No vas a dejarme

108 6 3
                                    

-Como pudistes?

-Como pudistes tu hacerle otra hija a otra mujer -dijo llorando.

-Mis razones te las di, nunca te creí capaz de algo semejante -dije furioso.

-Eres un verdadero machista, mírate, busca ayuda, no te estás comportando como una persona normal, estás obsesivo, ya déjame en paz -dijo abriendo el cerrojo de la puerta saliendo rápidamente.

Abrí la puerta y corrí a detenerla, agarrándola fuertemente por un brazo.

-Sueltame, suéltame -dijo forcejeando.

-Entra a el auto -dije furioso.

-Que no, déjame en paz, que me quites las manos de encima Keinan -dijo empujándome fuerte por el pecho.

Estaba a punto de pegarle pero me contuve. La agarré fuerte por la cintura halándola hacia el auto otra vez.

-Suéltame -gritaba fuerte.

-Que entres te digo -dije empujándola en dirección al auto.

Me ponía resistencia cosa que me sacaba de control, la tomé por la cintura levantándola con todas mis fuerzas, cargándola hasta el auto, la senté en el sillón tirando la puerta. Entré al auto poniéndolo en marcha saliendo de allí rápidamente.

-A donde vas? a dónde me llevas?

No dije nada, tenía mucha furia. La mente me daba vueltas, los celos me mataban. No podía pensar en otra cosa que no fuera en retenerla a mi lado. Estaba enfermo, ella tenía razón, estaba enfermo por ella. Llevaba casi media hora conduciendo cuando me detuve en un paraje solitario. Sentia su inquietud, se le notaba el miedo, la desconfianza y no era para menos, estaba reaccionando como un loco.

-Que pasa? Qué sitio es este Keinan? -dijo asustada.

Mi mente deliraba.

-Estoy enfermo de ti Daiana -dije mirándola sin pestañear.

Palpé su miedo, la ví mirar hacia todos lados y se inquietó.

-Porque dices eso? Llévame a casa porfavor.

-Te lo dije una vez -dije con la mirada ida
-si no volvías conmigo, sería capaz de lo que fuera Daiana, que rápido se te olvidaron mis palabras.

-Keinan, me estás asustando.

- Voy a ser claro contigo -dije mirando a los alrededores.

Estaba nerviosa, tenía miedo, el no estaba pensando claramente.

-Quiero que regreses conmigo, ahora -dije mirándola a los ojos.

-No puedes obligarme -dijo llorando.
-serias capaz de hacerme daño? -dijo inquieta en el sillón.

Me sentía aturdido, estaba despechado.

-Haria lo que fuese necesario para que te regreses a mi lado -dije sin poder hablar, tenia lágrimas en la garganta.
-No estoy dispuesto a perderte .

-Llévame a casa -me imploró con temblor en su cuerpo.

Pasé las manos por mi cara, se me llenaron de sangre, volví a mirarla, sentia tanto coraje de pensar que había estado con otro hombre. Metí el puño en mi boca mordiéndome la mano antes de meter un puñetazo en el interior del auto, provocando que ella gritara del susto.

-Cálmate -dijo llorando

Me quedé callado, miré el celular. Habían pasado bastantes horas y estaba oscureciendo.

-Llama a Ryan -dije dándole mi celular.

-Que? -dijo sorprendida

-Pon el altavoz, hazlo -dije tirándo el celular sobre sus muslos

AMARTE DUELE (PARTE 2 SECUESTRADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora