Boxeadora 3'ra Temporada "Hot"©™Completa

Capítulo 119 Salvajismo 3/3

Escuchar Right Thing-Rosie Lowe😏
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Hice lo que me pidió, tomé un encendedor y prendi la vela aromática.Me acerqué a paso lento temiendo quemarme y una vez que llegué al sillón, me puse detrás suyo.

—¿Estas segura de esto?—Pregunté en voz baja mientras corría el cabello de su nuca.
—Sí,ahora no seas gallina y hazlo—. Sarah se quejó,mientras bajaba la cabeza.

Asentí y relami los labios al momento que dejé caer la primera gota de cera caliente sobre su espalda.
Vi su cuerpo tensarse y luego un quejido me despertó mis sentidos más oscuros y calientes que podía estar guardando desde hace mucho.
Dejé caer ésta vez una tira sobre su espalda baja y la escuché gemir.

—Cielos....esto es tan bueno—susurró mientras empezaba a moverse de adelante hacia atrás.

Verle hacer ese movimiento me estaba mandando al infierno. Y el estar muy cerca hacia que su trasero al acercarse rozara contra mi miembro flácido.

—Otra vez..—gimió y luego paró de moverse—por favor Rodriguez, quiero más —pidió con voz aniñada fingiendo inocencia.

No la hice esperar,soplé un poco la mecha e incliné la vela para luego empezar a hacer dibujos sobre su piel,escuchando como se quemaba lentamente.

—¡Oh cielos!—gimió alto y luego se dejó caer hacia adelante.

Frunci el ceño al escucharla con su respiración entrecortada y sonrei orgullosa por su rostro reflejado en aquél espejo.
Me acerqué a su oreja y sonreí.

—Te has corrido sin mi permiso—susurré en su oído y luego mordí su lóbulo —chica mala,te castigaré.
—hmm sí... no pude evitarlo—rió entre dientes y se volteó a verme —¿qué quieres Pao?—preguntó coqueta mientras se sentaba de golpe.

Guardé la vela luego de apagarla y me giré al verla con maldad.

—No lo sé....quizás puedas despertarme un poco—acaricié mi miembro y sonreí de lado al ver su mirada encendida.
—Dí la palabra mágica amor— Contestó burlista mientras se ataba el cabello con una gomita.

Me acerqué apresurada y gruñí al verle la piel levemente cubierta con una capa de sudor.

—Chúpala,ya te ayudé bastante, ahora me toca disfrutar de tu maldita boca—comenté con el ceño fruncido provocando una risa de su parte.
—Uff Pao, sí que eres una caliente..pero ¿sabes qué?,tú no mandas en éste momento— Se arrodilló y con una mano empezó a masturbarme —¿está claro?.

<<Da igual, te voy a dar tan duro que mañana no podrás caminar>>.

Abrió su boca y dejó escapar su lengua,la pasó lenta y tortuosamente por todo mi ahora miembro endurecedido como piedra y luego relamio sus labios.

Su manos apretaban y acariciaban mis bolas haciéndome entremecer mientras que por mi parte me sostenía de su hombro,temiendo caerme al llegar al orgasmo.
En el momento en que se lo metió a la boca y empezó a succionar mi mano cayó sobre su culo. No lo evité, que lo esté moviendo de un lado a otro me tenía totalmente hechizada.
En una oportunidad apreté sus nalgas y luego se las separé.

—Uhm.. ¡No!—me quedó mirando y luego se sentó correctamente—¡A la mierda Paola!,¡no se te ocurra!—Manifestó un poco nerviosa por el tono de su voz.

No dejé que siguiera hablando.Me lancé a besar y morder esos labios carnosos que carga y me hace perder la cordura cada día de mi vida. Era un beso cargado de deseo y pasión.La abracé y la apreté a mi cuerpo con fuerza demostrándole cuanto la quiero.
Nos separamos un momento para calmar nuestras respiraciones y la miré con ternura.

—Prometo no hacerte daño, vamos Sarah, siempre quise esto.. —susurré sobre sus labios una vez que cerré los ojos.
—De acuerdo, tengo tu palabra —me dio un pico y se acomodó en la posición anterior sobre el sillón.

Tomé sus caderas y la puse más cerca de mi.Tomé mi miembro y empecé a frotarme por su entrada súper lubricada.La sensación me causó escalofríos mezclada con un poco de deseo acumulado.
Luego de unos par de segundos de haber disfrutado de ese roce me dirigí a trabajar su ahora apretado agujero.
Empecé a empujar y me gané un puñetazo lleno de ira.

—Se ve que eres una salvaje, Tarzán e inexperta.¡Pon un poco de lubricante!—Se quejó molesta mientras fruncía el ceño.
Me dirigí al mueble y tomé la botellita del primer cajón.

—¿Segura que no es crema áloe vera?—Me burlé entre dientes y recibí como respuesta su mirada asesina.
—Sé atenta Pao —susurró mientras se movía haciendo crujir el cuero bajo sus rodillas.

Quité la tapa de la botellita y empecé a barnizar su agujero con esmero. Me reí por un suspiro que largó justo al momento que le pellizque un muslo y luego apretó sus manos en el apoya brazo.
Comencé a empujar lentamente,dándole tiempo a que se acostumbre.Al parecer se relajó y de apoco fui adentramdome. El calor me sofocaba y en cualquier momento comenzaría a llorar por el apriete que tenía en mi cabeza.
Luego de haber entrado por completo me quedé quieta y mordí mis labios,sintiéndome tan bien.

—Bueno.ahora tienes que..¡No seas Paola!,¡Salvaje!—exclamó en voz alta por mi bruscos movimientos.
——oh cielos...esto está rico,mmm—Palmié su culo y lo apreté mientras admiraba perderme en su interior.
—¡Despacio!—sollozó e intentó apartarme pero no lo logró.

Tomé sus manos con fuerza y seguí moviéndome a un ritmo constante.

—¡Mierda!,¡ya no me aguanto!—me eché hacia adelante,sobre su espalda y mordí su hombro cuando llegué al climax.

Rodé los ojos y gruñí al sentir sus contracciones.
Besé su cuello,nuca y aparté el cabello de su rostro,atrayéndola para besarle con pasión.

—Te amo—dije alegre provocando una sonrisa de su parte.
—Cabrona...me rompiste el toto.También te amo—contestó seria mientras se acomodaba el cabello.
—Culo,te rompí ese bonito culo—solté rápidamente.