Dos horas después, Austin se arrepintió de haber dejado que Ally probara la bebida... porque una vez que degustó la cerveza, no paró hasta probar el tequila... lo malo es que el resto de las muchachas se prendieron en esa faceta exploradora de Ally... así fue como después de tres tragos de esa bebida, las chicas se habían parado en los sillones, a bailar y cantar, como gatos aporreados, una canción de Ricky Martin... que a ver de Austin, y de acuerdo a lo que mostraba una enorme pantalla gigante, movía exageradamente su trasero y repetía hasta el cansancio "Living la vida loca" o lo que sea que dijera en español. Ryan lo miró con rabia... gracias a que el mismísimo Austin les había suministrado las bebidas, la noche estaba arruinada; lo peor era que las cinco chicas, no tenían intenciones de dejar de cantar... y al estar tan "desinhibidas", eran el blanco de todas las miradas masculinas...
- Ryan: ¿Por qué tenías que darle eso a mi hermana? – dijo mirándolo ceñudo.
-Austin: ¿Cuántas veces tengo que explicártelo? – dijo cansado de escuchar los alaridos de las chicas, al ver el cuerpo semidesnudo del cantante en la pantalla, y con los zapatos de Ally en la mano – Estaba por el piso... descubrió a su novio a los besos con otra... yo no pensé que se lo iba a tomar tan mal... - bufó – además, yo solo le di un trago, y fue una cerveza ... ¿quién diablos le convidó tequila?
- Ryan: ¡¡Fabiola!!... lo más lindo es que me han quitado las ganas de beber.
- Christian: ¡No eres el único! – dijo malhumorado – Jack era el conductor designado...ahora tendré que aguantarme la gritadera que me dará el papa cuando la lleve a su casa en ese estado.
- Ryan: Austin... ¡¡es la una de la mañana!! ¡¡Debemos llegar temprano porque Ally tiene que estar en el tren a las once!! – Austin recién cayó en cuenta que se estaban olvidando de un pequeño detalle.
- Austin: Y déjame preguntarte... ¿cómo diablos llevaremos a estas dos escandalosas a tu casa? – Ryan quedó blanco, mientras el pie de Faby, pasaba por su cara – y lo que es peor, ¿qué excusa daremos a tus padres cuando las vean así de borrachas? – No pudo escuchar la respuesta de su amigo porque Ally cayó del sillón, y sin decir nada, se sentó a horcajadas en su falda.
- Ally: ¡¡Hola guapo!! – dijo sonriente – ¿alguien te ha dicho esta noche que estás para el crimen? – y rió tontamente.
- Austin: Ally... – dijo él colorado– será mejor que nos vayamos...
- Ally: ¿Y dónde me piensas secuestrar? – dijo sensualmente, pasándole la mano por el cabello.
- Austin: ¡¡Pues a tu casa!! – dijo en un tono agudo – Es tarde... mañana tienes que tomar el tren – trató de levantarse, pero ella no se movía– Ally vamos... tengo que llevarte, y encima tus padres...
- Ally: ¡¡Aguafiestas!! – dijo haciendo un mohín – ¿no te das cuenta que estoy destrozada? – dijo y amagó con llorar – ¡¡mi novio me adornó la cabeza!! Anda... – lo miró a los ojos – necesito uno de esos besos que me das y que dejan sin respirar – Austin la miró un segundo... pero luego sacudió la cabeza.
- Austin: No Ally, estás borracha será mejor que nos vayamos...
- Ally: Bueno – dijo ella ceñuda – pero me tendrás que llevar en tus brazos... - rió- ¡¡estoy tan ebria que me voy a caer!! – Él sonrió y sin decirle nada más, le colocó los zapatos, la cargó y la sacó del lugar. La noche estaba fresca, por lo que Ally se apretó contra su cuerpo – realmente estás muy bueno Moon...
- Austin: Si, déjate de tonterías... - Pero no pudo decir más, porque Ally lo calló de un beso... tuvo que apoyarla en el auto para disfrutar de esa boca – Ally basta... – dijo aguantando la batería de besos que ella le daba en el cuello, mientras él trataba de encontrar las llaves del auto.
- Allly: ¿No estoy tan ebria sabes? – él la miro... ella lo besó.
- Austin: Entra al auto – ella negó – vamos no te pongas en ese plan—ella rio.
- Ally: Debemos esperar a que los tórtolos entren, cariño – dijo sensualmente- ¿Se te ocurre hacer algo mientras?
- Austin: No, pero será mejor... – y nuevamente los labios de Ally se unieron a los del joven, aunque esta vez él le respondió... apoyando su cuerpo en el de ella... se separó rápidamente... mas de esos besos bajarían cualquier defensa. Vio como Ryan, peleaba con Faby para entrarla al mini Cooper, y después la invitó a entrar...ella muy a su pesar, lo hizo.
A medida que llegaban a la casa una inquietud surgió en los varones... cómo harían para subirlas a sus cuartos y que nadie se entere del estado de las chicas... Para alivio de Ryan, Faby se había dormido... pero fue alivio a medias, porque al querer bajarla del auto, la castaña parecía un tronco... Ryan iba a cargarla cuando las risas chillonas de Ally lo hicieron darse vuelta y vio a Austin todo colorado, aguantando los embates de su hermana.- Austin: Ryan – dijo casi al borde de la histeria – ¡¡ayúdame por favor!!
- Ryan: ¡¡Ni loco!! – dijo bufando – no sabes lo que pesa Faby...
- Austin: Pero entonces deja que yo suba a Fabiola...
- Ally: ¡¡Mira Austin!! – gritó - ¡¡Ese es el cuarto de mamá!! ¡¡Hola mamá!! ¡¡Ya llegamos!! – Y la mano de Austin le tapó la boca
- Austin: Voy a aturdirla si sigue así... ¿cómo haremos para entrar?
- Ryan: No sé... -dijo todo rojo – pero piensa en algo rápido y efectivo porque ya estoy tentado de dejarla tirada en el pasto...
- Austin: Bien... algo rápido y efectivo...
- Ally: Vallamos a tu cuarto – le dijo al oído – merezco una buena despedida de parte tuya – El volteó a verla, ella le tomó el mentón y le dio un beso
- Austin: Eh... -dijo carraspeando... - ¿que tal si nos vamos, digo nos vamos a el cuarto de las chicas?
- Ryan: Buena idea – y al segundo subieron de una manera que nadie los viera. Al llegar al cuarto de Ally, con sumo cuidado, Ryan dejó a Faby en su cama. Austin tuvo que lidiar con una latosa Ally que no quería acostarse... al cabo de un rato, se durmió. los muchachos suspiraron y salieron del cuarto... se miraron un instante riendo en voz baja. Se despidieron y cada uno partió para su cuarto.
#BGFY
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Aprendiendo a ser Romántico
Random¡Ok! explícame nuevamente como si tuviera 5 años...- respiró - ¿Quieres que haga qué? - Fué lo primero que dijo Ally al escuchar a su amigo. Desde hacía varios años había logrado vencer la timidez y el sonrojo que le ocasionaba estar frente a él, y...