Capítulo 123

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  Soy yo,
Quien busca el encuentro, para ser de ti, Soy yo
Y soy, quien todo lo ha dado, sin pensar en mi, yo soy...
Ella apoyó su cabeza en el pecho de Ryan, quien le dio un suave beso en la cabellera. Faby pudo jurar que lo escuchó decirle "Te amo". Ella cerró los ojos, pero no pudo evitar derramar algunas lágrimas. El corazón de Ryan latía con fuerzas.
Aquel que una estrella del cielo te quiere bajar
Quien solo el tenerte, despierto con ganas de amar
Quien más se te arrima, y más te adivina soy yo.
Si un día el universo completo tu quieres te doy
No olvides un loco en el mundo tu tienes, yo soy
Quien más te ha anhelado, y más te ha esperado soy yo...

- Faby: Ryan – dijo no podiendo controlar un sollozo. El la separó un poco y la miró. Odiaba verla llorar.

- Ryan: Perdóname Faby... - Dijo apenado – yo... no pensé que mi actitud podría herirte...

- Faby: No, Ryan... yo soy una tonta... - dijo mientras unas lagrimas recorrían su cara. Él sonrió, y le pasó los dedos por su mejilla

- Ryan: No me gusta verte llorar... - la abrazó – lo siento... He estado tan empecinado en tratar de ser alguien... en lograr que te sientas orgulloso de mí...

- Faby: ¡¡Pero yo estoy orgullosa de ti!! solo que me he sentido algo sola... ya no compartimos todo entre los tres... ahora son Austin y tú, y yo...

- Ryan: Lo sé... pero entiéndeme... todo lo que hago, es para ti.

- Faby: ¡¡Yo sólo te quiero a ti!!

- Ryan: Y yo también... - la besó – Te amo linda...

- Faby: Te amo bebe, no al gran estudiante... amo a mi Ryan... algo loco, divertido, despistado y vago...

- Ryan: Prometámonos que si algo nos molesta, hablarlo... no te quedes callada, dime si algo de lo que yo hago te hace sentir mal...

- Faby: Prometido - dijo ella sonriendo.

- Ryan: Tengo algo para ti... - le dió un paquetito.

- Faby: Ya me has regalado el libro de cocina... –El rió

- Ryan: Sé que te enojaste por eso – ella sonrió – pero te lo regalé por una razón.

- Faby: Ah, ¿si? ¿Y cuál es...?

- Ryan: Pensé que tú, siendo tan inteligente, lo adivinarías...

-Faby: ¡Pues mi mente estaba algo turbada, cuando vi ese libro!

- Ryan: Bueno... tú me dijiste que no eras como Ally a la hora de cocinar... por eso te lo regalé.

- Faby: Pero...

- Ryan: Así cuando te pida que nos vayamos a vivir juntos, sepas al menos freír un huevo.

- Faby: ¿En verdad? – dijo ella mirándolo con ilusión.

- Ryan: Si... a mi me gustan los huevos no muy crudos, bien cocidos...

-Faby: ¡No! – dijo dándole un golpecito suave en el pecho – ¡¡eso de vivir juntos!!

- Ryan: Si – ella se puso de puntas de pie y le dio un beso en la boca.

- Faby: Entonces te prometo que me convertiré en una experta cocinera, lo más pronto posible – se abrazaron.
Ally y Austin miraban desde la mesa la escena, aunque de vez en cuando se perdían en arrumacos.

- Ally: ¿Tú le sugeriste esa canción? – dijo ella perdida con los besos que Austin le daba en el cuello.

- Austin: Si – respondió suavemente.

-Ally: Es bellísima... - dijo ella haciendo un suave ronroneo cuando Austin pasó, sensualmente la lengua y le dio un pequeño mordisco en el lóbulo de la oreja – Austin... no hagas eso... - dijo algo colorada.

- Austin: Perdón...- dijo él con una voz ronca – te quité el aro – ella sonrió – Mejor tenlo.. me molesta en mi actividad favorita...

- Ally: ¿Y cuál es?...

- Austin: Saborearte... - ella lo miró y sin mas le dio un beso... demasiado candente para ambos... se separaron un instante – no sabes lo mal que me hace tenerte así... - ella sonrió – en verdad Ally... - besó su nariz – quiero...

- Ryan: ¡Hola! – dijo abrazado a Faby, y se sentaron a la mesa.

