Capitulo 37

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Travis

La había llamado zorra y muchas cosas más, pero en mi defensa estaba muy cabreado. Esa perra me había engañado todo el tiempo. Claro, por eso una vez me dijo esa mierda de que el día que me enamorara me iban a romper el corazón por jugar con tantas chicas. Joder, ni siquiera sabía que tenía un corazón que me rompieran, y eso es lo que más me saca de quicio. Que por más fuerte que quisiera parecer, frente a ella me convertía en un completo idiota.

Sé que no debí tratarla de la forma en que lo hice, pero eso es todo culpa de ella, desde que supe que era mujer y la hice mía, me volví loco, maldita sea, ese era su plan. Volverme loco y luego dejarme hecho pedazos y ella se burlaría con sus amiguitas, pero no se lo voy a demostrar, la muy zorra se quedara con las ganas de verme destrozado por ella. Ahora que recuerdo una de ellas se está metiendo con Jack, espero que en esa cosa que sea que pase entre ellos, salga bien.

Pero lo que más me molesta es que nunca pensé que la nerd pudiera ser tan fogosa en la cama, mierda, demonios esa chica puede encenderse con mucha facilidad cuando la toco, y vestida de negro y sin esas faldas estúpidas que siempre se pone es muy sexy, maldita sea, de solo recordarlo me pongo duro. Tendré que buscar alguna chica para divertirme un rato, y así demostrarle a Sophi que no me importa lo que me hizo y que no siento nada por ella. Cosa que no creo sea difícil de demostrar.

Bebí lo último que quedaba de mi cerveza y tire la lata a la basura. Ahora que estoy soltero de nuevo, voy a volver a lo mismo, apuestas y sexo con cualquier chica.

Escuche sonar mi celular y lo busque por toda la habitación, ni siquiera me acuerdo donde lo deje.

Seguí el sonido y lo encontré debajo de la cama. ¿Cómo carajos llego ahí?.

Mire el identificador y aparece Adam, no sé qué quiere ahora, pero algo es seguro, esta noche nos reunimos y buscaremos chicas dispuestas a divertirnos. Conteste de inmediato. Esta noche puede ser muy "productiva".

— Adam...

— Travis necesito que vengas a mi casa, es urgente — dijo y colgó.

Me quede unos segundos con el celular en la oreja tratando de procesar la extraña llamada de Adam. Ni siquiera saludo, solo exigió verme en su casa. Está bien, si eso quiere eso hare.

Media hora después estoy en casa de Adam, me dijo que su padre estaba en un viaje de negocios, así que tendremos la casa para nosotros solos, eso significa que podemos llamar a unas chicas, y por supuesto, Jack también está invitado.

Toque el timbre y espere escuchar pasos, pero no escuche nada. Así que hice lo que hacen en las películas, presionar el timbre hasta que abran la puerta.

— ¡Ya voy joder! Maldita sea, ¡no sé porque no pueden esperar!— Sonreí al escuchar maldecir a Adam.

Abrió la puerta y me indico con una seña que pasara. Esto es raro, pero qué más da.

— Espérame en mi habitación, tengo que traer algo de la cocina.

— Como digas.

Subí las escaleras y voy directo a la habitación de Adam. No sé que se trae entre manos, pero voy a seguirle el juego. No es que lo haga todo el tiempo, pero parece un poco nervioso, así que me parece interesante esta situación, a menos que.. no creo que haya algún motivo oculto ¿o sí?.

La verdad me da igual, con tal de olvidarme un poco de mi mal humor y de la nerd, puedo perder un poco el tiempo con las estupideces de Adam.

La puerta estaba abierta, entre y camine hasta el centro de la habitación. Luego escuche que cerraron la puerta y me gire, y me lleve una gran sorpresa. Una no muy grata.

Sexo, violencia y mucho odio. Libro 1 (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora