Capítulo 62
Tras ése comentario me giré rumbo a mi vestidor, pero al hacerlo me choqué con Tenzo, se le notaba enojado por los comentarios y seguramente iba a entrar para retarlos pero lo frené.
-No hay problema, las estupideces que dicen no me afectan, y si lo haces por Kakashi mejor ni lo hagas, esto no es de su incumbencia, más adelante se acostumbrarán, o no, ya veremos.
Él, no muy convencido asiente y cuando entra un profundo silencio se forma en la habitación, luego de cambiarme me voy a comprar algo de comer. Sinceramente quería estar sola, así que me subí a la cima de un árbol no muy lejano, y me puse a leer la novela que Kakashi me había prestado, no iba mucho de ésta así que todo iba medio tranquilo, pero cuanto más avanzaba se podía notar más el erotismo. Marqué la hoja y lo guardé. Vino a mi mente lo que decían aquellos hombres en el vestuario ¿Qué tan buenos eran mis padres? ¿Algún día los superaría o en realidad no tenía potencial? ¿Estaría desperdiciando mucho tiempo valioso? Como me gustaría que estén aquí para saber todo eso, quizá si ellos me hubieran entrenado en mi infancia todo sería muy diferente, hasta podría ser una maestra en el Genjutsu, como varios otros Natsuhoshi.
Si estuviesen vivos les preguntaría tantas cosas, pero la más importante sería acerca de la relación entre los Uchihas y nosotros, hace un tiempo traté de hallar información, pero no encontré mucho al respecto, soy una inútil. Estaba enojada, no entendía bien porqué pero no lo pude evitar, nunca llegaría a ningún lado si no mejoraba, no puedo decepcionar a mi Clan, no puedo permitir que su única miembro y descendiente viva fracase.
Apreté mis puños con fuerza y volví al cuartel rápidamente, me dirigí al vestuario casi corriendo pero me detuve al ver que habían dos mujeres en el, una era muy joven, tendría unos quince años, la queestaba a su lado de cabello morado por otro lado parecía de mi edad o mayor, me sonrieron y yo devolví el gesto, intercambiamos un par de palabras y parecían buenas, la más joven era un poco más dura, pero no por eso mala. Me puse mi uniforme y fui al gimnasio, no había nadie, así que entrené un poco, más que nada Taijutsu, mi debilidad, reflejos me sobraban pero en cuanto a ofensiva era fatal.
El día prosiguió con calma, y al terminar nos informaron a algunos que volviéramos pasado mañana ya que tendríamos una misión, asentimos y nos fuimos, al llegar a mi casillero, tomé mis cosas y antes de cerrar los ojos ya me encontraba en casa, mi Jutsu cada vez era más veloz.
Pero no lo suficientemente como para que me valoraran por él, eso lo tenía más que claro. Un carraspeo a mi espalda llama mi atención, abrazo al peliplata con fuerza y pego todo mi cuerpo al suyo, él al principio se sorprende un poco por mi muestra de afecto pero rápidamente me corresponde y deposita un beso en mi frente.-¿Conque fue difícil?
-Ya me acostumbraré.
Coloqué mis manos en su cuello y lo atraje hacia mí plantándole un beso en la comisura de sus labios.
-Es raro que estés tan cariñosa ¿Segura que te encuentras bien?-pregunta esta vez mirándome directamente los ojos.
-Sí, solo estuve pensando mucho hoy y no quiero hacerlo más.
El asiente y me besa, esta vez en los labios y con un poco más de pasión, siento mi cuerpo temblar y mi pecho llenarse de un calor que solo él puede provocar, la forma en la que me había encariñado con él aún me sorprendía, es lo único que tengo en mi vida, debo cuidar esta lazo, no importa lo que suceda. Poco a poco nos fuimos moviendo hasta terminar en mi cama, la ropa iba saliendo de nuestros cuerpo tras cada caricia y el calor subía a nuestro alrrededor notablemente, hasta que terminamos follando, esta vez fue un poco más rudo que la anterior pero si tengo que ser sincera me gustó más. Él salió dearriba mío y se tumbó a mi lado con la respiración agitada que poco a poco se iba normalizando.
-Eso no me lo esperaba- dijo mientras seguía acariciando mi espalda desnuda- ¿Te dieron la máscara?
-Sí, está en es mochila por si la quieres ver.
Él se levantó, abrió mi bolso sacando de allí una máscara con algunas líneas rojas y unos dibujos plateados en las orejas del animal.
-¿Loba?-preguntó divertido.
Yo asentí sonriendo y el la volvió a guardar para después acostarse en la cama nuevamente.
-Que duermas bien.
Ahí estaba de nuevo, en ese lugar del cual me escapé hace alrededor de un año, todo estaba como antes, las cadenas seguían en mis muñecas,y el guardia me miraba, de esa forma que la piel se me erizaba solo de pensarlo, el líder se acercó, agachándose a mi lado, tomo mi cara entre sus ásperas manos y me observó fijamente por algunos segundos, no sabría decir cómo era él, pero algo seguro es que era perturbador, su cara advertía contener en su interior a alguien casi desquiciado, y yo lo sabía por experiencia. Se acercó más a mi rostro y depositó un beso húmedo en la comisura de mis labios para luego comenzar a reír de forma cínica, su cara, me hacía recordar mucho de los horribles momentos que pasé en ese lugar. Él seguía a mi lado y comenzó a zarandearme con violencia, sin parar de reír, reírse de mí.
-Ayame.-dijo nervioso, pero algo me decía que no era él quien hablaba.
-¡Ayame!- gritó Kakashi al tiempo que yo abría los ojos.
Dirigí mi vista hacia él pero no podía verlo con claridad ya que las lágrimas que se derramaban sin cesar de mis ojos lo impedían, había sido un sueño, un simple recuerdo, pero por alguna razón no podía parar de llorar, y no solo eso, todo mi cuerpo estaba temblando, me costaba respirar, me sentía débil, desprotegida, sola. No emitía sonido alguno pero las lagrimas no paraban de rodar por mi cara y no podía parar.
Kakashi se sentó frente a mí y como yo no me podía mover el lo hizo por mí, me sentó a horcajadas de él pasando mis piernas por detrás de su espalda baja y abrazándome, yo correspondí ocultando mi rostro entre el hueco de su hombro derecho y su cuello.
-Estoy contigo, no sé que estabas soñando pero ya pasó, estás a salvo te lo aseguro- dijo acariciando mi cabello.
Yo solo asentí abrazándolo con más fuerza, no había espacio entre nosotros pero yo lo seguía sintiendo lejano, si me separaba de él en ese momento, estaba segura de que algo malo me iba a pasar, lo quería tanto que me resultaba insoportable ¿Qué haría yo sin él? Porque la verdad es que no tengo a nadie más, mi amigo más cercano miembro de los Akatsuki, toda mi familia muerta, Jun ya se había ido y lo único que me quedaba de verdad era Kakashi, y lo peor de todo era que yo nunca se lo decía, no le demostraba mucho lo que sentíapor él, de seguro no tiene ni idea de todo lo que lo quiero.
-Kakashi- dije separándome un poco para poder mirarlo a los ojos- ¿Tu sientesque no te quiero?-------------
Me sigue sorprendiendo la cifra de lecturas pero a su vez me alegra, espero que les siga gustando y comenten lo que les surga
-Dimoche.
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Un ser querido • Kakashi Hatake
FanficComencé a correr de forma desesperada intentando volver a mi aldea luego de 14 largos años, ya no importaban las heridas o el miedo, solo quería volver con mi familia, con el Hokage, con la aldea, había corrido por días hasta que al final la pude ve...