15 de noviembre de 1994, 15:50. Beacon Hills, California.
Derek, 12 años. Audrey, 6 años.
Bajo sus pies, tenía la sensación de estar sobre escombros, el olor a quemado inundó sus fosas nasales, se encontraba mareada, sucia y con muchos rasguños. Ante sus ojos estaba la masacre de su manada; Los Lawson eran tan conocidos como los Hale, estos lograron controlarse desde muy pequeños.
Estaba aturdida de tantos gritos de dolor, tanta sangre, era la única sobreviviente. Sin embargo, no sabía que hacer, sólo tenía 6 años. Y no duraría mucho sin comida y/o agua.
En ese entonces, Derek había sido un receptor de aquella guerra, buscaba un sobreviviente, tan sólo tenía 12 años y estaba en esa etapa de querer salvar el mundo.
Observó detenidamente a la niña de ojos cafés, dejó escapar un suspiro de alivio, era la más pequeña de la manada. La niña lo miró y él le regaló una sonrisa; Los niños merecen vivir de la manera más amable y segura para que puedan explorar sin miedo.
Al principio, ningún Hale la aceptaba, pero Derek insistió tanto que, Ennis aceptó.
No tenía experiencia alguna en criar niños, él prácticamente era uno. Pero al ver a Audrey reír, fue una sensación de paz que lo llenó que, juro protegerla sobre todas las cosas.
Audrey controló su poder a los 8 años de edad. Un día que Derek le había dicho que fuera al bosque por moras, recordaba que eran sus favoritas así que fue emocionada. Se encontró con unos cazadores que perseguían a Cora. Y al verla en problemas, se convirtió y logró salvarla; Peter comenzó a mostrar interés en la pequeña Lawson desde entonces.
Pero, Derek al notarlo le dice que no volverá a pasar lo mismo. Alejándolo de ella, aún le dolía lo de Paige.
Una tarde, la mansión estaba en llamas, la desesperación tomó lugar en Derek, buscaba a su protegida, Audrey estaba siendo sujetado por Kate, Derek la salvó. Kate logró quemar a la mayoría de la familia con vida.
Derek se convierte en cínico, enojado, y desconfiado. Al tomar su decisión, se la dijo a Audrey.
—Yo te quiero, pequeña, debes entender que es lo mejor, no estoy en condiciones para tener otra pérdida—. No soportaría perder a Audrey, esta ya se encontraba llorando.
—Pero dijiste que quien ama no deja ir; ni se va—. Derek la abrazó, tenía razón, pero no era lo suficientemente fuerte aún para protegerla.
—Volveré por ti, lo prometo —. Murmuró.
—¿Me olvidarás? —. Derek sonrió con ternura ante su pregunta, beso su frente y caminó lejos.
—Ni por un segundo —. Audrey dejo escapar un suspiro de alivio, miró la estación de policía y luego a un Derek que se perdía entre las sombras.
Miro atrás, a pesar de que no quería hacerlo. Al verla llorar, pensó en su madre Talia, una mañana del 20 de septiembre el estaba enojado porque sus amigos lo habían abandonado.
— En la vida te das cuenta que hay un rol para cada persona que conoces —. Hizo una pausa para sentarse a su lado. — Algunos se convertirán en una prueba, otros te usaran, unos te van a querer y otros te enseñaran —. Enumero con sus dedos. Audrey había cortado una linda flor y se la entrego a Derek, este le sonrió y le agradeció. Audrey corrió devuelta a el jardín emocionada. — Pero presta atención especial a aquellos que te ayudan a sacar lo mejor de ti y te aman a pesar de tus defectos, esa es la gente no común que el universo pone en tu camino para recordarte que tu vida importa —. Le dijo al ver la escena anterior, le agradaba que Audrey sacara su lado humano. Se levantó y besó su mejilla.
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¡Oye, Stiles!
FanfictionHay dos tipos de personas que no pueden mirarte a los ojos; Alguien tratando de ocultar una mentira. Y alguien tratando de ocultar su amor. Audrey Lawson era la segunda, esta enamorada de Mieczyslaw Stilinski desde que estaban en jardí...