Capitulo 29

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Travis

Estaba un poco decepcionado porque Carter no me dejo acompañarla al departamento donde supuestamente vive, no sé porque pero cuando salió corriendo y entro al edificio hice lo que no debí haber hecho, encendí el auto y me aleje un del edificio, oculte mi auto y me dispuse a vigilarlo un poco, si en algún momento Carter salía podía seguirla y así saber si me había dicho la verdad.

Llevaba media hora esperando que Carter hiciera algún movimiento pero no tuve suerte, así que decidí ir a comprobar que decía la verdad, sé que me había pedido que confiara en ella, pero estaba desesperado por saber si era cierto, bien podría ser el departamento de alguna amiga y estuviera mintiendo.

Cruce la calle hasta llegar a la entrada del edificio y en ese momento mi celular empezó a sonar, lo saque del bolsillo trasero del pantalón con la esperanza que fuera Carter, pero al ver el nombre de mi padre en la pantalla mi ánimo cayó al suelo.

— ¿Qué quieres?, estoy ocupado — dije de forma cortante.

— ¿Dónde estás?, necesito que regreses a casa ahora mismo, estoy en un aprieto — dijo, por su tono de voz diría que es verdad.

— No estoy de humor.

— Hijo, por favor, ayúdame, yo te deje ir a donde querías con tu novia, si no me ayudas Alice se ira y no querrá escuchar mi explicación, ¿me ayudaras? — pregunto casi suplicando.

— Esta bien, voy para allá, pero te cobrare el favor.

— Gracias, te daré lo que me pidas.

Camine hasta el auto , abrí la puerta y me subí deprisa, Thomas es un jodido arruina planes, debí subir primero y luego ir a casa, pero Carter me pidió que confiara en ella y eso voy a hacer, aunque en un arranque de desconfianza casi arruino todo.

Metí la llave en el contacto y encendí el auto, maneje lo más rápido que pude sin exceder el límite de velocidad. Cuando llegue a casa metí el auto en la cochera y entre a la casa, papá estaba sentado en el sillón bebiendo, no podía creerlo, dice que está en aprietos y se pone a beber, bonita forma de solucionarlo.

— ¿¡Cuál es el estúpido problema!?, — pregunte enojado, papá se sobresalto y casi deja caer el vaso que tenía en la mano — estaba haciendo algo importante y me interrumpiste.

Él giro y me miro, su rostro se veía cansado y no entendía porque, siempre lo había visto cansado pero no a tal punto, debía ser algo muy importante para él si estaba así. Camine hasta quedar cerca y luego me senté en un sofá frente a él.

— Una de las mujeres con las que ... ya sabes ... — dijo torciendo la boca, frunció el ceño y meneando la cabeza — está embarazada y dice que es mío.

— No veo cual sea el problema, respóndele y asunto resuelto.

— Ese es el problema, ella quiere que nos casemos y no pienso hacerlo.

— ¿Y por eso me hiciste venir?, ¿no dijiste que era por una tal Alice?. — pregunte confundido.

— Quiero a Alice, pero si Amanda sigue diciendo que está embarazada de mi, Alice no me dará una oportunidad.

— ¿Oportunidad para qué?, ¿para follartela y dejarla como hiciste con las otras?, o ¿la vas a utilizar hasta encontrar una mejor?.

— ¿Qué?, no, a Alice la quiero de verdad, ya te lo dije, ella es diferente, además ... — no termino de hablar y se bebió lo que tenía en el vaso de un solo sorbo.

— Además... ¿qué?.

— Alice llega mañana y no sé qué hacer, ayúdame. — suplico.

— Ay papá, tan grandecito que estas y no sabes resolver tus problemas tú solo, debería darte vergüenza — dije cruzándome de brazos y sacudiendo la cabeza, esto era realmente muy, pero muy divertido.

Sexo, violencia y mucho odio. Libro 1 (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora