❀ Fluff
❀ Hybrid!au
❀ Advertencias: continuación del drabble 147
❀ 1229 palabras
- Chanyeol, levanta, son las siete y me tengo que ir -habló Baekhyun con voz estrangulada, intentando escapar del agarre al que lo tenía sujeto el alto.
El chico gato movió sus orejas gatunas y ronroneó suavemente, pegándose más aún a Baekhyun. Éste tuvo que soplarle en su oreja humana más cercana para hacer que el híbrido finalmente lo soltara, dando un bote fuera de la cama. El más bajo rió mientras el otro se frotaba los ojos de manera adorable, haciendo que su corazón se saltara un latido.
- Es muy temprano -se quejó con voz pastosa.
- Tengo clase -se excusó el más bajo.
Chanyeol se puso en pie y se dirigió hacia él, colocando las manos en sus hombros muy serio. Se inclinó poco a poco sobre él, sus rostros acercándose cada vez más, sus respiraciones mezclándose y sus ojos fijos en los ajenos, brillantes. Pero lo pensó mejor y en el último segundo, se decidió por apoyar su cabeza en el hombro ajeno y abrazarlo.
- Ten un buen día hoy, Baekhyun -susurró.
- S-sí -respondió como pudo el humano.
Chanyeol se separó, sonriendo y rozó con sus dedos la mano del más bajo antes de volver a meterse en la cama. Intentando no sonrojarse mucho y que su corazón volviera a su ritmo habitual, Baekhyun cogió su ropa y su mochila, y salió de la habitación.
Hacía ya varios meses que Chanyeol vivía con él. Desde el principio, el híbrido había mostrado su predilección por Baekhyun, pegándose a él siempre que podía y rehusando dormir en una cama extra que tenía en su habitación como sugirió el más bajo. El híbrido dormía con él, lo perseguía por la casa y, en general, no se comportaba del modo en que normalmente lo hacían los híbridos de gato.
Sin embargo, hacía un tiempo que algo había cambiado.
Baekhyun podía notar que Chanyeol se pegaba más a él, lo olisqueaba a veces y lo miraba con intensidad mientras en sus ojos brillaba algo que descolocaba a Baekhyun. El chico no quería admitirlo, ni siquiera a sí mismo, porque entonces levantaría la tapa en la que había encerrado sus sentimientos hacia el híbrido.
No quería imponerle sus sentimientos a Chanyeol. Baekhyun se había dado cuenta de que quería al otro mucho más que como una mascota o como un simple compañero, incluso más que a un amigo; pero no se atrevía a decirle nada. Chanyeol no tenía a dónde ir, dependía de él, y no quería que aceptara su amor simplemente por tener un lugar donde quedarse. O peor, que lo rechazara y que se fuera.
Así que cuando el más bajo veía aquella mirada que hacía que se le acelerara el corazón, sólo podía pensar que era él proyectando sus anhelos y lo que quería ver en Chanyeol, no lo que el híbrido realmente trataba de demostrarle.
Quizá por no tener que enfrentarse a la dura realidad y escudándose bajo el pretexto de que necesitaba dinero para mantenerlos a ambos, Baekhyun tenía dos trabajos aparte de los estudios que lo extenuaban físicamente. Aquel día le tocaba turno de tarde en la cafetería, lo que le suponía salir a las nueve y media de la noche. Al llegar, una cena simple pero de olor delicioso lo estaba esperando.
- Bienvenido a casa, Baekhyun.
Unos brazos lo rodearon, la calidez extendiéndose por su cansado cuerpo y sonrió, abrazando al híbrido de vuelta e inspirando su olor.
- Estoy en casa.
Cenaron juntos, y durante toda la cena, los ojos de Chanyeol estuvieron fijos en él, haciendo que se sonrojara y su corazón latiera más deprisa. Creyó incluso ver cómo sus ojos seguían el recorrido de su lengua por sus labios al lamer los restos de agua que habían quedado tras beber. Estaba casi convencido de que, esta vez, no podrían ser imaginaciones suyas.
- Tienes ojeras.
