39

1.3K 95 214
                                    

Narra Dylan

-Te echo de menos, Tommy...- llevábamos unos minutos en silencio después de hablar horas por teléfono. Escucho un largo suspiro en la línea.

-Yo a ti también, Dyl. Mucho... No despertarme contigo es lo más duro. Ha pasado ya un mes sin vernos nada.

Y es la jodida verdad. Llevo un mes sin ver a Thomas. Hablando todos los días, sí, pero sin verlo y creo que me estoy muriendo por dentro. Pero me consuela un poco saber que él está como yo.

-Lo único que me consuela es que en una semana vienes a Londres a promocionar American Assassin- sigue hablando mientras pienso en todo este mes. Ha sido bastante duro la verdad, sobretodo porque un día fui a un partido de los Mets con Britt y mi padre. Discutimos a pesar de que admitió que no debería estar celoso.

-Y... a puesto lo que quieras que tu silencio significa que me has dejado de escuchar. ¿Desde el yo también te echo de menos quizás?

Sonrío inconscientemente. Me conoce más de lo que me conozco yo a mí mismo.

-¿Y qué echas de menos de mí?- sé que no puede verme la sonrisa pero aún así me pongo mi pequeña sonrisa con dobles intenciones.

-Ni se te ocurra, Dyl.

-Anda, Tommy, ¿que echas de menos de mí?

-A ti- murmura para después intentar cambiar de tema- ¿sacaste ya tu billete de avión?

-¿Entero? ¿De los pies a la cabeza?- sonrío aún más.

Me espatarro en el sofá para seguir hablando de cuánto me echa de menos.

-Dylan O'Brien Rhodes. He dicho que ni se te ocurra. Estoy en la cocina y en el salón están Bella y unos amigos.

-¿Bella? ¿Que haces con ella?- me incorporo de repente más celoso de lo que me gustaría. Frunzo el ceño- y sabes que en nuestros países el segundo apellido no cuenta. No sé por qué es la segunda vez que me lo dices.

-Decirlo entero acojona más y es más serio para momentos de confesiones. Oh, y para echar broncas también es muy bueno- suelta un risita- me encantas celoso, por cierto. Bella sigue siendo mi amiga y aunque después tu accidente no quise hablar con ella ahora no tengo problema. La conozco desde hace demasiados años.

-¿Dónde está Jack? ¿No vives con él? Él no dejaría que Bella entrase, le cae mal- y yo lo amo por ello, pero no se lo digo o empezaremos a discutir.

-Eh... Jack vuelve de noche- sé con seguridad que se está rascando la nuca.

-Ah claro, ¿y aprovechaste para meterla en casa?

-Dylan, no digas tonterías.

Ups... me ha llamado Dylan.

-Sabes que no me gusta que me llames Dylan desde que nos arreglamos.

-Sí, lo sé. Pero no tienes que estar celoso. Te recuerdo yo dejé a mi ex novia antes que tú a la tuya, incluso cuándo no sabía que tu me correspondías.

-Vale, vale. Tienes razón, Trombone. Lo siento. Es solo que ella allí y yo aquí...

-Amo que me llames Trombone.

Nos quedamos callados sonriendo hasta que vuelvo a hablar.

-De todas formas, llevas horas hablando conmigo. ¿Por qué no me puedes decir que echas de menos de mí? No nos llevará nada siquiera.

-¡DYL! No pienso tener sexo por teléfono contigo. Y menos cuándo están aquí Bella y mis amigos que me podrían oír.

-Venga, Trombone. Vete a la habitación o algo, por favoooor. Te echo tanto de menos...- lo último lo digo con voz más triste para intentar convencerlo.

¿POR QUÉ NO CREAMOS DYLMAS? (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora