CAPITULO XII "LA CITA CON EL PRESI"

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Me le adelanté un poco a mi viejo para ver a Becca, lo que sea que quiere hablar con ella, lo tengo que saber

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Me le adelanté un poco a mi viejo para ver a Becca, lo que sea que quiere hablar con ella, lo tengo que saber.

— ¿Estás preocupado por él o por mi? — la miré con la ceja elevada.

— A veces me pregunto ¿Por qué mierdas me gustas tanto si eres tan tonta cuando te lo propones? Creo que es obvio que estoy preocupado por él. — le dije.

— ¿Insinúas que traicionaría a tu padre?

— No lo sé, Becky, eres muy cabrona como para ser de fiar, pero ya que estamos en el tema ¿Lo harías?

— ¡Jamás! — me dice farfullando. — ¿Qué pasa contigo? — me golpea el hombro mientras yo echo el humo de mi cigarrillo, ladeo la cabeza.

— Tienes 15 años, me cuesta creer que tu papá sea tan cabrón como para dejar a su princesa cerrar tratos con reyes, verdaderos reyes.

— Lo que pasa es que tienes en muy alta estima tu linaje, Chavita, pero ya veremos.

— No quiero pedos, Becca, si tienes broncas mejor dile a mi papá que no pueden verse.

— ¿Dudas del viejo lobo de mar?

— Mi papá es muy buena gente y eso casi lo mata, así que me corresponde poner las cosas en su lugar, para beneficio de todos.

— El protocolo Punta Diamante de los asiáticos es claro, Chava.

— Aquí es México y se chingan Becca, si quieren hacer negocios será bajo nuestros términos.

— No sé porque estoy discutiendo esto contigo, al final tu papá tomará decisiones.

— ¿Me estás diciendo que lo que yo digo vale una paja? Cuidado Becky, me encanta esa boquita tuya pero te la puedo adornar si sigues de lengua larga. — rió para después abrazarme y plantarme un suculento beso, acaricié su trasero, metí mis manos por debajo de sus bragas, acaricié sus senos a medida que subía mis manos hasta su cuello.

— Vino mi madre, supongo que ella cerrará trato con tu papá, no solo soy yo, no seas paranoico. — me quitó la ropa mientras hablábamos, yo por mi parte solo le quité las bragas y le subí el vestido casi hasta la garganta, la senté en la barra de la cocina y tuvimos un rico folle antes de hacer negocios. — estoy en una bronca, mataste a Pallmer y eso va a ser un problema a la hora de dar cruza a la mercancía, eres tan temperamental.

— Confío en tus talentos para conseguir lo que te pido, mi amor, mi papá no puede tocar EE.UU, si lo hace, lo van a venadear todos y no puedo permitir eso, es mi viejo, mi madre moriría de tristeza sin él.

— Oh por Dios, tienes sentimientos.

— No seas boba, el deseo es un sentimiento, y es lo que siento cuando te veo. — agité las caderas, entrando a ella y saliendo con vigor y fiereza, gruñí mientras ella se retorcía.

𝗠𝗮𝗳𝗶𝗮 𝗟𝗼𝗴𝗶𝘀𝘁𝗶𝗰'𝘀: 𝗛𝗶𝗷𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗙𝗿𝗮𝘁𝗲𝗿𝗻𝗶𝗱𝗮𝗱.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora