Lisa está sentada al lado de Joel y no puede dejar de pensar en él y en lo que ha estado a punto de pasarle por culpa de José y así está pensando y cavilando cuando noto que Joel empezaba a moverse, enseguida salió para avisar al médico y al no verlo dejo recado y volvió a su lado. Joel al abrir los ojos lo primero que vio cuando consiguió enfocar fue unos ojos azules que lo miraban preocupados, intento hablar pero apenas le salía la voz.
-Hooo....laaa -le dijo poniéndose una mano en el cuello intentando forzar para que le salía la voz y poder hacerse oír.
-Chissss calla no intentas hablar no fuerces la voz -le dijo ella cogiéndole la mano. Vamos ha esperar que venga Pietro, Joel asiente y agarra con más fuerza la mano de ella como para asegurarse que ella está allí con el y no es una ilusión que se desvanecerá pronto.
-¿Cuaa ...anto lle...vo aquí? -le pregunta intentando articular las palabras.
- Chisss no hables -le dice poniéndole un dedo en los labios, llevamos unos días aquí esperando que despertaras, perdiste mucha sangre, la verdad que yo... yo me siento culpable de que te veas en esta situación, por.... por mi culpa has estado a... a punto de morir.
- No di...gaas eso, por fa... vor, no....no es cul....pa tu....ya – le dice él con mucha dificultad.
Lisa se sonroja al oír lo que él le dice y a la vez se siente avergonzada y agacha la cabeza para que el no la vea pero Joel no lo consiente y con la mano que no tiene conectada a ningún cable acaricia su mejilla y le levanta la cabeza para poder mirarla a los ojos pero el deseo de besarla es más fuerte y acerca sus labios a los de ella y la besa despacio sin presionarla, entonces es cuando se da cuenta que Lisa no lo rechaza y profundiza más el beso, cuándo se están casi quedando sin aire ya que él se siente demasiado fatigado tocan a la puerta y sin esperar respuesta se abre entrando Pietro.
-Hola buenas por lo que veo ya despertaste, ¿Cómo te sientes? –le dice medio sonriendo pero a la vez expectante de sus palabras.
-Can....sado a...penas pu....puedo ha....blar.
-Tranquilo no fuerces la voz, es normal que te cueste hablar llevas varios días inconsciente y la garganta la tienes bastante irritada debes hidratarla bien tomando bastante líquido, es muy probable que las primeras veces te moleste incluso al tragar pero debes hacerlo.
-gra...cias lo inten... tare –le dice Joel forzando la garganta para hacerse oír.
Pietro con la ayuda de la enfermera le retiró el suero, pero no le quito la vía de la mano por si debían ponerle alguna medicación no tener que volver a pincharle, le quitaron también la mascarilla y reviso la herida que parecía estar cicatrizando bien. Revisaron las constantes vitales, tomaron la temperatura y le dijo a la enfermera que ya podía marcharse que ya habían terminado, el se quedaba unos minutos más para hablar con la chica.
Joel cogió aire y en voz muy baja y pausada consiguió hablar de seguido.
-¿Cuando podré irme a casa Pietro?
-Si todo va bien y no hay ninguna complicación en un par de días podrías irte pero asegurándome que harás reposo absoluto en casa.
-Tranquilo Pietro yo me encargare de que no se mueva de la cama, sólo lo justo y necesario –le dijo Lisa participando por primera vez en la conversación.
Joel estaba empezando a quedarse dormido de nuevo mientras Pietro estaba hablando con Lisa este intentaba mantener los ojos abiertos y estar pendiente de la conversación pero le resultaba cada vez más difícil hacerlo, dándose por vencido decidió cerrar los ojos y descansar un poco ya que se sentía muy débil y agotado.
ESTÁS LEYENDO
EL SECRETO DE MI VIDA
Misteri / ThrillerLisa es una chica de 17 años que sufre abusos pero tras la muerte de toda su familia su vida pegará un giro radical, con la ayuda del médico y de una persona de la que pensaba no podía confiar y que resulta que se convertirá en su ángel de la guarda...