Caza Roja - Transfusión parte II | TERMINADA

Capítulo 10

Por más que odie admitirlo, la semana siguiente solo quería ver a Garreth por la cafetería, pero jamás regresó. Y sabía que no regresaría hasta que yo le hablara, pero no quería hacerlo. Aún seguía preguntándome a que se refería con estar lista, no podía pensar claramente. La información que ahora tenía llenaba mi cabeza. Y no podía dejar de pensar lo lejos que estaba de mi vida anterior. Pareciera que pasó una eternidad, varios años, una vida, no solo unos meses.

Megan me apresuró durante toda la semana, ella estaba realmente emocionada con la fogata del sábado y yo no quería decirle que estaba considerando seriamente en no ir.

- Ashton me prestará la camioneta, así que podremos ir todos juntos. — Dijo ella completamente entusiasmada mientras le daba una mordida a una manzana. — Estaba pensando que nos veamos todos juntos en la plaza principal y nos vamos a Siuslaw.

- Me parece bien. — Respondí fingiendo interés. Tomé una patata frita y la mordí.

- No te olvides de llevar la casa de campaña. Yo llevo los sacos de dormir.

- Lo que no entiendo es esto... — Dije con la boca llena. — Vamos a dormir en tres tiendas. Tú y yo en una, Nicholas y Abrielle en otra... Y Jared y Monica en otra. — Ella asintió. — ¿Si sabes que son pareja? — Ella se encogió de hombros.

- Necesitábamos a dos personas más para completar nuestro equipo y ellos dos eran los únicos que no tenían equipo.

- No me sorprende que hayan sido los últimos. — Tomé otra patata. — De verdad, estoy emocionada para escucharlos tener sexo el sábado.

- ¡Merrick!

- ¿Qué? ¡Es cierto! — Ella negó con la cabeza. — Vamos, son novios desde hace años, ¿crees que el sábado en la noche cuando no haya ningún adulto querrán estar en la fiesta? — Negué con la cabeza. — Ellos van a tener su propia fiesta dentro de su tienda. — Volví a comer otra papa. — No te olvides de llevar audífonos, yo llevaré los míos.

- Por favor, que aguafiestas. — Ella se cruzó de brazos. — Dime que tú no lo harías si tuvieras la oportunidad.

- No lo haría si supiera que alguien más me va a estar escuchando. — Le saqué la lengua y le arrojé el resto de la papa y esta cayó en su cabello. — ¿Tú lo harías?

- ¡Claro! — Tomó la papa de su cabello y se la comió. Yo le puse una cara de asco, tanto por lo que decía como por lo que acaba de hacer. — Si tuviera con quien, digo.

- ¡Ay cállate! — Solté una carcajada. — Ni opines de eso, eres virgen, por dios. — Ella tomó una papita y la arrojó hacia mí solo que yo pude atraparla con mi boca fácilmente.

- Ay ajá, y tú no. — Sonreí, pero no le respondí, solamente me encogí de hombros. — ¿No? — Ella sonó alarmada y sus ojos se abrieron como platos. — ¡Soy tu mejor amiga! ¡Debías de haberme dicho antes! — La campana sonó y yo me puse de pie de un brinco.

- Prometo decírtelo cuando eso suceda. — Dije entre risas. — O si eso ya sucedió. — Tomé mi mochila y me la colgué al hombro.

- No, dime. — Ella se puso de pie conmigo y no me dejó alejar, comenzó a caminar conmigo por los pasillos. — Anda, con quien fue.

- Megan... — Dije y rodé los ojos.

- ¡Oh, dios! ¡Fue con mi hermano! ¿cierto? — Ella dejó de caminar y me miró de arriba abajo. — ¡Fue con Tyler! ¡Con él fue tu primer beso! — Bien, la broma se estaba saliendo completamente de mis manos.

- Megan. — La tomé de la muñeca y la obligué a caminar conmigo. — Solo estaba bromeando.

- No. — Respondió. — Yo sé perfectamente cuando estas mintiendo, Merrick Holmes, te conozco desde la maldita cuna. — Volví a rodar los ojos. Afortunadamente ella tuvo que detenerse ya que habíamos llegado a su salón.