Atrévete a soñar

Capítulo 54 "Paciencia"

Seguí su paso algo dificultoso, sus pies se cruzaban entre ellos y le era difícil mantenerse quieto, no sabía si era mi cansancio o en verdad esto estaba ocurriendo.

No tenía idea a donde nos estábamos dirigiendo y estaba casi segura que el tampoco ya que era su primera vez en el campus.

Seguimos caminando y solo nos detuvieron las luces del cartel de salida.
Dio media vuelta en sus tobillos y se quedó observandome con sus brazos cruzados y aunque yo estaba de espalda, podía sentir sus penetrantes ojos cafés mirando fijamente mi espalda.

Mi mente y mi boca querían decir un millón de palabras, preguntar sobre que hacía el aquí, sacarme todas las dudas, pero el tendría que, él me trajo hasta aquí.
Cansada de esperar a que mencionara algún quejido o palabra comencé a dar pequeños pasos volviendo a mi habitación.

-Espera, quiero hablar contigo..-Hasta que al fin habló.-Pero aquí no, sigueme un poco más.

Tomó mi brazo y comenzamos a caminar hacia otro lugar, habíamos salido de la Universidad.. Esto me hubiera traído problemas sí no fuera viernes y no hacía falta traer permiso para salir de aquí.

Estábamos saliendo por la parte trasera del lugar, camino a la entrada principal donde pude observar su auto a lo lejos.

-¿A dónde iremos exactamente? ¿A tu coche?.

-¿Porque, tienes miedo? Hermosa.-Dijo entre dientes.

Apenas podía hablar y caminar, claro que tenía miedo de andar por la carretera con él.

-No estas en estado para estar si quiera arriba del auto.

-¿Y arriba de qué?.-Guiño su ojo.

-Ya basta de chistes estúpidos, si tienes que decir algo que sea aquí o vete.

-Está bien, está bien, gruñosita.

-Iremos en auto a un lugar que te gustara mucho.. Y no, no es la entrepierna de Francisco.-Antes de que termine de decir el nombre le di una bofetada que probablemente no le duela hoy pero mañana lo hará.

Pude ver un poco de sangre en su labio y un pequeño dolor apareció en mi pecho.
Pero nada de culpas Cinthia, el se lo merece.

-Solo estaba bromeando. Creo que no quieres hablar conmigo, soy un estorbo para ti. Lo siento.- Quiso abrir la puerta delantera del coche y le fue imposible.

¿Porque carajos estaba tan ebrio? Después de unos segundos mientras caminaba hacia la puerta de la Universidad pudo subir a su auto.
Y nuevamente el dolor en el pecho apareció, pero no sólo eso, sí no un sentimiento horrendo de que si no lo ayudaba en ese estado era probable que luego me arrepienta.

Deje de lado mi orgullo(Si, yo, Cinthia Grey estaba diciendo eso. ¡Escuchen! En tu cara conciencia!).
Fui a su lado casi corriendo antes de que prenda el motor de esa cosa.

-¿Que quieres Cinthia? ¿Te faltó sacarme una muela?.-Paciencia cariño, paciencia..

-Solo, cambiate al otro asiento. No puedes manejar en este estado.

-La niñita me cuida.-Dijo moviendo su cabeza de un lado a otro.-La niñita cuida al niño de papi.

-Me alegra que reconozcas lo que eres.

-¿A donde me llevas?

-No lo sé, a donde tenías que ir?

-Vamos a la fiesta. Estas en pijamas pero te ves sexi.

-Claro que no, vamos a no lo sé. ¡¡Ni si quiera se donde estamos!!

-Vamos a la fiesta luego te devuelvo el favor.-Se sentó de rodillas en el asiento del copiloto y dio mediavuelta.