-La chica de los libros- Luke Hemmings

#42-Cocineros-Maratón 4/4

(Esa misma noche)

Paula

Ashton y Camila se fueron, estábamos en la sala y Mike y Calum nos miraban expectantes.

-Chicos, admitanlo. Se necesitan, los dos sufren el uno sin el otro. Sólo... vuelvan a lo de antes.-Dijo Mike.

Harry lo miro, luego a mi y su mirada se poso en mis labios. Me puse nerviosa hasta los codos. Él después de todo no intentó recuperar nuestra relación por lo que creí que no la necesitaba.
Por otro lado, yo estaba muriendo lentamente, lo necesitaba como no he necesitado a nadie. Él cambio toda mi vida y todos nos planes. Lo extrañaba.

En un rápido movimiento me tomo de la cintura y sonrió sin despegar los labios.

-Te amo.-Susurro y me besó, extrañaba sus labios.
En medio del beso los dos sonreimos.

-Torolitos, busquen una habitación.-Yo mire el piso avergonzada por el comentario de Calum.

-Y de paso un condón.-Dijo Mike riendo.

-Vámonos de aquí.-Dijo Harry riendo. Tomó mi mano y nos dirigimos a la habitación, no sin antes haber pasado por su maleta.

Entramos a la que ahora sería mi habitación y ya algunas cosas estaban acomodadas, como mi ropa por ejemplo.

-Ya vuelvo-Dije tomando mi pijama que consistía en un pequeño short negro con una blusa de tirantes negra y en el cuello encaje. Me encantaba.
Entre al baño, cepille mis dientes y me cambié.
Al salir del baño Harry estaba en bóxers y sin camisa.

-¿No te piensas poner algo de ropa?-Dije evitando observarlo.

-No, estoy cómodo así.-Respondió riendo por mi aparente nerviosismo.

Tire la ropa de hoy al canasto de ropa sucia, entre esa ropa iba mi sostén y quedó por fuera de la canasta.

-Lindo sostén.-Dijo Harry, no me había dado cuenta que estaba detrás mío hasta que hablo.
Rápidamente lo recogí y lo volví a hechar, esta vez en el fondo.
Me giré y ahí estaba él, a escasos centímetros de mi.

(Nota: NO pondré escenas explícitas ya que este libro no tiene clasificación de contenido adulto. Si no es de tu agrado, puedes no leer esta parte, yo te diré cuando volver a leer.)

Harry puso sus manos en mis caderas y besó mi frente, su tacto cálido me hizo estremecer.
Me volvió a abrazar pero esta vez dejo pequeños besos desde mi cuello hasta mi hombro, jugueteo un poco con el tirante de mi blusa y me miro.

-Te amo-Susurró sobre mis labios y me besó.

Fue algo extraño, no era un beso típico, este estaba lleno de deseo y lujuria. Sus manos de desplazaban de mi espalda a mi cintura mientras que yo no dejaba de juguetear con los pequeños cabellos que caían por su cuello.
Sin darnos cuenta comenzamos a caminar hacia el mueble que había al lado de la puerta del baño, llegando ahí me senté sobre el mueble y por falta de aire nos separamos.

Harry:

Quería llevar las cosas lento, tenía que saber si ella quería esto.
Pero las circunstancias no me permitían parar, amaba a esta chica. Y que me haya perdonado había sido lo mejor de todo, ahora sentir su piel me volvía loco.
Mordi levemente su labio y ella jadeo, sonreí en respuesta.

Con dificultad me separe de sus labios y le pregunté lo que me estaba matando desde hacía rato.

-¿Crees estar lista?-Ella miro hacua abajo y su piel se torno de un color carmesí.