- ¿Qué? -preguntó Baekhyun, sorprendido. Bueno, eso no lo esperaba.
- Llevas días con ojeras en la cara y no se te quitan -explicó-. No te quedan bien -negó con la cabeza, como dándose la razón.
Eran ojeras lo que Chanyeol veía en su cara. Ojeras. Soltó una risita sarcástica y se levantó de golpe, haciendo caer la silla y asustando al híbrido.
- Perdona que tenga ojeras por levantarme temprano para estudiar e ir a los dos trabajos que tengo para que podamos comer -no alzó la voz, pero fue casi como si lo hiciera-. Me voy a la ducha.
Se dirigió hacia el pasillo, pero apenas había recorrido la mitad cuando sus piernas fallaron por el extremo esfuerzo al que estaba sometiendo a su cuerpo y cayó. Pero no se estrelló contra las frías losas. Chanyeol lo había seguido y había conseguido cogerlo antes de que cayera.
- Te dije que tenías ojeras -le reprochó, cogiéndolo en volandas y llevándolo a su cuarto, donde lo dejó en la cama y le prohibió levantarse hasta que no volviera. Cuando lo hizo, llevaba un yogur y un trozo de chocolate que puso en sus manos-. No deberías trabajar tanto.
- ¿Estabas... preocupado por mí?
El híbrido asintió y Baekhyun se sintió estúpido, pensando que Chanyeol le estaba reprochando su mal aspecto. Comió en silencio y aceptó el vaso de agua que el híbrido le trajo cuando se le acabó la comida, bebiendo con el otro sentado a su lado, observándolo.
- Tengo que trabajar para mantenernos a los dos -suspiró cuando el gato lo miró mal por ponerse la alarma a las cuatro de la mañana para su empleo de repartidor en una panadería.
- Yo trabajaré.
- Chanyeol, ya hemos hablado de esto. Por ley, los híbridos no pueden...
- Pero sí puedo -el alto sacó del bolsillo de sus pantalones un panfleto arrugado y lo puso delante de él-. La mujer del quiosco me lo dio. Puedo trabajar ayudando a otros como yo. No es mucho dinero, pero no quiero que trabajes tanto.
- Esto... -el panfleto realmente era para voluntariado remunerado para híbridos-. Pero no sabemos si te cogerán, Chanyeol, no podemos...
- Ya me han cogido -le dijo, sus mejillas tornándose algo rojas-. Empiezo el sábado. Quería decírtelo esta noche cuando viéramos la película.
Baekhyun lo miró, aún atónito por toda la información, cuando el híbrido alzó una mano y acarició su mejilla con el pulgar.
- No quiero que trabajes tanto. No quiero que te pase nada.
Y ahí estaba aquel brillo en su mirada, el mismo que había tenido antes, y el más bajo se cansó de tener que presionar la tapa de aquella caja.
Se inclinó hacia delante y tiró de la pechera de la camiseta ajena para hacer chocar sus labios, dándole el beso que quería darle desde hacía mucho tiempo. La respuesta no se hizo de rogar y pronto Chanyeol lo abrazaba y le devolvía aquel beso, haciendo que el pecho de Baekhyun explotara de felicidad.
- Te quiero, Baekhyun -dijo el híbrido con voz ronca cuando se separaron, atrapando el rostro del más bajo entre sus manos, quien no podía parar de sonreír.
- Y yo a ti, Chanyeol.
- Prométeme que trabajarás menos.
- Y tú que me dejarás levantarme para ir a clase -el alto hizo una mueca pero sonrió suavemente.
- Hecho.
Ambos rieron por lo bajo y volvieron a besarse. Felices, simplemente, de estar el uno junto al otro.
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ChanBaek 3.6.5 - Drabble Project #1
FanfictionProyecto de Drabbles Chanbaek: Un día, un drabble. Durante un año, subiré un drabble ChanBaek al día, independiente del anterior. ❀ Pareja: ChanBaek ❀ Extensión: Drabble (365 al acabar el proyecto) ❀ Género: Variable (pero mayoritariamente f...