My Weakness

Capítulo 26

Se despertó por los rayos del sol en los ojos, iba hacer un día caluroso y muy pesado.

Se intentó mover pero fue en bano ya que los brazos musculosos de Jason la tenían atrapada. Suspiró y se quedó acostada. Se da la vuelta y queda frente a frente con Jason, comenzó a ver sus rasgos faciales y acarició su rostro, Jason suspiró y siguió durmiendo. Scarlett escondió sus dedos en el cabello negro del jóven y la otra mano la apoyó en su mejilla.

Jason abrió los ojos y sonrió al ver lo que ella hacía.

—Hola Nena.— Ella sonrió. Ya se estaba acostumbrando a que la llamara así.

—Hola Jason, ¿cómo dormiste?

—Bien, mejor si es contigo.— La abrazó más fuerte pero no llegar al punto de apretarla.

—Eres muy bonito. —Al decir eso, sus mejillas se tornaron de rojo carmesí y a Jason le pareció muy tierno de su parte.

—Tu estas muy buena. —Le guiño un ojo. Scarlett se puso seria.

—Ya la cagaste, ¿por qué siempre la cagas? —Lo soltó y se sentó, salió de su agarre y comenzó a vestirse.

—Nena, no lo dije de mal gusto. Es cierto, eres muy bonita y... —Scarlett suspiró, se puso el pantalón y los zapatos.

—Sólo olvida lo que te dije, intentaba coquetear contigo pero tu te pasas.—Se ató el cabello en una coleta y se dirigió a la puerta.

Jason se había quedado sorprendido. Sabía que ella le estaba coqueteando, pero ninguna chica le había dicho lo que estaba haciendo, Scarlett era la primera.

—Pero Nena, no te enojes, ven aquí.—Apoyó su mano en el lado vacío de la cama y la miró con pena.

— Iré con Sam a la ciudad, así que voy a usar el Jeep. Suerte con tu genio.—Salió de la habitación y saludo a todos. Comenzó a prepararse café con leche y se sentó a desayunar, Sam estaba a su lado y se sonreían.— Recién le pedí el Jeep a Jason, así que iremos después del desayuno.

— ¿Enserio te lo dió?— Scarlett asintió.

Después de desayunar, Scar agarró las llaves del Jeep y les dijo que no irían a almorzar ya que se la pasarían en la ciudad. Jason no había aparecido en toda la mañana y Scar se había preocupado por ello. Pensó que quizás lo había herido al ignorarlo, pero luego se dió cuenta que se lo merecía por ser un patán.

Jason bajó las escaleras, ya vestido y con un cigarrillo en los labios. Tenía que ahogar los nervios, estaba arrepentido de haberla tratado así y no quería empeorar las cosas. Sentirla a su lado era paz, como si su corazón supiera que tiene un lugar en donde estar. Tenerla entre sus brazos era como escapar de todos los problemas e ignorar su alrededor con tal de fijarse en ella.

Al bajar se dió cuenta que no había nadie en la casa, salió para afuera y encontró a Scott plantando petunias a cuatro pasos de la casa. Se acercó y antes de hablar se sacó el cigarrillo de los labios y soltó el humo por la nariz.

— Debería fumar más cerca de los árboles y las plantas, así es más fácil de realizar la fotosíntesis.

—Planta rosas para Scarlett le gustarán, que sean blancas así las pinto de negro y le darán un toque extrañó.— Scott asintió, se sacó los guantes y lo anotó en la lista de plantas que tenía que comprar.— Y, ¿dónde está el novato?

—¿Sam? Se fue con Scar, dijeron que no iban a almorzar ya que estarían todo el día en la ciudad.— Se agachó para seguir plantando. Sacó un clavel y lo plantó al lado de la petunia.