Me gustaría decirle que yo también estoy enamorada de él, pero no lo hago. Simplemente me quedo en silencio. No puede venir conmigo y dejar a su hermana sola. Giro sobre mis pies quedando de frente a la ventana.— No te puedes ir conmigo —suelto al fin.
— ¿Qué? ¿Por qué? —agarra mi brazo volviéndome a la posición que estaba antes.
— Pues... Por que no aguanto esto. —cruzo mis brazos. — No aguanto tus mentiras. Quizá irme una temporada me venga bien. —nos señalo con el dedo a ambos. — Nos venga bien.
Matty se sienta en la cama con la mirada clavada en el suelo.
No dejes que te afecte Julie. Sigue con tu decisión adelante.
— Creo que es mejor que me vaya —digo haciendo que Matty levante la vista.
— Voy contigo.
En el camino de vuelta a casa no hablamos nada.
— ¿Cuándo te vas? —me pregunta de repente.
— En una semana —digo encogiéndome de hombros.
Silencio de nuevo.
Cuando llegamos a la entrada de mi casa nos paramos uno en frente del otro. No sé muy bien que hacer y creo que el tampoco. Pasa la mano por detrás de su cabeza. Está nervioso.
— Bueno... —empiezo, pero el me hace callar.
— Te daré el tiempo que quieras Julie, pero déjame pasar la semana contigo y hacerla inolvidable. No me importa el tiempo que sea mientras lo pase contigo.
Sonrío.
Cuando entro en casa mi madre está en el sofá esperándome y a su lado está mi padre. Al verme parece que los dos sueltan la respiración al mismo tiempo.
— ¿Dónde estabas? —se acerca mi madre a mi, sollozando.
Dejo que me abrace pero no digo nada.
— ¿Qué haces aquí? —desvío la mirada hacia mi padre. — Tengo una semana ¿no?
Mis padres se miran entre sí.
—Julie... te vas mañana. —me suelta mi madre de repente como si de una carga se tratara.
Creo que me voy a desmayar. Todo va demasiado rápido a mi alrededor.
Mi madre quiere que vayamos todos a cenar a un restaurante italiano, y con todos me refiero a Robert mi padre, Ashley, Sophie, Helen y yo. Obviamente ni se le pasó por la cabeza que quería que estuvieran Matty y Gracy. ¿un restaurante? Como si estuviéramos celebrando algo. ¡Bien, Julie se va! Una carga menos.
Hace un rato le envié un mensaje a Matty diciéndole que me iba mañana.
Para mi sorpresa me encuentro a Matty en el restaurante —bueno, lo veo, el a mí no— Está con su grupo de "amigos".
— Ya veo como le dijo que no le llamara más —susurro al oído de Helen, quien me mira extraña y yo le hago un movimiento con la cabeza en dirección a Matty.
Ella suspira.
— Definitivamente este tío es gilipollas. —suelto una carcajada. Es lo único que puedo hacer.
Cada vez que vamos a un Italiano me pido lo mismo, pasta a la carbonara. Cuando me lo traen la boca enseguida se me hace agua. Huele que alimenta. Mi familia habla alegremente y yo picoteo la pasta con el tenedor.
Creo que Charlotte me ha visto por que no quita la vista de encima de mi. Está justo sentada delante de Matty, a su lado está Scott y al lado de Matty está Gracy —Cena de parejitas—.
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Un bonito caos
RomanceJulie es una chica normal y corriente, vive con sus dos hermanas y su madre en un pequeño pueblo de Londres. Tan solo bastó un fin de semana para que su vida diera un giro de 180 grados. Todo a su alrededor se tambaleó en un abrir y cerrar de ojos...