Audrey.
Dejo las flores en el pequeño florero de vidrio que tenía la tumba, en esta se lee lo siguiente:
"Dicen las estrellas que los fugaces somos nosotros. Siempre estarás en nuestro corazón. Oliver James Weasley. 1988-2001"
Suelto un suspiro mientras abrazo mis piernas, había visitado la casa de los Weasley numerables veces, en una de esas visitas conocí al pequeño hermano de Oliver; Owen Weasley era un niño de 7 años idéntico a su difunto hermano mayor, el cual sin importarle lo mucho que le advirtió su madre sobre mí, me quería tanto como a su propia hermana.
Y aunque Brooke Weasley me odiara con todo su ser, yo haría lo posible para mantener en los hermanos de Oliver una sonrisa.
— Lo hice finalmente, así que probablemente el antiguo tú esté haciendo una fiesta ahora mismo en el cielo—. Bromeo mirando a la nada, con los ojos cristalizados. — Pero quería confesarte que...no sé si seguir con todo esto. Lo amo, ¿sabes?, pero tengo otra teoría sobre el amor; Creo que por muy buenos que sean, hay amores que no están destinados a durar para siempre. No sé si quiero odiarle, volverlo a ver, contar sus lunares o simplemente no soñarlo tanto — Me detengo para secarme las lágrimas. —Lo que tú decías era cierto; En la vida hay veces que encontramos seres especiales, alguien que cambia nuestra vida con solo ser parte de ella. Alguien que nos hace creer que hay algo muy bonito y muy bueno en el mundo. Alguien que nos convence que hay una puerta cerrada que se abre con la eterna amistad. Este último eras tú, si estuvieras aquí me dirías que no renunciara a aquel amor con Stiles, que eligiera aquello que me hace feliz. Pero cuando el objetivo es difícil, debes buscar un nuevo camino para él. Si Stiles no muestra un poco de interés en mi después de todo lo que pasó, prometo olvidarlo.
-o-
Entro al aula de clases justo cuando todos comienzan a murmurar, ruedo los ojos con fastidio pero noto que una chica asiática está sentada detrás de mí. Tomo asiento observándola con confusión, ella me mira y parece intimidarse porque baja la mirada rápidamente. Su aroma era algo peculiar, juraría que esa chica tenía algo sobrenatural.
Un hombre de traje gris con una maleta en sus manos entra al aula, se presenta como el nuevo profesor de Historia. Hace un comentario penoso sobre su hija que resulta ser la chica detrás de mí, donde todos la miran y esta les regala una tímida sonrisa. —Oye—. Toca mi hombro cuando la clase ha comenzado, me giro para mirarla. —Tu mochila estaba abierta, se cayó este libro, toma—. Lo extiende, enarco mis cejas.
— Gracias, Kira—. Digo tomándolo. — Disculpa que te moleste, pero, ¿es cierto lo que dicen sobre ti? ¿amenazas a los profesores para tener las mejores notas?—. Dice con curiosidad, me encojo de hombros. — No, siempre he intentando tener la mejor calificación por mí misma, y sin embargo, ser la número dos no es tan malo como parece. No deberías creer todo lo que dicen, y ten cuidado, también podrían hablar sobre ti—. Le aconsejo.
Asiente. —Gracias por el consejo, ¿Audrey, cierto?, es un placer—. Extiende su mano con una sonrisa, la estrecho. —Kira, me alegra que hagas amigos, pero que no prestes atención podrá afectar en tus exámenes, lo que digo es importante—. Dice en voz alta su padre. —Mis condolencias por los ridículos que te hace pasar—. Murmuro cuando me giro para prestar atención.
— No te preocupes, estoy acostumbrada—. Dice.
-o-
Reunidos bajo un árbol están comentando lo que les ocurre desde que tuvieron la experiencia cercana a la muerte. —¿Qué le pasa a una persona que ve cosas luego de tener una experiencia cercana a la muerte?—. Cuestiona Scott. —Que también es incapaz de diferenciar la vida real con un sueño—. Agrega Stiles.

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¡Oye, Stiles!
FanfictionHay dos tipos de personas que no pueden mirarte a los ojos; Alguien tratando de ocultar una mentira. Y alguien tratando de ocultar su amor. Audrey Lawson era la segunda, esta enamorada de Mieczyslaw Stilinski desde que estaban en jardí...