Un ser querido • Kakashi Hatake

Subordinados de Orochimaru

Capítulo 16

Al entrar a la habitación me agobia un fuerte olor, el olor a mi hermanito, una lágrima cae de mi mejilla pero la seco rápidamente, no puedo llorar, mi hermano estaría enojado se me viera así, el siempre estaba sonriente y se mostraba fuerte antes todos, tenía esa personalidad tan cálida, que daba gusto estar a su lado.

Caminé por la habitación, varios recuerdos me inundaron pero traté de apartarlos negando con la cabeza. En una mesa que está al lado de su cama esta su collar, recuerdo que siempre lo usaba, es una cuerda negra y tiene una piedra de aguamarina, me paso y la amarro el collar en mi cuello, así tengo un recuerdo suyo.

Salgo de la habitación de mi hermano y voy a la de mis padres, ellos dos eran los más fuertes del Clan, en toda la aldea se oía hablar del buen equipo que hacía, ojalá algún día encuentre alguien así.

Su habitación al contrario de la de mi hermano estaba perfectamente ordenada y tenía un olor neutro, también me quería llevar algo de ellos pero no sabía qué hasta que vi la camisa que siempre usaba mi madre, era ajustada y tenía el símbolo del Clan en los hombros y la espalda, años atrás me la probé y me llegaba a los tobillos, pero creo que ahora es de mi talla.

Me la llevé y la guardé en mi bolso y cuando estaba terminando de cerrarlo alguien golpeó la puerta, yo ya sabía exactamente quien era así que solo grité.

-¡Pasa!Esta abierto.

-Buenas tardes- dijo Kakashi y cerró la puerta tras de sí.

El traía puesta ropa diferente a la habitual, ya que no tenía su chaleco y su camiseta era un poco más ajustada con cuello en V hasta su esternón y de un color azul, y en su espalda un bolso.

-Toma asiento si quieres- le dije señalando el sofá.

El hizo lo que le dije y sacó su libro, ese que siempre leía, realmente me daba un poco de curiosidad leerlo pero creo que no es el momento para robarlo.

Terminé de arreglar y dejé mi espada en mi cuarto, ya que a esta misión no la llevaría.

Unas horas después

-Creo que ya es momento de marcharnos- dice Kakashi sonriendo de una forma amable, pero se notaba que no estaba muy feliz.

-Estaba pensando en eso ¿Como haremos para saltar la guardia sin lastimar a alguien?- supongo que la seguridad es fuerte en Konoha, o eso recuerdo de años anteriores.

-Los pondré bajo un Genjutsu con mi sharingan- respondió restándole importancia alguna.

Luego de esa breve charla salimos, cerré todo, al salir me di cuenta que ya era de noche, todo estaba en completo silencio. Nosotros sigilosamente nos dirigimos a la entrada de Konoha.

Para nuestra suerte no había nadie haciendo guardia así que solo pasamos por ella, pero en cuando estábamos a punto de salir aparecen dos Jounin, uno con una venda en su nariz y el otro masticando una aguja Senbon.

-M emuestras el permiso de la Hokage, Kakashi- dice uno de ellos.

Kakashi y yo nos miramos por unos segundos y proseguimos con nuestro plan.

Kakashi pone en un Genjutsu al que formuló la pregunta mientras yo rápidamente golpeo al otro en el abdomen y luego lo amarro con un cuerda.

Este se retuerce un poco intentando salir, pero le es inútil, esta bien hecho el nudo.

-¿Por qué hacen esto?- pregunta enojado y luchando desesperado por liberarse.

-¿Qué no es obvio? Konoha no es lo que parece, solo nos han traicionado y mentido aquí, nuestro único objetivo actual es procurar la destrucción de esta aldea- respondo siguiendo mi personaje, era un poco difícil mentir de esa manera, pero necesitábamos que nos odien.