Capítulo 20: Significados

2.1K 174 61
                                    

¿Cuál será el significado de amor? ¿Morir por alguien? o tal vez ¿Matar por alguien?


    La bocina suena frenética afuera de mi casa, causando que (por la irritación que me produce el molesto sonido) mis piernas se muevan a toda marcha por todos los rincones de mi comedor buscando la llave de mi casa. Al encontrarla, salgo con la misma velocidad hacia afuera, cierro con seguro y entro al auto que me espera desde hace un par de minutos.

—Te demoraste linda. —Reclama Emilio, apretando el acelerador.

— ¡Ja! ¿Perdón? —Protesto colocando una expresión ofendida—Déjame decirte mijito, que ustedes han llegado 20 minutos más tarde de lo que me dijeron.

—Ohh mentira, es buena hora.

— ¿Buena hora a las 22:05? Supuestamente ustedes me venían a buscar a las 21:45.

— ¿Cómo van a ser las 22:05? —Dice mientras dirige su vista al reloj digital de la radio del auto—Mierda, ¿tan tarde es? —Suelta algunas risas al darse cuenta— ¡Viste! Por tu culpa mocosa.

    Ahora comienza a culpar a su hermana, que está sentada a su lado como copiloto mientras se encrespa las pestañas frente a un pequeño espejito con forma de corazón que sostiene en su mano.

— ¿Qué? ¿Por qué yo?

— ¿Y lo preguntas? Te demoraste como 30 minutos en el baño, para después demorarte 20 más en alistarte y otros 20 en maquillarte. —Niega con la cabeza al finalizar, devolviendo su mirada hacia al frente entretanto sigue manejando hacia nuestro destino.

—Soy mujer, así que necesito tiempo para pulir esta belleza que tienes como hermanita. —Hace movimientos de diva, causándome risa por las típicas peleas de estos dos hermanos.

    Mientras Emilio maneja y Marly termina algunos retoques de su maquillaje, en mi caso, observo por la ventana hacia las calles en tanto que escucho las canciones que Emilio coloca en los parlantes del auto. Me acomodo unas cuantas veces mi vestimenta, verificando en que esté todo bien puesto sin inconvenientes. Llevo en mi infaltable mochila una botella de mi colección de licores, un poco de Cannabis y mi cajetilla de cigarros, (para aportar en la fiesta).

    Dirijo la mirada hacia el otro lado de mi asiento, encontrándome con dos packs de cervezas y una bolsa negra a un lado de ellos. Claro, para estos dos hermanos es un delito no tomar cervezas ya que tienen aquella «pequeña adicción» a aquella sustancia; después de dos canciones de la banda favorita de Emilio, nos detuvimos afuera de una casa enorme con luces parpadeantes y la música a tope. Nos estacionamos con tranquilidad para bajarnos y adentrarnos a la casa.

    No estaba repleto de personas como imaginarían, era algo más relajado. Solamente se encontraba unas cuantas personas bailando en el centro del gran comedor, mientras que otros conversaban y reían a carcajadas en algunas esquinas, tomando diferentes tipos de alcohol que se encontraba a disposición de quien lo quisiera, muchos salían a la terraza con sus cogollos listos para fumarlos hasta que los ojos queden rojos, como también habían personas que fumaban unos cuantos cigarros frente al ventanal abierto mientras tomaban de sus vasos y charlaban.

    A la mayoría de los presentes los reconocía. ¡Claro que sí! Son de la misma universidad o algunos amigos de la escuela.; observamos a Melanie acercarse con una enorme sonrisa, un escotado vestido y un cigarro de la risa entre sus dedos junto a un vaso, que es de esperar que esté repleto de su licor favorito, Ron con Coca-Cola.

— ¡Hasta que llegaron! —Su voz es grave y casi habla a gritos, aun así, apenas la escuchamos por la música, los gritos y las risas de las personas a nuestro alrededor.

Andy, Andy... ¿Estás aquí? [Andy Biersack]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora