Ataque inesperado.-Capítulo 16

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Ataque inesperado.-Capítulo 16

Tras un rato de haber estado hablando con Noa, se acaba marchando. Cuando ya no está, tardo tan sólo unos minutos en tomar la decisión de ir a Irish.

Corro, literalmente, hasta mi cuarto y me ducho con la misma rápidez. Me pongo unos vaqueros oscuros, un jersey blanco a conjunto con mis Coonverse también blancas. Me pongo un poco de rímel -no sé el por qué, pero tengo la necesidad de ir un poco arreglada- y salgo, también, muy rápido hacia Irish.

No sé exactamente las razones por las que he decidido ir a la cafetería donde trabaja Josh, pero el saber que ese día me fue a buscar a mí y no a Rachel me ha impulsado. Sin embargo, eso no quita el que les viese besarse en dos ocasiones.

Cuando llego a Irish, estoy con la respiración agitada por la velocidad con la que he venido. Respiro hondo y entro en el lugar. No le visualizo por lo que me siento en una de las tantas mesas vacías que hay. Ahora que ya estoy aquí empiezo a pensar en lo que realmente quiero decirle a Josh. Miro hacia la ventana que tengo a mi izquierda, y me pierdo en la noche que invade la calle. De repente una voz grave resuena detrás de mí.

-Buenas noches, ¿qué quería tomar?- dice claramente sin saber quien soy.

Me giro dejando ver a un cansado y apaciguado Josh.

-Un té inglés- digo mirándole.

-¿Leslie?- dice abriendo muchos los ojos- ¿Qué haces aquí?- pregunta con el ceño fruncido.

-He venido a tomar un té, y si es posible hablar contigo- digo lo último en un susurro, pero me oye.

-En diez minutos salgo- dice para irse a por mi té.

No me había dado cuenta que cuando llegué aquí ya eran las nueve menos cuarto. A las nueve Josh coje su cazadora y me hace una seña para que le siga al exterior de la cafetería. A unos pocos metros está su moto, donde se apoya esperando a que hable yo primero.

-¿Para qué viniste el lunes a buscarme?- le pregunto directamente.

-Al parecer, para verte comerle la boca a tu amigo, el que decías que no significaba nada.

-Pensé que habías ido a buscar a Rachel, además al día siguiente tú fuiste el primero en besarle a ella.

-Y si mal no recuerdo, tú luego besaste al moreno. Además creía que estabamos los dos de acuerdo en que no eramos nada.

-Y así es, yo sólo he venido porque tú fuiste el que me visniste a buscar el lunes.

-O quizás has venido porque me necesitas y dependes de mí- dice con el ego totalmente subido.

-No te necesito, y para nada dependo de ti, ni de nadie- le aclaro finalmente.

-No parecía eso hace unos días cuando tuve que sacarte de tu casa donde se encontraba tu padre borracho-  me echa en cara haciéndome enfurecer.

-Ni se te ocurra siquiera mencionar a mi padre- digo friamente.

-Nena, no quería...- dice poniendo su mano en mi brazo.

-No me toques-le interrumpo apartando su mano- y ni se te ocurra llamarme así.

Josh cierra los ojos y empieza a pasarse frustrado las manos por la cara. En ese momento aprovecho para, sigilosamente, echar a correr y alejarme de él. Estoy muy enfadada. Giro una esquina y sigo corriendo, pero alguien se interpone en mi camino.

-Vaya, vaya. Pero si es la pequeña Silver- dice Declan, acorralandome.

-Déjame en paz, Declan- digo intentando salir de su agarre.

My last hopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora