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Fluff 

Train!au

915 palabras


Si hoy lleva también lo mismo que yo, pensaba Baekhyun, pasando su tarjeta de transporte público por el lector del metro, lo invito a salir.

Baekhyun podía notar esa sensación incómoda en su estómago y los dedos hormigueándole de puro nerviosismo. Andó, o más bien casi corrió hasta el andén, intranquilo por la idea fugaz de que podría perder el metro si llegaba un poco más tarde.

Entró en el andén y vio con alivio que al tren le quedaban aún dos minutos para llegar. Se meció sobre sus pies, impaciente, balanceándose sobre la punta para pasar después a los talones y viceversa, mientras pensaba en aquellas semanas pasadas.

Todo había comenzado un día cualquiera, Baekhyun ya no recordaba si era martes o jueves, pero sabía que era un día en el que tenía clases de inglés por las tardes, por eso al menos ubicaba que había sido a finales de Octubre en una de sus primeras clases. Entró al vagón como siempre, buscando un sitio donde sentarse ya que estaba cansado de estar todo el día fuera, primero en la universidad y después en las clases de inglés y, aunque llevara todo el día sentado, no podía ni tolerar el pensamiento de la media hora de trayecto que le quedaba en pie.

Se había sentado en uno de los asientos libres a su izquierda, colocando la mochila en su regazo para no molestar y suspirando mientras se colocaba bien los auriculares. En ese momento, alzó la vista y lo vio.

Wow.

Fue lo primero que pensó al ver al chico que se sentaba frente a él. Parecía un modelo, con su gorra hacia atrás sobre el pelo rojo, sus gafas de sol a pesar de estar dentro del vagón y su sudadera de Supreme roja y blanca.

Espera un momento.

Baekhyun se miró en ese momento, como para comprobar que su mente no le estaba jugando una mala pasada, pero no. Allí, sobre su pecho y hombros, estaba la misma sudadera de Supreme blanca, sólo que es un caso los detalles y motivos eran en negro. Baekhyun sonrió para sí y volvió a mirar al chico, descubriendo con sorpresa que se había quitado las gafas de sol y que lo miraba directamente.

Dios, era más guapo aún sin las gafas.

Le sonrió tímidamente, su corazón acelerándose cuando el chico le devolvió la sonrisa. No se dijeron nada, pero se miraron de soslayo todo el camino hasta que el chico se bajó una parada antes de la suya propia. Había sido una bonita anécdota, pensó Baekhyun, entrelazando sus dedos y sonriendo como un idiota.

Sin embargo, la cosa no se quedó ahí.

Durante semanas, los martes y jueves tomaba aquel tren en dirección a su casa por las tardes y siempre se encontraba con el mismo chico en el mismo vagón. De hecho, era casi ridículo como el mismo asiento frente a él siempre estaba disponible, invitando a Baekhyun a sentarse y a comenzar aquel juego de miradas. Porque cada uno de aquellos días, Baekhyun se encontraba llevando algo igual o muy parecido a lo que llevaba aquel chico. No fallaba ni un sólo día, de hecho, un par de veces se habían encontrado llevando atuendos casi idénticos y se habían recorrido tantas veces con la mirada al cabo de aquellas semanas que Baekhyun creía conocer su cuerpo aún sin tocarlo.

Por eso, aquel día, Baekhyun no iba realmente con nada estruendoso, una sudadera gris y un chaquetón negro junto con la mascarilla negra porque hacía frío en la calle y no quería pillar un resfriado. Pero estaba nervioso, y cuando el tren llegó, contó los vagones para saber en cuál debía meterse exactamente.

Entró tan pronto se abrieron las puertas, descubriendo con desazón que su asiento habitual estaba ocupado. Miró entonces al frente y su corazón casi se desboca cuando vio que el chico llevaba un conjunto exacto al suyo y que había un sitio libre justo a su lado. Como si el destino quisiera darle un empujoncito a Baekhyun.

El chico también había fijado su mirada en Baekhyun, sonriendo mientras éste se acercaba y se dejaba caer en el asiento contiguo. Se mantuvieron en silencio unos minutos, pero Baekhyun no pudo aguantarlo más y, lamiéndose los labios, se giró para hablar con el chico.

- Perdona -empezó, pero realmente no le hubiera hecho falta eso ya que el otro no había dejado de mirarlo-. Puede que esto suene raro y un poco acosador, pero llevamos semanas llevando la misma ropa y, bueno, me gusta creer que las cosas pasan por una razón -antes de que pudiera arrepentirse, alzó una mano frente a su cara-. Soy Byun Baekhyun.

- Park Chanyeol -le respondió con una voz que Baekhyun estaba seguro que era ilegal porque le hacía cosas que no debía a su raciocinio-. Yo también me he fijado, Baekhyun.

Su nombre sonaba mucho mejor pronunciado por él, definitivamente.

- Me preguntaba si, ya que compartimos el gusto por la ropa, lo compartiremos por otras cosas.

- ¿Otras cosas como qué, Baekhyun? -y el brillo travieso en su mirada le dijo que sabía muy bien a qué otras cosas se refería, pero que también quería jugar a su juego.

- ¿La comida japonesa?

El chico sonrió, tomándolo de la mano y haciéndolo salir del tren una parada antes de lo que solía.

- Te voy a llevar al mejor restaurante que conozco.

Baekhyun sonrió y entrelazó sus dedos con los de aquel chico, dejando que lo guiara.  

ChanBaek 3.6.5 - Drabble Project #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora