¡Oye, Stiles!

8

Acompañé a Leila durante toda la noche, el baile de seguro había comenzado. Me había confesado que Stiles iría con Lydia, y me sentí feliz por él. También era una excusa para no asistir, no soportaría el hecho de verlos bailando, y no, no era porque no tenía pareja para ir. Aunque si Leila no estuviera herida, yo estaría molestando a Derek. 

Ahora que lo pienso, no lo he visto en toda la semana. —Eh, Leila, haré una llamada, no tardo—. Asiente, salgo de la habitación y marco su número. Espero pacientemente a que conteste, pero no lo hace. Cuando deja de sonar, escucho su buzón de voz. "¡Hola, soy Audrey! ¡Este es el número del viejo lobo gruñón, no te has equivocado, pero no quiere atenderte porque odia al mundo, no vuelvas a llamar! ¡Adiós!" Sonrío, no lo había cambiado. Lo había hecho hace unos días, y el se había quejado sobre tomar su teléfono. 

Mi teléfono suena y abro el mensaje de inmediato. Al leerlo no me importó dejar sola a Leila, comencé a correr hacia el bosque. 

Ven al bosque, ahora. Scott. 

Llegué a tiempo para evitar que Derek sea lastimado. Lo fulmino  por no haberme avisado y parece un poco sorprendido de verme allí pero luego me agradece por lo abajo. "No importa si le erraste, utiliza la luz" Escucho la voz de Kate, y frunzo el ceño. 

Escucho que dispara la luz, me cubro los ojos pero Scott no lo ha hecho y me apresuro en ayudarlo a levantarse. Debía sacarlo de allí. —Allison, puedo explicarte—. Rogó Scott. Mientras que Kate y Allison se acercaron a la luz, al verme, Allison se mostró sorprendida mientras que Kate me fulminó. —Deja de mentirme—. Pidió Allison.

— Iba a decirte la verdad en el baile, todo lo que dije, todo lo que hice—. Fue interrumpido por Allison. — Fue para protegerme—. Completó, pero rodó los ojos. —No te creo—. Dice con voz seca. 

— Gracias a Dios. Ahora, dispara, o lo haré yo misma—. Interviene Kate, sacando su arma, Allison la mira. — Dijiste que solamente los atraparíamos—. Comenta confundida. 

Note las intenciones de Kate, y me acerqué a Derek. —Eso hicimos, ahora los mataremos—. Dispara y empujo a Derek, evitando que la bala le perfore la piel. Esta se pierde en algún lugar del bosque. —Vaya, vaya, típico de una Argent. Creerse superiores sólo por ser una cazadora—. Comento divertida. 

— Hablas demasiado, niña. —. Vuelve a disparar, pero escucho el grito de Allison y impide que me ataque. Enarco mis cejas, mientras veo que Kate fulmina a Allison. — ¿Qué crees que haces? ¡Ellos son unos depredadores y nosotros somos su presa!—. Le grita furiosa. 

— Ella es mi amiga, no me haría daño  —. Comenta dolida. La miro algo sorprendida, esto no me lo veía venir. Alguien con el apellido Argent, me estaba protegiendo, que honor. No es sarcasmo, supuse que Allison era diferente a su familia. Miro a Derek quien se acerca a Scott. Kate golpea a Allison, y apunta a Scott en la cabeza. — ¡Kate!—. Grita una voz conocida, Chris Argent. 

— Sé lo que hiciste, baja el arma—. Ordena mientras se acerca, lo miro desconfiada, podría estar salvando a Scott en estos momentos. Pero no me agradaban los Argent, excepto si son Allison, creo que la juzgue mal. —Hice lo que me pidieron—. Se queja mientras señala la mansión. 

— Nadie te pidió que mates personas inocentes, habían niños en esa casa, algunos humanos. Y mira lo que estás haciendo ahora, le estás apuntando con un arma a un chico de dieciséis años que no ha derramado sangre humana. El código ante todo. Cazamos a aquellos que nos cazan, baja el arma —. Pero ella no le obedeció, el apuntó al árbol cercano a ella, dándole a entender que no le importa que fuera su hermana. Le mataría.