Tormenta Black #1 Cristal Roto

XXVII

10 de septiembre, 2015

Bradley

Termine de revisar los folletos que recién imprimí, los necesitaria para la siguiente clase. Antes de entrar al salón, me pase por la cafetería para un bocadillo. No desayune en la mañana y ya estaba afectando. No creía durar el resto del día sin probar un bocado de alimento.

Después de conseguir un sándwich de pavo, emprendí mi camino a clases. Si no me equivoco en el grupo de trabajo me tocaría con Colton. Eso es una suerte, si necesitaba algún apunte, se lo pediría a él.

Comenzamos a realizar el trabajo de investigación que solicitó el docente, con algunos datos adicionales que pidió con anticipación. Redacte la información mientras que los demás hacían su parte correspondiente. Antes de los últimos diez minutos de la clase, juntamos todo el material recabamos y se lo entregamos al profesor.

(***)

Un poco liberado de las clases, me dirigí al polideportivo con mi amigo. Para desestresarnos un poco, nos sentamos en los graderíos que estaban de frente a la cancha.

– Te noto ausente. –murmure bostezando mientras me recostaba.

–No lo sé, –se miró las manos. –Todo parecía ir tan bien.

Lo mire sin entender sin saber a qué se refería.

– ¿De qué hablas? –pregunte.

–Charlie. –respondió mirándome por un momento. –Estaba bien, realmente pensé que estaba volviendo a ser la persona que era antes, pero al parecer me equivoqué. –se pasó las manos por el cabello frustrado. –Sinceramente no sé qué más hacer para ayudarla. Ella está bajo mi cuidado, es mi responsabilidad.

– ¿A quién te refieres con ella? –fruncí el ceño. ¿Charlie no es su primo?

Antes que pudiera responderme, Tony y Gabriel aparecieron en nuestro campo de visión. Nos invita a unirnos a su equipo para un partido de fútbol. Olvidando el tema por el momento, acepté y Colton con un poco reticencia finalmente lo hizo. Al final, no jugamos en el mismo equipo. Le guiñe un ojo a mi mejor amigo, tanto él como a mi, nos gusta competir de vez en cuando. Aunque hubiera sido genial que James estuviera aquí, pero bueno. Eso estaba de un lado por el momento, ya que suponía que estaba en clases.

Después de casi una hora, con la victoria por parte del equipo de Colton me fui hacia los banquillos a tomar un poco de agua y secar mi sudor. Me sentía pegajoso y lo odiaba.

– ¡Wells! –escuche un grito de la nada. Del susto derrame un poco de agua encima de mi camiseta.

Mire por todos lados buscando por donde había provenido el sonido. Me encontré con un tipo alto, fornido y rubio avanzando a grandes zancadas de forma amenazante a Colton. Limpiando como pude el desastre caminé hacia mi amigo de inmediato. El tipo parecía que quería arrancarle la cabeza y no dudaría que lo hiciera.

–Mierda. -maldijo Colton.

– ¿Qué pasa? –lo miré preocupado ¿Estaba metido en problemas turbios? – ¿Quién es él?

–Jayden, maldición. –escupió. –Tengo todo el puto día buscándote. –bramó cabreado. Alce una ceja mirándolo mal

¿Quién se suponía que era este para hablarle de esa forma a Colton?

–Estoy aquí en la universidad, como de costumbre.

–Ya me di cuenta. –ironizó el sujeto cada vez más enfadado. – ¿Dónde está Charlie? –pregunto o siseo, no pude diferenciarlo.