Aprendiendo a ser Romántico

Capítulo 72

- Austin: Al director..– dijo abriendo los ojos y separando los informes, tomando una fotografía, donde un hombre con el cabello corto aunque podía verse la gratitud del mismo, con barba y bigote... tapando su rostro con unos anteojos negros. Pero Austin podía reconocerlo. Esa nariz ganchuda la reconocería a kilómetros.

- Ricardo: Esta fue la última fotografía que le sacaron... hace tres meses... Creen que esta en Barcelona, España. Aunque lo han visto en un montón de lugares más. No se queda quieto, pero lleva un plan... siempre vuelve al los lugares que frecuenta. Pareciera que anda en círculos... ¿ves el mapa? – Austin tomó el mapa europeo – No esta más de tres meses en cada ciudad... se mueve como un ave... Y está solo.

- Austin: ¿Cómo es que...

- Ricardo: ¿Tiene dinero para viajar? – él asintió – no lo sabemos... creemos que tiene alguien que se lo proporciona... él no gastaba mucho dinero cuando era profesor... quizás tenga una caja llena de dinero.

- Austin: ¿Pero no han investigado?

- Ricardo: A su nombre nada... nada a nombre de Octavio Guzmán...

- Austin: Quizás algún cómplice...

- Ricardo: Puede ser... pero no tenemos certeza.

- Austin: Carolina... - dijo él mirando a su tío – Quizás ella este ayudándolo.

- Ricardo: No lo habíamos pensado.

- Austin: Es algo que se me ocurrió... Ella ayudó a su hijo con lo de el director ¿no? – Ricardo asintió – Un juramento inquebrantable... quizás ahora ella le esté devolviendo el favor...

- Ricardo: Podríamos investigarlo

- Austin: Hazlo por favor... y mantenme informado... de todas maneras... no deberíamos levantar muchas sospechas. Si esa mujer fuera su cómplice, no quiero atraparla antes... ¿entiendes? Quiero que Carolina siga haciendo lo que hace para ayudarlo... quiero que él esté confiado... que crea que una vez más se ha salido con la suya.

- Ricardo: Serás un excelente agente – dijo mirándolo a los ojos. Austin sonrió.

- Austin: No lo creas... es porque he estado demasiado tiempo cerca de Kate... ella analiza cada posibilidad minuciosamente – rieron- Le mostraré estos papeles cuando vuelva a verla – dijo y Ricardo no pudo dejar de notar cierto fastidio en su voz.

- Ricardo: ¿La castaña te tiene mal?

- Austin: ¡¡Ni que lo digas!! – suspiro – pero no quiero hablar de eso ahora – Se levantó, y mientras guardaba los papeles, miró nuevamente las fotos de su antiguo profesor- ¿Ricardo?

- Ricardo: ¿Si?

- Austin: Él no estaba muy orgulloso de su apellido... su padre era de la clase baja ¿no?

- Ricardo: Si

- Austin: ¿Y si la cuenta en el banco no estuviera a nombre de Guzmán?

- Ricardo: Es una posibilidad... - dijo pensativo.

- Austin: Deberías investigar a Karina Fernández – Ricardo lo miró sin entender – Era la madre de Octavio...

- Ricardo: ¡No se nos ocurrió! – dijo sonriendo – investigaré por ese lado...

- Austin: ¿Algo más que decirme? – Miró a Ricardo y juró que su tío, se había puesto colorado.

- Ricardo: Austin... hay algo que debo decirte... Como verás, me han ofrecido el puesto de profesor...

- Austin: Si, y de verdad me alegro por ti.

- Ricardo: Si... - titubeó – pero no sé...

- Austin: ¿Piensas no aceptar? – dijo mirándolo sorprendido. Sabía que su tío peleaba por ser profesor en la universidad.. a pesar de su enfermedad.

- Ricardo: Es... algo complicado – dijo nervioso – nunca he estado en una situación como la de ahora...

- Austin: Vamos Ricardo... ya has sido profesor, ¿que puede ser diferente ahora?

- Ricardo: Antes no tenía una mujer Austin- lo miró más colorado – y definitivamente no tenía un bebé en camino... - Austin abrió los ojos y miró a su tío. Era eso, se dijo para si mismo, el motivo de su brillo en los ojos y de su sonrisa...

- Austin: ¡¡Felicitaciones!! – dijo y rodeó el escritorio para darle un cálido abrazo – Pero no quiero que me quites mi cuarto ¿eh? – Ricardo rio – aun tengo pensado quedarme más tiempo aquí... al menos hasta que mi departamento esté preparado.

- Ricardo: ¿Como?

- Austin: Bueno... pensé que tu y Alejandra necesitaban privacidad... así que decidí que mientras estudio, invitaré a Ryan a vivir conmigo en el departamento de mi padrino...

- Ricardo: ¡¡Pero si esta es tu casa!!

- Austin: ¿Te importaría que te la regale? – Ricardo abrió los ojos sorprendido – Es que... yo no necesito esta casa. Tengo pensado construirme otra... para cuando...– se puso rojo. Su pensamiento se desvió hacia Ally.

- Ricardo: Ella te aceptará... – Austin miró a su tío, rogando que tuviera razón – solo es cuestión de esperar.

- Austin: Eso espero – dijo suspirando – ya me veo pasando la vida, de soltero como Enrique – Rieron.

- Ricardo: Eres como un hijo para mi Austin

- Austin: Y tu como un padre – se abrazaron – Creo que debemos irnos... la señora Michelle estará desesperada.

- Ricardo: ¿Por qué?

- Austin: No hemos dado señales de vida desde la mañana... - salían del despacho – mantenme informado de lo que investigues por favor...

- Ricardo: No te preocupes... Si todo sale bien Octavio estará en la cárcel antes de fin de año...

- Austin: Ya veremos... por lo pronto quiero que aceptes ese puesto tío – dijo mientras llegaban abrazados a la sala, donde Ryan y Ale conversaban animadamente – Creo que Ale no debería trabajar ya...

- Ale: ¿Y por qué debería dejar mi trabajo Austin? – dijo seria.

- Austin: Bueno, ¡¡porque mi hermanito saldrá algo histérico si no te tranquilizas tía!!

- Ryan: ¿Estás embarazada? – dijo anonadado. Ale sonrió y asintió, pasando su mano por su vientre – No pierden el tiempo ¿eh? – Dijo soplando. Austin le tiró un golpe mientras abrazaba a Ale.

- Austin: ¡Que poco tacto tienes amigo! – dijo mientras Ricardo colorado, tosía, y Ale se reía.

- Ryan: Perdón Ricardo... es que pensé que a tu edad... – murmuró sin notar a Austin que le abrió los ojos – mejor me callo.

- ---: ¡Mejor! – dijeron los tres.

- Ryan: Vámonos Austin... mi mama me gritara a los cuatro vientos, porque no hemos llegado a cenar... y lo peor no le hemos avisado que nos tardaríamos tanto.

- Austin: ¡Nos estamos viendo! – dijo dándole un beso a Ale – Si me aceptan en la academia, tendré que hacer las pruebas para medir mi temple y mi capacidad... así que vendré a comer por aquí.

#BGFY

- Ale: Te esperaremos cariño – dijo revolviendo su cabello. Salieron a la noche tibia. El verano era la estación que Austin amaba. Con una sonrisa, comenzó a caminar. Ryan iba a su lado mirándolo raro.