Un ser querido • Kakashi Hatake

Batalla

Capítulo 55

Sin darme tiempo a reaccionar Kakashi me levantó en el aire y yo enrollé mis piernas alrededor de sus caderas permitiéndole agarrarlas para estabilizarse.

Caminamos así por un largo pasillo hasta llegar a su habitación, nos separamos para respirar y conectamos miradas, el tenía un leve rubor en sus mejillas, el cabello totalmente despeinado y ambos ojos abiertos dejando ver ese característico Sharingan. Sin poder evitarlo le sonreí y él copió mi gesto.

Apoyó su cabeza entre mi hombro y cuello y me estrechó más entre sus brazos mientras se dejaba caer en la cama encima de mí. Se apoyó en ambos codos para no aplastarme y me miró fijamente por varios segundos.

-No puedo creer la suerte que tengo al encontrar a una persona tan buena para mí como lo eres tú- susurró en mi oído para luego suspirar y dejarse caer a mi lado.

Yo simplemente me apegué a él y lo abracé pasando mi pierna derecha por arriba de él, deposité un beso fugaz en sus labios y hablé.

-Yo no puedo creer que después de tanto dolor hay algo de felicidad.

Y tras unos minutos más junto a él me quedé dormida.

Días después.

Ya habían pasado algunos días desde que eso sucedió y todo a ido de bien a mejor, él ya casi que pasa todo su tiempo en mi casa además de que la comunicación ha mejorado bastante. Él ahora se encuentra con su cabeza apoyada en mi regazo mientras lee un libro, yo por otro lado acaricio su cabello con mi mano derecha y en la izquierda sostengo un delicioso té que él me preparó minutos atrás, los peces del estanque nadan sin parar de aquí hacia allá persiguiendo pequeños pecesitos

-¿Algún día me dejarás leer ese libro?- pregunto sin mas rompiendo el silencio.

Kakashi lo baja un poco para hacer contacto visual.

-Primero debes responderme algo- dice serio -¿Qué somos?

Era una buena pregunta, aunque me tomó por sorpresa no me alteré en lo absoluto, me resultaba un poco incómodo aquello pero no más, solo esperaba que esta no fuera una pregunta trampa y que él pensara lo mismo que yo al respecto.

-Supongo que estamos saliendo, una monogamia.

-Monogamia...entonces ¿solo podemos salir entre nosotros, no?

-Si estás de acuerdo- respondo con una pequeña sonrisa.

-Supongo que entonces sí puedo prestarte este libro- susurra con sensualidad mientras me lo entrega y guiña un ojo.

-¿Porqué necesitabas saber eso para prestarlo?- esto me estaba confundiendo, Kakashi me confundía.

En un rápido movimiento se abalanzó quedando encima de mi recargando su peso en sus manos y rodillas.

-Pues porque...- susurra antes de besar mi cuello- tenía que estar que no pudieras utilizar nada de lo que está escrito allí con cualquier otro hombre.

Me quedé totalmente asombrada y con bastante vergüenza, lo empujé y él me ayudó a levantarme mientras reía.

-Eres un pervertido.

Él solo asiente, deja un beso en mi frente y se va hacia su misión. Ahora me tendría que quedar unos días sola hasta que él volviese, así que aprovecharía para leer ese libro que más de un año me había costado conseguirlo.

Me dispongo a leer la primera página pero en ese mismo instante soy interrumpida por un ANBU desconocido para mí que aparece a mi lado.

-La Hokage solicita su presencia.

Y tras estas palabras desaparece, supongo que tendré que dejar el libro para más tarde. Entro a la casa y me cambio rápidamente con mis ropas habituales y aparezco frente a ella en un parpadeo.

-Ayame, no aparezcas tan repentinamente- murmura un poco enojada ella mientras se para de su asiento.

-Perdóneme ¿Para qué me necesitaba?

-Sígueme y lo verás tú misma.

Yo solo me dispuse a acatar sus órdenes y la seguí, caminamos por un rato largo por el edificio en cuestión, subíamos y bajábamos escaleras, pasando por puertas y lugares totalmente desconocidos para mí, hasta que al final llegamos a una especie de sótano donde había varias armas, objetos de entrenamiento y cosas de ese estilo.

La miré a la espera de que dijera algo pero no lo hizo, solo se quedó quieta, como esperando a que algo sucediera, hice lo mismo y por suerte tras un par de minutos en un incómodo silenció aparecieron cinco ANBUs, uno de ellos el ya conocido amigo de Kakashi.

Tres de ellos, incluyéndolo, en un rápido movimiento se colocan detrás de Tsunade, mientras que los otros dos restantes se colocan frente a mí.

-Bueno Ayame, ahora lucharás.

-¿Qué?¿Contra quién?- pregunté bastante sorprendida por su comentario.

-Contra ellos dos, intentemos que no muera nadie.

Todos se corrieron hacia atrás dejándonos espacio para luchar, estaba bastante confundida pero creo que no me quedaba más opción que hacer lo que me ordenaba. No podía ser tan difícil, solo eran dos ANBUs, o sea los más altos ninjas de élite contra mí, que me había convertido en Jounin poco tiempo atrás y no entrenaba desde hace meses.

Estaba claramente en desventaja, debía analizar todo para sacar la mayor cantidad de información, ambos eran Shinobis, aunque no eran tan altos tenían bastante más masa muscular, por lo que si me enfrentara en Taijutsu directo perdería.

Lo mejor en este caso que son dos contra uno sería esquivar sus ataques hasta ver qué Jutsu manejan, para luego contra atacar.

Apenas dieron la señal lancé todos los kunais que tenía excepto uno que escondí en mi manga izquierda, ellos comenzaron a atacar con armas y Tijutsu pero podía esquivarlos, era difícil al ser dos pero lo lograba, supongo que mis reflejos me estaban funcionando a la perfección. Después de darse cuenta que no lograrían nada al seguir atacando de esa forma uno de ellos por fin dio a conocer un Ninjutsu. Era de elemento Tierra, ese elemento es débil ante el elemento viento, el cual yo poseía, ya tenía información valiosa, así que como pude esquivé las piedras que venían hacia mí.

Estaba en el aire cuando veo que el segundo comienza a utilizar su Ninjutsu, que para mi mala o buena suerte de el "Jutsu de posesión a de sombras", por un lado me beneficiaba ya que ya conocía este Jutsu gracias a mi Sensei por lo cual ya conocía sus puntos débiles, pero lo malo era que era un buen Jutsu y si caía en el perdería automáticamente, casi no tenía puntos débiles y para peor contaba con menos de un segundo para reaccionar ya que iba a caer directamente sobre la sombra.

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Perdón por tardar tanto, espero les guste.

-Dimoche.