incómodo.