ChanBaek 3.6.5 - Drabble Project #1

#57

❀ Fluff, Comedia

❀ Cinderella!au

❀ 1074 palabras

- ¿Y podré ir al baile y encontrarme con mi príncipe?

Baekhyun forzó una sonrisa mientras miraba a la chica cuyos ojos resplandecían a la cara, mordiéndose la respuesta que realmente quería darle cuando una voz demasiado parecida a la de su jefe Junmyeon lo regañó desde el fondo de su cabeza.

- Claro, Seolhyun -le dijo a la chica-. Sólo tienes que volver antes de las doce, o se romperá el hechizo.

- Lo haré, hado madrino, lo prometo -aplaudió la chica, emocionada, apartándose un mechón de pelo sucio de la cara.

Baekhyun suspiró entonces y agitó su varita, haciendo que de ésta brotaran chispas y que la magia danzara alrededor de la chica, cambiando sus harapos por un bello vestido, su pelo enmarañado por un moño perfecto y sus pies descalzos por dos zapatos de cristal.

- Perdona, hado madrino -le dijo la chica-, ¿cristal? ¿No había nada más incómodo?

- Niña, es mi magia y son mis reglas -le espetó de mala manera, empujándola hacia lo que había sido una calabaza hacía unos segundos y ahora era un carruaje.

- ¿No hubiera sido mejor un coche, algo más rápido? -siguió diciendo ella, mirando alrededor.

- Para malvivir fregando de rodillas eres muy exigente -le dijo, metiéndola en el carruaje y cerrando la puerta-. Hale, ya se puede ir -le dijo al cochero.

- ¡Al menos dame unas tiritaaaaaas! -el grito desesperado de la chica se perdió en la lejanía, conforme el coche de caballos se alejaba.

El hado bufó, agitando su varita para cambiar su ropa de trabajo, una especie de batamanta con capucha horrorosa que odiaba, por algo apropiado para una gala. Se teletransportó entonces al baile del príncipe, llegando obviamente antes que Seolhyun, quien en ese momento estaría aún a quince minutos de su meta, y desoyendo las indicaciones expresas de su superior.

La verdad es que no era culpa suya que le hubiera tocado estar de guardia aquella noche en la Base de Hados Madrinos Buenos, y muchos menos que le hubiera tocado Seolhyun. Hizo todo lo posible por no tener que atender él a esa llamada, incluso llamó a su superior para fingir estar acatarrado, pero Junmyeon vio claramente su mentira y el por qué de su reticencia y no permitió que no acudiera.

Porque Junmyeon sabía que todo era por el príncipe Chanyeol.

Cuando apenas era un hado en prácticas, Baekhyun se había tropezado con el príncipe Chanyeol cuando se escapó de su cuidador, apenas tenía su misma edad, y desde entonces se había quedado prendado de él. Habían compartido una mirada, una sonrisa, y unas palabras que les sirvieron para conocer sus nombres y orígenes. Su yo de trece años había aprendido lo que era el amor en un momento, y lo que eran los celos y la posesividad dos momentos después, cuando una princesita cualquiera cogió del brazo a su Chanyeol y lo arrastró dentro de palacio. A pesar de la mirada de Chanyeol, Baekhyun no pudo ir a por él porque su hado maestro lo había regañado por escaparse y lo había obligado a volver.

Por eso, cuando el baile para encontrarle esposa al príncipe fue anunciado, Baekhyun casi escupe veneno, cosa que no podía hacer por se un hado bueno y no, Junmyeon, no he dicho nada acerca de la madre de nadie.

Seolhyun era una pobre huérfana maltratada por su familia adoptiva, se había hecho un traje especial para ir al baile y sus malvadas hermanastras se lo habían roto. Por eso, la alarma había saltado en la central, alertando a la Base y, por consiguiente, jodiendo a Baekhyun.

Pero Baekhyun no iba a perderse aquel baile ni la oportunidad de ver a Chanyeol, así que con la excusa de cuidar de Seolhyun, se había colado en aquella fiesta. La fiesta era pomposa, glamourosa y más cosas terminadas en -osa, pero a Baekhyun sólo le importaba ver a Chanyeol.

Santísima Campanilla.

Chanyeol estaba tan terriblemente guapo que a Baekhyun le dio igual mezclar cuentos en la maldición que salió de sus labios. El príncipe estaba tan alto, tan guapo, tan asdfg que no podía evitar que su corazón se acelerara y le temblaran las rodillas. En un momento dado, Chanyeol pareció notar que lo miraban y alzó la vista, mirando directamente a los ojos del hado. La conexión fue instantánea, tan real y tangible que a Baekhyun le parecía mentira que tuviera que organizar un baile para buscar esposa cuando lo tenía a él.

- ¡Hado madrino, estás aquí! -la voz de Seolhyun lo sobresaltó, haciéndolo girarse para ver a la confusa muchacha.

- ¡Sí! Eh... vengo a vigilar que no te pase nada malo, hay... comida en mal estado -se inventó una excusa sobre la marcha-. Me cambié para no llamar la atención, pero mejor ve a lucir tus encantos por ahí.

- Eres el mejor -la chica lo abrazó, sonriente, haciendo que hasta se sintiera mal antes de irse.

Baekhyun volvió a mirar a Chanyeol, pero éste ya no estaba por ahí. Triste, se acercó a la mesa con el bufé.

Durante toda la noche, vio a Seolhyun bailar con unos y otros nobles, reír y mirar con mala cara el bufé, rehusando comer nada que Baekhyun no le hubiera dicho con anterioridad que podía comer. Durante un buen rato, mucho rato, estuvo hablando con su príncipe, hasta que ambos salieron al jardín, haciendo que su corazón doliera y se encogiera. Los minutos pasaban y ellos no volvían, así que Baekhyun salió al balcón, mirando alrededor intentando buscarlos, desesperándose poco a poco conforme no los veía.

- ¿Buscas a alguien?

Aquella voz ronca en su oído lo hizo girarse, su príncipe alto, guapo, maravilloso y asdfg estaba allí, muy cerca, demasiado cerca y sonriéndole.

- Chanyeol... quiero decir, príncipe, pensé que estabas con...

- Puedes llamarme Chanyeol, Baekhyun -el más bajo abrió la boca, sorprendido, haciendo reír al otro-. Por supuesto que recuerdo tu nombre, ¿cómo olvidarte?

Llevó su mano a la mejilla del hado, acariciándola.

- Llevo tanto tiempo esperando que volvieras a mí, que ya no sabía cómo hacerlo -susurró, acercándose aún más si cabe-. Tuve que inventar este baile estúpido para intentar atraerte.

- ¿Y Seolhyun...? -probó Baekhyun, intentando que su corazón no se desbocara.

- A ella creo que le interesa más mi prima Jimin -le sonrió, pasando su pulgar por el labio inferior del hado antes de susurrar-. ¿Puedo?

Baekhyun prefirió besarlo él mismo.

Moodboard por GeraldineTihista ❤