Capítulo 18

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A la mañana siguiente, Scarlett preparó en el pizarrón de la Oficina toda la hipótesis. Un ruido la atormentó cuando la puerta se cerró. Era Samantha con un traje de oficina. Llevaba una pollera negra hasta las rodillas, unos cancanes negros, una camisa blanca y un saco gris.

—Dios santo, Samantha me asustaste.— Volvió su vista al pizarrón y al marcador. Samantha dejó la cartera en una silla y se sentó.

— Hoy te asusto yo y mañana te asusta otra muerte. ¿Qué has averiguado Scar?

—Sólo que el asesino está creando un plan que involucra a Mazon Crossox y a Tate Perwish. Jason Marchrest, William Foster fueron llamados para ese plan y lo rechazaron por completo. Este asesinó quiere llamar la atención de alguien y la verdad que me está poniendo nerviosa. Se juntaron en el puerto, pero por un problema no pude terminar de escuchar la charla.

Cerró los ojos con fuerza al recordar a Jason interrumpir su trabajo. Bufó y miró a Samantha con tranquilidad.

— ¿Alguna muerte?— Samantha negó y le tiró el diario frente a ella.

— Ninguna, pero hay algo bueno.— Scarlett abrió el periódico y llegó a la página 5 de las amarillentas hojas.— Encontraron los cadáveres desaparecidos.

Ambas se pararon y salieron disparadas hacia la patrulla.

—Vamos al hospital. Necesitamos llegar.— Scarlett comenzó a conducir y lo único que se escuchaba era Faded de Alan Walker en la radio.

<<Bien para empezar a trabajar>> pensó mientras ponía segunda y aceleraba. Samantha apretó un botón rojo y comenzó a sonar la sirena.

Estaban en la sala de cuerpos guardados, Scarlett se puso su guante de látex en la mano derecha y Samantha tenía el anotador y la lapicera en las manos ya que le daba impresión.

— Bien, comencemos. Este cuerpo es de Stan Smith, catorce mordeduras en el cuerpo, falta de brazo derecho y con todo menos el corazón y el cerebro. Los ojos están intactos y está cocido, excepto por el agujero en el pecho, la mitad de la cabeza cortada para sacar el cerebro. Dame la lapicera.

— No hagas algo asqueroso por favor.— Le rogó Samantha mientras le estiraba la lapicera para que ella la agarrara.

Clavó la lapicera en el pecho y con su fuerza sobre humana comenzó a sacar los puntos que unían la piel. Al terminar le devolvió la lapicera y Samantha la agarró con dificultad ocultando su cara de asco.

Dentro del cuerpo habían hojas, hojas de otoño de diversos colores. Mostaza, marrón, amarillo, etc y todas salieron disparadas al cortar el cuerpo.

—Dame otro guante de Látex.— Samantha le dió otro y se lo puso en la mano izquierda. Comenzó a revólver y por su olfato de Licántropo supo que las hojas estaban en el bosque de los Duendes y luego el cuerpo fue llevado a un pozo para después llenarlo de hojas. — Anota. Bosque de los Duendes.

—Dios, que asco.— Decía Sam mientras anotaba.

Scarlett se detuvo al ver una nota, se la metió al bolsillo y siguió buscando. Encontró un encendedor con el escudo de los Estados Unidos y al prenderlo sus ojos se bañaron en furia.

— Emmanuel Nicrery maldito hijo de puta.— Susurró. Lo guardó y siguió buscando.

No había encontrado nada más, así que se fue al cadáver de Marina Tafre.

Le abrió las piernas para buscar entre ellas. Scarlett aprendió que cuando una mujer es asesinada por un Licántropo, la mayoría la viola y la mata o la mata y le mete cosas dentro del útero. Cerró los ojos con fuerza para poder evitar el olor a vagina descompuesta que entraba por sus fosas nasales y le revolvía el estómago.

—Anota. Violada, penetración profunda y desgarrada.— Samantha asintió y anotó.

Scarlett se remango y metió la mano dentro del útero de la mujer, comenzó a tocar y a buscar. Samantha se tapó la boca y salió de la habitación como una bala.

<<Y tú mano no está dentro del cadáver.>> Pensó y corrió la mirada para no lanzar ahí mismo. Sacó del útero una pulsera color crema hecha con perlas importadas.

— Alison de Nicrery. ¿Qué estarán haciendo esta pareja de ojos rojos?

Alison y Emmanuel eran los primeros ojos rojos que Scarlett conoció. Ellos siempre andaban de un lugar a otro, matando, torturando y secuestrando personas. Alison estaba pasándose por los campos de Will y Scarlett la encontró, la atacó y le sacó el ojo izquierdo.

Emmanuel muy molesto, fue hablar con William y dijo que se arrepentirán por lo sucedido. Ambos se fueron y no volvieron.

Scarlett y Samantha se fueron a la patrulla. Ambas con algo de horror en los ojos por lo que tuvieron que hacer, pero con un poco más de calma por encontrar más pistas.

— ¿Y qué hacemos ahora?— Preguntó Samantha algo preocupada.

— Ahora iremos al bosque de los Duendes, luego sabremos que hacer. No me acuerdo muy bien dónde era, se que estaba cerca de Homer pero no recuerdo bien.

— Yo fui hace un año ahí. Te guiaré con gusto.

— Okey.— Asintió. Se subieron a la ruta y se formó un silencio.

<<Piensa, piensa, piensa. ¿Por qué habrán vuelto? Quizás la carne de Seward es más fresca que la de Rumanía.>> Scarlett río ante su pensamiento y Samantha la miró raro.

—Ya se que soy fea, pero tampoco para que lo hagas notar.— Ambas rieron.

— Me río por una estupidez que pensé. Cuéntame, ¿qué hiciste en tu día libre?

— Mmmm....Nada, solo leer, ver la telenovela, llamar a mi esposo, limpiar la casa y salir a correr, tenía un tapón en el estómago de tantas donas.— Sonrió.—¿Qué hay de ti?

—Yo me junte con un amigo que no veía hace tiempo, investigar un poco y salir a pasear en la noche. Estaba pensando ser la próxima víctima para poder atrapar al desgraciado.— Sonrió ante sus palabras y su vista se enfocó en los ojos mieles de Samantha.

— Me enteré que compraste una casa.

—¿Quien te lo dijo?— Scar volvió la vista al frente e intentó sonreír para no mostrar una cara de asombro.

— Me lo dijo el señor que la vendía cuando fui a ver a nuestros padres.

—¿Nuestros padres? ¿De qué hablas?

— Yo soy tu hermana Scarlett.

My WeaknessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora