Un ser querido • Kakashi Hatake

Legendario Sannin

Capítulo 33

Yo puse mi mano alrededor de su cuello y lo levanté dejándolo a mi altura, antes de que este se pudiera mover, cargué bastante chakra en mi puño derecho mientras ponía mi mano izquierda en su mejilla para que no saliera volando del golpe. Un fuerte estruendo se escuchó en su mejilla y el viejo cayó al suelo luego de que lo soltara. Una fuerte inflamación junto con la marca roja de mi puño apareció en su cara que era entre una mezcla de sorpresa y terror. Espero que el dolor no se me pase en unos cuantos días a ese pervertido. Creo que supera a Kakashi por lejos.

-Ahí tuvo su merecido por espiar tantas mujeres sabio pervertido-ttebayo- comentó riendo el niño detrás de mi, yo me giré para mirarlo, cuando le vi a los ojos era un chico muy tierno, de cabellos rubios, ojos celestes, una gran sonrisa, y unas marcas en sus mejillas. En resumen, era el alumno de Kakashi, aquel que había visto en la fotografía de su casa junto al Uchiha malhumorado y Sakura.

-Cuida que tu "sensei" no haga más estupideces- dije sonriendo y luego me fui, tenía que contarle a Kakashi de esto, por ninguna razón se podían cruzar ellos dos.

Naruto no me conocía, pero por supuesto que conocía a Kakashi, y si lo ve le podría contar a alguien y toda nuestra coartada falsa de que somos ninjas perversos se arruinará.

Minutos más tarde

-¡Kakashi!- grité entrando a la habitación de golpe - está aquí - dije mirando sería al peliplata que parecía no entender nada- tu alumno Naruto, yo estaba en las aguas termales masculinas y allí estaba, estoy segura de que era él.

-¿Que hacías tú en las aguas termales de los hombres?- preguntó Kakashi divertido a lo que yo rodee los ojos ¿Acaso le parece más importante que yo esté allí a que su alumno el cual puede arruinar todo nuestro plan esté a unos metro de nosotros?

-Digamos que golpeando a un viejo pervertido- le contesté cruzándome de brazos, seguía enojada con ese viejo.

-¿Como era ese viejo pervertido?- preguntó este un poco más serio ya y demostrando un poco más de interés en todo el asunto.

-Uhm, cabello blanco y largo, más alto que tú y con unas extrañas marcas rojas debajo de sus ojos- contesté tratando de recordarlo.

-¿Y me dices que lo golpeaste?- comentó con una sonrisa socarrona, yo lo miré confundida y no le respondí- golpeaste a Jiraiya, uno de los tres legendarios Sannin.

-¿Qué?-mis ojos se abrieron como platos y luego volvieron a la normalidad recordando que se lo tenía bien merecido- bueno, así no me volverá a espiar a ninguna chica mientras se baña.

-Creo que lo mejor para no encontrarnos con Naruto es quedarnos aquí hasta que se vayan, ¿sabes si se están hospedando aquí?- tenía razón, Naruto no iba a aparecer aquí por arte de magia, si no habíamos y esperábamos que se fuera, no tendrían porque verse.

-No lo se- admití- pero puedo investigar, igual a mi no me conocen, a ti en cambio sí.

Estábamos hablando del tema cuando se escuchan tres suaves golpes en la puerta de la habitación. Ninguno esperaba alguna visita ni nada así que nos miramos con sorpresa. Le hice unas señas a Kakashi de que iría a ver yo y me acerqué a la puerta con un kunai en mi mano izquierda. Para mi sorpresa al abrir me encontré con Jiraiya, el pervertido. El supuesto "Sannin" porque ma verdad, no tenía pinta de ser muy fuerte en que digamos. No tenía esa aura de poder que demostraba Lady Tsunade.

-¿Está Kakashi?- preguntó con total naturalidad a lo que yo traté de mentir ¿Cómo es que sabía que Kakashi se encontraba en la habitación?

