Capítulo 120

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La fiesta se desarrollaba de manera fantástica... Una orquesta especialmente contratada para la ocasión, fue la encargada de poner algo de ritmo a la fiesta. Después de arriesgarse a las más variadas canciones tocadas por la banda, se encontraron bailando muy cerca del cuerpo del otro... La música incitaba a Austin a pensar miles de cosas, cuando se enderezó para mirarla a los ojos... a esos extraordinarios ojos castaños. Ella sonrió coqueta, mirando los brillantes ojos de su novio, y esperó que él le dijera algo... pero Austin no podía expresar palabra alguna, no mientras disfrutaba de la muchacha que lo acompañaba.

- Ally: Austin... - no dijo nada – ¡¡Austin!! ¿qué tanto me ves? – dijo mirándolo.. él no contestó... - Austin... ¿te sientes bien?

- Austin: Si... me siento maravilloso hoy- sonrió – ¿sabes por qué?

- Ally: No...

- Austin: Porque, aunque no quieras decírmelo... veo el amor en tus ojos... y lo mejor es que no te has dado cuenta aún cuanto te amo... mi querida Princesa - agradeció que él la sostuviera de la cintura pues de otra manera, hubiera caído al suelo al escucharlo y más cuando él se acercó sin dejarla de mirar y le dio un suave beso... que demostraba el más puro amor... - se separaron cuando escucharon la fuerte discusión de una pareja cerca de ellos. – Al verla quedaron sin poder decir nada. Faby y Ryan estaban parados en el medio del salón con la cara roja, diciéndose unas cuantas cosas... Después Faby con la cara desencajada salió de allí corriendo... detrás fue Ryan en su búsqueda. Austin miró a Ally, tratando de encontrar en su mirada alguna explicación, pero ella solo suspiró y acomodó la cabeza en su pecho.

- Austin: ¿Qué diablos sucedió allí? – Preguntó algo intrigado.

- Ally: Algo anda mal... - dijo ella preocupada. levantó la cabeza para hablar – Faby me ha dicho que está cansada de Ryan... ella siente que está cambiando... y que él ya no la quiere...

- Austin: Pero qué tonta...¡¡Ryan está matándose por darle un futuro!! – ella sonrió.

- Ally: ¿De verdad?

- Austin: ¡¡Claro!! ¡¡Ha estado tan metido en los libros que hasta a mi me sorprende!! No deja de tomar apuntes en clase... ¡¡me da miedo!! – rieron.

- Ally: ¿Entonces?

- Austin: Ella tiene que entender que estos son pequeños sacrificios... que a la larga se verán los resultados.

- Ally: Pero... ¡ella ha estado muy mal sin recibir noticias de Ryan!

- Austin: ¡¡Porque como te dije ha estado estudiando!! Es muy bueno en la clase Ally, y debo decirte que será un estupendo investigador... no porque se lo dicen sino porque él está empeñado en serlo... quiere ser algo de lo que Faby se sienta orgullosa...

- Ally: Ella está algo desilusionada con él... - acotó.

- Austin: ¿Va a dejarlo?

- Ally: No lo sé... - dijo apenada – ella ve lo que tu haces... y...

- Austin: ¿Compara?

- Ally: Aha...

- Austin: No debería.

- Ally: Pero lo hace...

- Austin: Esperemos que no llegue a mayores...
Después de bailar al menos media hora más y no teniendo noticias de sus amigos, Austin acompañó a Ally a la mesa, y se disculpó al dejarla sola un instante cuando su director y el coordinador de la academia, quisieron hablar unas palabras con él. Ally comenzó a ver por todo el salón. La mayoría de la gente mayor estaba enfrascada en charlas. Los jóvenes bailaban en el lugar dispuesto para ello. **Será mejor que aproveche ir al baño** se dijo, cuando caminaba hacia el corredor que llevaba al tocador de damas. Allí se retocó suavemente el maquillaje y se acomodó el peinado. No hizo caso a las miradas curiosas y salió tratando de pasar los últimos momentos de la fiesta.
Acercándose a la mesa, vio a Austin algo serio. Sonrió. Y sin decir nada se sentó en sus piernas... El pasó una mano por su espalda y con la otra tomó la mano de Ally y la miró a los ojos.