- Ally: ¡¡¡Ryan!!! ¡¡Felicidades!! – dijo para salir del paso, porque sabía que iba a decirle Austin. Cómo no saberlo si ella estaba deseando lo mismo.

- Ryan: ¿Por qué me felicitas?

- Ally: La canción ha sido hermosa...

- Ryan: Ah... - dijo mirando a Austin, que estaba a punto de matarlo por la interrupción– si, bueno... tuve una buena ayuda.

- Austin: Me alegro por ti – dijo apretando los dientes – ¿ya se van?

- Faby: Bueno, si eso quieres...

- Ryan: No nos iremos... le hice un regalo a Faby – miró a su novia – aun no lo has abierto– ella rompió el envoltorio. Ally miraba expectante, aguantando los besos de Austin en el cuello, mientras le acariciaba suavemente la cintura. El gritito agudo de Faby los hizo separar.

- Faby: Ryan... - dijo levantando una delicada cadena de oro blanco de la que pendía un diamante en forma de estrella – es ...

- Ryan: Lo que te mereces... - le dio un beso.

- Faby: Pero no has debido... es muy...

- Ryan: ¿Hermosa?

- Faby: ¡¡Si!! Pero...

- Ryan: Fabiola – dijo tomando la cadena y poniéndosela – la academia les paga un sueldo a los aspirantes... no es gran cosa, pero lo he ahorrado casi a todo.

- Faby: No has debido... - dijo mirando embelesada la estrella en su pecho.
- Ryan: Te lo dije – la tomó del mentón – es lo que te mereces... - le dio un besito – mereces que te baje todas las estrellas del universo, pero como no puedo, esto es como si lo fuera...

- Faby: Eres un amor Ryan – Se besaron intensamente, situación que utilizo Austin para acercarse al oído de su novia.

- Austin: No soporto más... Quiero estar contigo esta noche – ella lo miró – Te amo... -le dio un beso.

- Ally: Yo... - dijo ella perdida en sus ojos. Se quedaron así un rato largo.

- Austin: ¿Crees que te dejen quedar en mi apartamento? – susurró.

- ***: No lo creo... – dijo una voz grave, que hizo brincar a Ally de la falda de su novio. Austin se puso de pie.

- Ally: ¿Qué, papá? – dijo ella colorada. **¡¡Mi suegro me mata!!**, pensó el creyendo que Eduardo lo había escuchado.

- Eduardo: Le decía a tu madre, que no creo que podamos quedarnos más tiempo...

- Ally: Pero...

- Eduardo: Ally... si bien tú estás de vacaciones, yo trabajo y...

- Austin: Pero señor... la fiesta aún no ha terminado...

- Eduardo: Lo siento Austin... no podremos manejar... tu madre ha bebido algo y yo también...y si vamos en taxi tenemos que salir ahora, porque...

- Austin: ¡No quiero que ella se vaya ahora! – dijo terco.

- Eduardo: ¿Cómo? – preguntó sorprendido de la forma en que Austin le hablaba.

- Austin: Digo... - carraspeó abochornado – es que... no hemos bailado mucho... y ella quiere... bailar...
- miró a su novia pidiendo socorro – ¿no?

- Ally: Si – dijo ella mirándolo como para matarlo - Papá, si tu quieres irte por mi no hay problema – su padre arqueó una ceja – puedo ir a dormir a casa de Ryan...

- Eduardo: No lo sé... - dijo algo dubitativo.

- Faby: Vamos señor... Estaremos en el departamento de Austin, que hay lugar de sobra.

- Michelle: ¿Y tu cómo sabes? – Faby quiso cavar una fosa y enterrarse.

- Faby: Algunas veces hemos ido con... con...

- Ryan: Algunos amigos.. ¿verdad?

- ---: ¡¡Si!! – dijeron los tres, incluida Ally que nunca había visitado el departamento de Austin.

- Michelle: Pues no sé... – dijo entornando los ojos – no creo... vamos Ally.

- Ally: ¡¡Pero mami!!- dijo ella zapateando – ¡¡no quiero ir!!

- Eduardo: Vámonos nena...- dijo dulcemente..

- Ally: ¡Ya no soy una nena! – dijo furiosa – soy mayor de edad y puedo decidir dónde dormir...

- Michelle: Mira... - iba a gritar..  

#BGFY

Aprendiendo a ser RománticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora