Cincuenta

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-No importa, sé que ha pasado mucho tiempo y es obvio de que yo a la única persona que he amado es a ti y yo no sé si a ti te p....

-Callate.

-Ya, me callo. Que mierda, pero si yo nunca me callo, ¿Sabes qué Eds? Mi único objetivo desde ahora en adelante será volver a hacer que te enamores de mi, ya verás que lo conseguiré. -Sonrió.

Eddie negó con la cabeza y ambos siguieron caminando hasta llegar a sus casas.

💞

Al día siguiente, Eddie se encontraba en la farmacia, necesitaba repuesto para su inhalador. Para su desgracia estaba Greta allí.

-Necesito un repuesto. -Exclamó Eddie cortante, con el semblante totalmente serio.

Greta no dijo nada, lo ignoró por completo. Eddie viró los ojos.

-¿Señor Keene? -Alzó la voz.

-¿Si? -Dijo y se acercó al mostrador.

-Necesito un repuesto.

-Está bien Eddie, ya vengo.

Eddie esperó, impaciente. En esos instantes deseaba que se le hubiese ocurrido llevar sus auriculares y así conseguir salir de la incomodidad que se generaba entre Greta y él.

-Ten Eddie.

-Gracias señor Keene.

-De nada.

El chico salió rápido de ahí y sin fijarse chocó con alguien.

-¡Auch! ¡Fíjate por donde vas imbécil! -Dijo una voz femenina que tardó en reconocer.

-Beverly, lo siento.

-Oh, Eddie, yo...lo siento, siento haberte llamado imbécil.

-No le des importancia.

-¿Aun sigues siendo cuidadoso cuando se trata de la salud ah?

-Algo así. -Ladeó la cabeza.

-Ya, nos vemos Eds. -Dijo y le dedicó una última sonrisa.

-Nos vemos.

Siguió a Beverly con la mirada mientras ella caminaba, la observó de arriba hacia abajo. La chica había crecido y cada vez se estaba poniendo más bonita, cada rasgo y como era de esperarse ya estaba bastante desarrollada. Hipnotizado y quizás embobado, agitó la cabeza y siguió caminando.

💞

Silbando la melodía de una canción que se le había pegado, estaba girando en la esquina para poder llegar a casa.

-¡Hey!

Una sonrisa de la nada se le escapó e intentó quitarla. Richie estaba montado en su bicicleta y se detuvo cerca de él.

-¿Qué hacías?

Eddie le enseñó lo que llevaba en la mano.

-Ah, cierto. -Rió- ¿Qué harás ahora?

-Nada interesante.

-¿Te parece si me acompañas mientras doy un paseo en la bici? No es necesario que vayas en ella, puedes caminar a mi lado.

-Me parece. -Asintió Eddie.

-Bien.

-Pero antes tengo que ir a dejar esto en casa.

-Ve, te espero.

💞

-Richie, me estás mareando, deja de hacer eso.

-Yo debería de estar mareado, no tú.

-Pero me estás mareando con tantas vueltas que das alrededor de mi.

-Estoy dando vueltas alrededor de ti ¿Cierto?

-Si.

-Estoy suponiendo que en tu cabeza doy muchas vueltas, tantas que llega a ser molesto y entonces te das cuenta de que no dejas de pensar en mi.

Eddie rió y Richie junto a él.

-¿Sabes quien no para de dar vueltas en mi cabeza?

-No te esfuerces demasiado galán, no es necesario.

-¿No es necesario?

-Oye, ¿Cuando me enseñarás esa música que te gusta a ti? -Dijo Eddie cambiando de tema.

-Cuando quieras cariño.

-Dime tú, cuando puedes.

-Siempre estaré disponible para dedicar mi tiempo en estar contigo, así que, solo dime que día y hora.

-En serio Richie, no te esfuerces demasiado.

-Después de este paseo, en mi casa. 

Tengan chicxs, disfrútenlo ahre 💛

Do i wanna know {Reddie}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora