Aprendiendo a ser Romántico

Capítulo 35

  Austin: ¿Eh?

- Franklin: Las perlas le dan un sentido de sofisticación a una mujer señor– dijo con seriedad, mostrándole un collar de perlas, alternadas con pequeñísimas bolitas en oro blanco y se cerraba con un broche en forma de corazón del mismo metal, y que tenía engarzadas unas pequeñas esmeraldas –  ¿Ve? ¡Simple pero exquisito!

- Ally: ¡Me encanta! si yo pudiera, ¡me lo compraría ya!

- Austin: ¡Pero a mi me gusta ese! – dijo señalando un collar de perlas para nada sofisticado y que tenia un broche simple con algunos diamantes, talla brillantes.

- Ally: Bueno... si te gusta... – dijo encogiéndose de hombros – ¡lo llevamos!

- Franklin: ¿Y para usted bella dama?

- Ally: ¡No! ¡Yo no tengo intenciones de comprar nada! – rió roja – yo no tengo dinero ni para entrar a la tienda

- Franklin: ¿Pero es una dama muy hermosa verdad? – y miró a Austin

- Austin: Yo... prepáreme el collar para regalo– dijo rojo de vergüenza

- Franklin: Bien...

- Ally: Ay Austin mira la hora que es...faltan diez minutos para el mediodía... ¿No te importa que te deje no?

- Franklin: Me disculpan... –Ellos lo miraron – ¡tengo algo que le gustará jovencita!

- Ally: ¡Pero ya elegimos la joya!

- Austin: ¿Por qué no esperas? ¿Es que tanto apuro tienes de ir a verte con ese Andrés? – le pregunto mas celoso que enojado

- Ally: No claro... -dijo apenada – disculpa

- Austin: Bien... señor... ¿Qué nos decía? – el anciano los miró sonrientes pero se dirigió a Ally

- Franklin: Déjeme decirle señorita que en cuanto la vi supe que a usted le encanta el rojo, por sus zapatos –ella asintió y él le guiñó el ojo – por lo que me atrevería a decir que le quedarían estupendo... - le mostró un pequeño estuche de terciopelo rojo y lo abrió, dejando a la chica sin aliento- ¿qué le parecen?

- Ally: ¡¡Son los mas espectaculares que he visto en mi vida!! Y déjeme decirle que yo... ¡¡no he visto nunca nada así en mi vida!! – dijo aun con los ojos abiertos

- Franklin: Sabía que le encantarían... El collar de perlas que eligió y ese anillo de compromiso, me dieron la pauta de que usted es una muchacha modesta... pero tiene una gran ilusión... – Ally lo miró y tuvo ganas de llorar, luego miró a Austin. En realidad ella tenía una gran desilusión.

- Ally: Yo... creo que es tarde... si no me necesitas más – lo miró – me marcho

- Austin: Bien... gracias por todo – dijo serio y ella antes de ponerse a llorar salió de la tienda. Austin cerró los puños de rabia

- Franklin: ¿Algo mas? – él negó con la cabeza – La señorita le ha sido de gran ayuda, me parece... ¿No piensa obsequiarle algo a ella? – Austin miró al anciano. Desde que vio esos ojos castaños morir por ese anillo estaba venciendo la tentación de comprárselo... pero era un anillo de compromiso y él no quería que ella pensara mal... ya demasiado había hecho al confundir las cosas esa noche – Creo que no- dijo Franklin llevándose algunos estuches. Austin observó el último que le mostrara a Ally. Lo abrió con cuidado. Allí se encontraban un par de aretes, eran de aproximadamente un centímetro de tamaño, en forma de corazón, cuyo centro era una esmeralda, rodeada de diamantes pequeños. Eran lindos y recordó las orejas de su amiga... y lo suaves que eran al tacto. Y lo bien que se verían esos aros en ellas...

- Austin: ¡Espere! – dijo él y el anciano se detuvo – llevaré estos también

- Franklin: Sabía que haría una buena elección... pero por las dudas... - dijo dándose vueltas y completando la frase para si... [Guardaré el collar de perlas y el anillo... no sé por qué me parece que este tonto, tarde o temprano vendrá a por ellos]

A las doce del mediodía, Austin fue a Mcdonlads, era el sitio de encuentro con su novia. Tenía los regalos y llevaba varios ramos de flores. Entró y vio a sus amigos. Ally estaba con la mirada perdida observando la pared. No lo vió llegar. El se acercó y saludó efusivamente. Ella se dió vuelta y lo miró. Estaba contento pensó, vería a Jasmine... suspiró resignada. Faby lo saludó al igual que Ryan. Austin observó que Andrés aun no había llegado.

- Austin: ¡¡Feliz día de la amistad!– dijo y le obsequió a Faby un ramo de flores

- Faby: ¡¡Gracias Aust!! – dijo ella contenta – mira lo que me regaló Ryan– y le mostró un estupendo anillo de plata con una piedra rosada en forma de corazón.

- Ryan: Es una especie de anillo de compromiso... - la besó – cuando trabaje te compraré uno que valga la pena...

- Faby: ¡Este es perfecto! – dijo ella – ¡no quiero que busques otro!

- Austin: Feliz día de la amistad para ti Ally – dijo y le obsequió un ramo de rosas rojas. Ella lo tomó y le agradeció.

- Ally: Gracias Moon...-y siguió mirando hacia la pared. De pronto escuchó una voz que la dejó patitiesa... esa voz llamaba a Austin. El se dio vuelta y la vió. Ally también se dio vuelta y vio a su pesadilla hacerse realidad. La escultural Jasmine estaba parada detrás de su novio él la miró de arriba a abajo. Estaba vestida con un falda negra y una blusa rosa.. Austin quedó sin poder decir nada de la sorpresa...

- Jasmine: Austin Moon mi amor, ¡MI NOVIO! – gritó y todo el mundo se dio vuelta para mirarlos. Ally sintió que toda la sangre de su cuerpo desaparecía y estaba blanca como un papel. Los novios estaban besándose en medio del restaurante

- Austin: ¡Jasmine! – dijo después de semejante efusividad

- Jasmine: ¿Me extrañaste? – Ally lo miró

- Austin: Eh... si claro, como no iba a hacerlo... - y sonó poco convincente

- Jasmine: ¡Espero que tus pensamientos hayan estado sólo en mi! – dijo pellizcándole la mejilla

- Austin: Si... - bajó la cabeza (idiota)

- Jasmine: Bien... ¿podemos irnos de esta pocilga? – preguntó mirando despectivamente hacia la gente – esto está lleno de críos...

- Ally: Te recuerdo... ¡que tu novio es uno de esos crios!

- Jasmine: Oh... ¡está la cabecita loca de tu amiga! – dijo con asco, Ally se levantó

- Ally: ¡Bonita chaqueta! – Jasmine sonrió – ¿Cuantos bebés osos se quedaron sin mamás para que tu te abrigues con sus pieles?

- Jasmine: Muy graciosa, pobretoncita...

- Ally: ¿Cómo estás eh? ¿siguen tus humos igual o ahora estás peor porque vives en la capital? – dijo con rabia. Austin no sabía que decir... esas dos se planteaban batalla abierta, y él tendría que estar del lado de su novia... aunque no le gustó que Jasmine le dijera a Ally pobretona.

- Jasmine: ¿Perdón?

- Ally: Tu sabes... el cuento de la rata que vive en el campo... cuando va a la ciudad... ¡se le suben los humos a la cabeza!

- Faby: Eh... ¡hola Jasmine! – dijo tratando de apaciguar los ánimos

- Jasmine: Ah... hola Fabiola... - dijo con desprecio – ¿Sigues de novia con este?

- Ryan: Si- dijo con asco – y veo que tú sigues igual... –Austin lo miró – de bonita

- Jasmine: ¡Ay si! Es que en N.Y. ¡tengo tiempo de hacerme unos tratamientos faciales de lujo! ¡Te recomendaré algunos pecosita! – dijo riéndose de Ally

- Ally: Gracias... - y se mordió los labios por decirle unas cuantas pero las aguantó por Austin

- Jasmine: Vamos Austin, no me dirás que estaremos en este comedor infantil... pensé que estaríamos más en la intimidad... – le dijo acercándose al oído. Austin enrojeció.

- Ally: ¡¡Zorra...!!-dijo encubriendo esa palabra en un estornudo. Faby lo captó y rió – Oh... estas flores creo que me dio alergia.

- Faby: Si debes tener cuidado.. ¡no vaya a ser que estornudes a cada rato!

- Ally: ¡Eso arruinaría mi cita! – dijo ella riendo

- Jasmine: ¿Es que acaso hay algún tarado que te tome en cuenta? –Ella la miró y luego miró a Austin que estaba blanco. Si Ally hablaba...

- Ally: Claro... quedé de encontrarme con un chico, pero en calidad de amigos... tu sabes... uno hace muchas cosas por los amigos... - y miró nuevamente a Austin

- Jasmine: ¡¡Ay cariño!! – dijo ella – espero que te hayas esmerado en lo que preparaste para mi...

- Ally: Y tu... ¿Qué le has preparado a Austin?

- Jasmine: Nada – él miro a su novia atónito – ¿es que debía haberle preparado algo? pensé que él debía esmerarse en mi

- Ally: ¿Y no pensaste que hoy es el día de los enamorados? ¿O sea que debes darle un regalo especial? – preguntó algo molesta.

- Jasmine: Bueno... ¡no! – dijo tranquila – vámonos Austin quiero almorzar algo digno de mi... - y se iba – ¡¡adiós niños y buena suerte!!

- Austin: Adiós – dijo a sus amigos

- Todos: Adiós –Austin se fue cabizbajo... no había empezado como quería, ella había humillado a sus amigos y no supo por qué no tenía ganas de seguir a Jasmine. Peor fue cuando a la salida, se topó con Andrés. Se quedó mirándolo un rato mientras simulaba ponerse la chaqueta. Andrés cariñosamente le daba un beso a Ally en la mano. Ella sonreía y lo invitaba a sentarse. Seguía ahí no quería irse. Vio como Andrés se acercó y le obsequió un ramo de Lirios y orquídas... sus favoritas y ella dejó a un lado las flores...las que él le regaló. Bajó la mirada y se sintió el peor estúpido del mundo. Cuando la levantó, Ally le ayudaba a sacarse el abrigo... no podía ser lo que pensaba... ella era suya... no tenía porque estar perdiéndola por ese infeliz de Andrés...

- Jasmine: ¿Te quedarás mucho tiempo poniéndote esa tonta chaqueta o te irás conmigo? – se dio vuelta y vió la cara de su novia – Mira... sé que no te traje nada... pero sabes...si te portas bien conmigo, y me obsequias algo digno de mi... sabré recompensarte... ya sabes donde... – El la miró alarmado y ella le guiñó un ojo de manera sensual, pero a Austin le pareció tan vulgar... y sin muchas ganas salió del restaurante para tener su cita soñada..

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