- Austin: "Si mi indigna mano, profana con su contacto este divino relicario - recitó, mientras acariciaba sensualmente la mano de Ally – He aquí la dulce expiación. Ruborosos peregrinos, mis labios se hallan pronto a borrar con un tierno beso, la ruda impresión causada..." – Ally abrió los ojos sorprendida, y sonriendo le siguió el juego.

- Ally: "Buen peregrino... sois harto injusto con vuestra mano, que en lo hecho muestra respetuosa devoción – Austin sonrió – pues las santas, tienen manos que tocan las del piadoso viajero – tomó la mano de Austin y la puso contra la de ella. El suspiró – Y esta unión de palma con palma, constituya un palmario y sacrosanto beso – él arqueó una ceja disconforme. Ella lanzó una risita traviesa.

- Austin: No tienen labios las santas - refunfuñó – ¿y los peregrinos también?

- Ally: Si peregrino... - rió – labios que deben consagrar a la oración.

- Austin: ¡Oh! – dijo dándole énfasis a la exclamación - Entonces, santa querida, permite que los labios hagan lo que las manos. Pues ruegan, otórgales gracia para que la fé, no se trueque en desesperación... - Ella rió.

- Ally: Las santas permanecen inmóviles cuando otorgan su merced - dijo mirando la seductora boca de su novio. Él se mojó los labios presuroso.

-Austin: Pues no os mováis, mientras recojo el fruto de mi oración. Por la intercesión de vuestros labios, así sea borrado el pecado de los míos - la besó suavemente, pero antes de separarse, no pudieron resistir la tentación de jugar un poco con sus lenguas. No se dieron cuenta que Ryan ya había vuelto y los miraba como no pudiendo creer lo que veía. Se separaron mirándose intensamente...

- Ally: Mis labios, en este caso – dijo tratando de serenarse - tienen el pecado que os quitaron... - él la miró sorprendido. Ella rió de nuevo.

- Austin: ¿Pecado de mis labios? – se tomó la frente cual actor de teatro, demostrando sufrimiento - ¡¡Oh, dulce reproche!! Volvedme el pecado otra vez... - y se besaron con mas intensidad. Luego se miraron y rieron....

- Ally: Sois docto en besar..." – y volvieron a besarse, pero esta vez solo fue un mero roce de labios.

- ***: Y aquí es donde aparece la nodriza y se lleva a Julieta... - Ryan los miró apesadumbrado, ellos se separaron diciéndose con la mirada lo mucho que deseaban estar juntos. Pero el suspiro de su amigo, hizo a Austin mover su cabeza y mirarlo- ¡¡Y no hay historia tan trágica como la de Julieta y su Romeo!!

- Ally: Cómo sabes que estábamos recitando una parte de ...

- Ryan: Vivo con Austin... - dijo tomando un poco de vino – Me he leído todos esos libros empalagosos porque bueno... Austin se ha puesto un tanto... sentimental – Ally miró a su novio.

- Ally: ¡¡Y eso me encanta!! – lo besó efusivamente.

- Austin: Es que no sabía qué hacer, para no pensar todo el tiempo en ti... - apoyó su cabeza en el hombro femenino.

- Ryan: Si... - resopló – de todas maneras, mi vida con Faby podría ser fácilmente como la historia de esos dos...

- Austin: ¿Cuál es el problema ahora?

- Ryan: Parafraseando a Shakespeare – suspiró – "¡Cuántas desgracias terribles ocasionan las discordias privadas! Sea la causa cualquiera, el inevitable efecto es una calamidad..."

- ---: ¿Qué sucedió? – dijeron los novios a la vez.

- Ryan: ¡¡Fabiola terminó conmigo!!

#BGFY

Aprendiendo a ser RománticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora