El día agotador ya estaba culminando.
La casa se había convertido en un salón de reuniones y señores coquetos bien vestidos, con trajes probablemente de marca y planchados por lavanderias super caras.
Donde mirase se encontraban autos, camionetas y hasta algunos camiones. Jonathan tenia reunión con la mayoría de sus socios, y yo bueno... Mi especie de "reunión" con Eliàncito. De todos modos debía irme o quedarme encerrada con Wilson, William y la pechugona.William, a pesar de solo llevar horas aqui habia tomado demasiado bien la idea de aceptar a esta parte de la "familia".
Estaba casi segura que en cualquier momento explotará e insultarà a alguien sin motivo alguno.
Creo que él también se debe una charla a solas con nuestro padre.Yo no iba a mentirle si pedía mi opinion, jamás olvidaré todo lo que sufrimos y pasamos gracias a que él decidió prácticamente desaparecer de nuestras vidas.
Pero todos necesitamos un padre a quien regañar de anciano, o a quien presentarle nuestro primer novio y que nos cele como si fuéramos aun las niñas de Kinder que siempre seremos para ellos.
Mas haya de eso todos necesitamos un padre.
La melancolía y forma de ver al mundo hicieron que de alguna manera en una pequeña parte de mi perdone a ese hombre. Pero en el fondo siempre recordaré todo el sufrimiento y cada lágrima causada gracias a él.
Solo pido una cosa, cosa que le dije cara a cara a Jonathan sin rodeos ni engaños.Espero no decepcionarme nuevamente de ti, papá.
Mientras peinaba mi cabello y escuchaba a William hablar tiernamente por teléfono con quien supongo seria Agustina, como la debe hechar de menos el pequeño.
Y solo llevaban menos de un día separados.Por otro lado Susan al escuchar como Elián me invitaba el dia de ayer, habia escogido mientras me bañaba un vestido negro con bordes morado, según ella ese color haría resaltar mis ojos azules.
Yo solo termine escogiéndo ropa de mi closet y encontré un bello vestido liso y algo corto pero suelto, el verde manzana le daba una especie de belleza sobrehumana...
Okey quizás no tanto, pero si era bonito.
O tenia que quitarme esa manía de enamorarme de cada vestido.
Puse mis sandalias blancas con taco algo alto en mis pies para no quedar lo realmente baja que era.Esta cena con Elián me tenia los nervios de punta, sabia que hablaríamos de todo lo que nos debíamos hablar y mucho mas. Solo buscaba distracción en arreglarme pero no quería quedar como demasiado exagerada en los preparativos.
8:58pm el timbre de la casa sonó puntual y yo me creía exagerada.
Cepillé por última vez mi cabello dejándolo lo mas prolijo que pude y no sabía que hacer, lo normal seria que baje. Solo que no quería quedar desesperada. Volví a cepillar mi cabello, si lo peinaba una vez más estaba segura que perdería la mitad de el.
Por favor que abra alguien.. Susurre dentro de mi.
-Cinthia Venecia Grey, te está esperando tu príncipe rallado.-Dijo William detrás de la puerta. ¿A qué se refería con "príncipe rallado?".
-No me llames Venecia, imbécil, dile que voy enseguida.-
-Okey, V E N E C I A. Enseguida le digo.-Rodé los ojos, como si me viera detrás de la madera.
Odio, odiaba, detestaba el maldito nombre Venecia. Nadie sabia que tenia ese nombre, hasta logré chantajear a la directora para que nadie escuche ese nombre en mi secundaria... Larga historia.
Mire mis ojos para corroborar la seguridad que obviamente faltaba en ellos.
Oh por Dios casi olvidaba ponerme perfume y un poco mas de color a mis ojos.
¿O así quizás me veía bien?
¡Dios, necesito a mis amigas!Deje de dar tantas vueltas al asunto y abrí la puerta.
El camino hacia el pasillo principal y la escalera fue eterno, mi mente solo pensaba en no tener hacer ni responder preguntas incomodas e inconfesables.
Al llegar al anteultimo escalón para la sala, divise su cabello hermosamente sexi.
Por Dios, porque tenia que ser tan jodidamente lindo que ddigo lindo, hermoso, bello, innumerables sinónimos de la palabra perfección pasaban por mi mente al ver a este simple, elegante y bello muchacho.
Aún no podía creer que con la cantidad de dinero que manejaba su familia sea tan simple y sencillo, diferente a esos chicos que se creen rudos y guapos por solo tener un poco mas de dinero que el resto.
Vestía un suéter blanco con rayas negras horizontales... Ahora comprendo lo de príncipe rallado. De todos modos se veía lindo y su jeans azul, algo corto en sus pantorrillas dejando ver sus elegantes zapatos y obviamente sus anteojos azules, esos que últimamente usaba hasta para ducharse o eso creo.
-Buenas noches señorita Grey.- Sacó sus anteojos para instalar un suave beso en mi mejilla.
-Señor Whitte.-Solo logré decir, siguiendo el dialogo que teníamos.
-Cinthia, ven que no muerdo niña.-Dijo al ver que no quería tomar su mano.
No quería ser grosera ni nada pero si le agarraba la mano sabría que le seria fácil esta noche y yo no quería eso.
Mi intención de esta cena no era hacerle saber que me gusta, si no aclarar todos los malentendidos que tuvimos desde el dia cero.
Jamás tuvimos tiempo a solas como hoy, completamente a solas.Tendría que dejar de repetir eso, mi corazón se aceleraba como tonto.
Tranquila Cinthia, es solo Elián.
Solo que algo mas guapo y no olvidando que están solos en una casa en el medio del campo.La postal perfecta.
Gracias mente malvada y perversa.
-¿Iremos a esa cabaña, verdad?.-Señalé la casa blanca que William habia comentado, personalmente yo no conocía si quiera habia observado esa parte del lugar. Pero si era bonita y espaciosa para ser una simple cabaña de campo.
-Claro, ya relájate sabes que puedes confiar en mi. Vamos Cinthia he estado durmiendo contigo y jamás me propuse nada malintencionado no lo haría ahora. Ni nunca.-
-No es eso, solo... Tengo un poco de frío.-Mentí, una vez que ya estábamos en el inmenso portón de entrada.
-Toma mi suéter. Ven la pasaremos bien, te lo prometo.-Guiñó su ojo derecho luego de una nerviosa y corta risa.
-Eso espero...-Susurre casi sin que él escuche mis palabras.
La noche era soñada, el cielo estrellado y cálido viento. Así eran mis noches favoritas.
Solo deseaba que nada arruine esta pequeña cita.-¿Podríamos llamarla primera cita?.-Preguntó Elián como si estuviera leyendo mi mente.
-¿Eso quiere decir que abra mas?.-
-Si dependiera de mi... Toda la vida.-
-Pues que la dependencia sea por esta cálida noche.-Dije sonriente.
ESTÁS LEYENDO
Atrévete a soñar
عاطفيةCinthia una joven decidida, fuerte y compañera. Tratando de vivir su vida lo mejor que puede. Elián acaudalado, timido e indiferente. Si el quisiera con el mundo a sus pies. Sus vidas se cruzaran casi por accidente, trayendo cambios y... Su futuro s...