-¿Quién es Kakashi?- mi actuación había sido buena, si después de eso seguía insistiendo el sabía algo.

-Ayame, se que está Kakashi, déjame pasar, no les haré daño- yo abrí la puerta y el se quitó los zapatos y entró. Si sabía mi nombre, el de Kakashi y que este se encontraba aquí, definitivamente sabia algo.

Al cerrar la puerta Kakashi ya tenía su máscara como de costumbre y se encontraba sentado en el borde de la cama con solo un pantalón. Yo me paré a unos metros de ellos recargando mi espalda en la pared y cruzando mis brazos por arriba de mi pecho. Jiraiya tomó asiento y quedó frente a Kakashi y a mi.

-Parece que ustedes se conocieron hace unos minutos, Jiraiya- dijo Kakashi muy serio, más que de costumbre.

-Si, creo que no fue de la mejor forma pero la reconocí en cuanto me golpeó- dijo sobando su mejilla aún inflamada riendo de forma nerviosa.

-¿Qué quieres y qué sabes de todo esto?- le dije directa y cortante, no me agradaba ese viejo, después de todo es más pervertido que Kakashi.

-Tranquila- me dijo sonriéndome a lo que me relajé un poco- Tsunade me contó de su misión y quería venir a ver que saben hasta ahora y a advertirles algunas cosas.

-Ayame hoy escuchó algo se suma importancia pero todavía no pudimos informarle de eso al Hokage- dijo Kakashi, me hacía gracia lo serio y formal que se ponía ante las demás personas.

Luego de explicarle a Jiraiya todo lo que sabíamos empezamos a hablar de Naruto y los demás Jinchurikis.

-Entonces por el momento todos los Jinchirikis están a salvo, pero no pasará mucho tiempo hasta que eso cambie- dijo el Sannin con un tono de preocupación- Akatsuki no tardará en actuar y cuando lo haga lo único que podemos hacer es proteger a los Junchirikis.

-¿Y que hay de Naruto?- preguntó el peliplata con más interés de lo normal. Aunque él no lo dijera ni tampoco lo aceptara quería mucho al niño y se preocupaba bastante por él.

-Él está entrenando mucho, se va volviendo más fuerte, algún día ese niño nos superará a todos, y hablando de él, deben irse hoy, antes de que Naruto los vea, ahora está en una habitación junto conmigo, cuando yo suba a ella ustedes se tendrán que ir ¿Entendido?-preguntó, mas bien ordenó el peliblanco.

-Kakashi, tenemos que ir a entregar el cuerpo, ya sabes- dije señalando el pergamino donde había sellado a la mujer tiempo atrás.

Kakashi acompañó a Jiraiya hasta la puerta y este antes de irse le susurró algo que pude escuchar.

-Tienes una muy hermosa y joven compañera, debes actuar rápido antes de que yo robe su corazón, ya sabes a lo que me refiero- dijo riendo con una cara pervertida y con un tono muy infantil.

Kakashi se sonrojó bastante y le cerró la puerta en la cara para después mirarme y rascar su nuca con nerviosismo.

-Creo que debemos irnos- dijo mientras comenzaba a guardar sus cosas a loque yo lo imité.

-¿Crees que estarás bien?- le pregunto refiriéndome a como había salido tras nuestra anterior batalla.

-Si, ahora, vámonos- dice cargando su bolso luego de ponerse la capa de Akatsuki.

Salimos del lugar tranquilamente y emprendemos rumbo para poder cobrar el cuerpo de la mujer, esa mujer que nos había causado tantos problemas pero a su vez nos ayudaría a ganarnos la confianza de Pain, por el dinero que esta nos daría.

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¡Hola! Quería avisar que antes de subir el siguiente capítulo voy a esperar a llegar a las 900 leídas, espero no les moleste

Perdón y gracias 💕

-Dimoche