#165

3.4K 653 120
                                    

Slight angst, Fluff

Fairy!au

Advertencias: continuación del drabble 145

835 palabras


Habían pasado varios meses desde que Junmyeon había ido a visitar a Baekhyun. En ese tiempo, Baekhyun intentó por todos los medios seguir el plan para no dejar que Chanyeol muriera.

Según su amigo, debía cuidar de Chanyeol no como el hada que era, si no como si fuera un amigo, mostrarle su cariño y comportarse con él como si fuera un humano. Eso haría que el pequeño hada se sintiera parte de la vida de Baekhyun y haría que no desapareciera cuando terminara su misión.

Baekhyun se desvivía por Chanyeol. Tomó la costumbre de llevarlo al trabajo, en su cubículo nadie entraba y cuando debía salir, dejaba a Chanyeol distraído con lápices de colores y un folio blanco.

Se lo llevaba al cine escondido en su chaqueta, a tomar chocolate caliente a la cafetería de la esquina de la que Junmyeon era el dueño y en la que la camarera, que se presentó como Kwon Mina, estaba al corriente de la existencia de Chanyeol y le ponía una tacita pequeña especialmente para él.

Llegó un punto en el que Baekhyun dejó de intentar que Chanyeol formara parte de su vida, porque simplemente no lo necesitaba. El pequeño ser ya era parte de su vida, era una parte grande y necesaria. No podía imaginarse su vida ya, no después de casi un año con él, despertándose sin el beso en su nariz que Chanyeol le daba todos los días, sin el calor junto a su cuello mientras caminaba y el hada estaba allí sentado, sin su animada charla mientras comían juntos.

Por eso, conforme los días pasaban y su dolor se iba mitigando, Baekhyun comenzó a tener miedo. Miedo de que no hubiera hecho lo suficiente; miedo de que, cuando el dolor hubiera desaparecido, Chanyeol desapareciera también.

El día llegó.

Chanyeol simplemente cerró los ojos y se desmayó, cayendo en el sofá mientras Baekhyun gritaba. El hombre lo llamó, lo llamó muchas veces por su nombre y le pidió que no lo abandonara. Intentó reanimarlo, intentó que reaccionara, pero nada sirvió. Y cuando no pudo hacer más, simplemente lloró. Sentado en el suelo, apoyado en el sofá en el que yacía Chanyeol y con la cabeza enterrada en sus brazos, Baekhyun lloró por haber perdido lo que más quería.

No sabía cuánto tiempo había estado dormido, en algún punto su llantera lo hizo perder la consciencia, pero ahora simplemente notaba suaves caricias en su cabeza. Alzó la vista despacio, pero no vio al pequeño hada. En su lugar, un hombre aparentemente de su edad, con el pelo rojo fuego y una sonrisa que iba de lado a lado en su cara adornada por unas graciosas orejas despegadas, estaba sentado y acariciaba su cabeza.

- Buenos días, Baekhyun -le dijo con voz ronca pero familiar a la vez.

El hombre se inclinó sobre él y le dio un beso en la punta de la nariz, justo como Chanyeol solía hacer.

Despacio, Baekhyun se levantó, su mirada fija en el extraño que había dejado caer su mano. Llevaba una túnica amarilla y azul, un gorro picudo descansaba en el suelo y todo era tan familiar que las palabras salieron de su boca sin pensarlas.

- ¿Eres Chanyeol? -el hombre sonrió más ampliamente-. Pero ayer... tú moriste.

Chanyeol se levantó, y Baekhyun se dio cuenta de que era mucho más alto que él, irónico si pensaba en lo pequeño que había sido antes.

- Ayer morí como hada -le explicó-. Junmyeon te lo dijo, ¿no es verdad? Que las hadas morimos cuando nuestro trabajo termina.

- Pero me dijo que si te hacía ser parte de mi vida, no morirías -le contestó el más bajo, con voz estrangulada.

- Eso no era del todo cierto -le sonrió, acercándose un poco a él y cogiéndole las manos-. Un hada siempre muere al terminar su trabajo, pero es posible que renazca si la persona a la que sanó llega a amarlo de verdad.

- Pero... Junmyeon...

- Junmyeon no podía decirte que debías amarme, porque entonces tu amor no habría sido verdadero, sino impuesto -le sonrió-. Aprendiste a amarme por quién era y por cómo te hacía sentir estando conmigo, no porque tuvieras que hacerlo -se acercó un poco más, acariciando su cara y Baekhyun pudo ver en sus ojos que estaba maravillado de verlo así, tan cerca, y finalmente como iguales-. Junmyeon sabe lo que es eso, porque a él le ocurrió con Mina.

- ¿La camarera? -preguntó Baekhyun, haciendo sonreír al otro.

- Exacto -asintió, y se acercó un poco más a su rostro, casi rozando sus frentes, antes de volver a hablar-. Gracias por amarme como yo te amo, Baekhyun.

El nombrado no pudo aguantarlo más. Soltó una risa estrangulada y lo besó, dejando que las lágrimas de alivio y felicidad corrieran por su rostro mientras se abrazaba a Chanyeol, indescriptiblemente feliz por tenerlo allí con él, por haber conseguido que no muriera.

Porque Chanyeol era, y ahora más que nunca, lo más importante en su vida.  



Hoy necesitaba dedicarme el drabble a mí misma, perdón(?

ChanBaek 3.6.5 - Drabble Project #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora