Alexander
Una pesadilla mas, no se que hacer, ella no duerme y yo tampoco, es muy difícil saber que todo es mi culpa y que ella no me va a perdonar, mas lo menos que puedo hacer es ayudarla a recuperar su vida.
Nos besamos, fue uno de esos besos en los que dejas saber tantas cosas, sus labios sabor a miel, tan tierna, pero el hechizo se rompe y se va.
Se que he obrado mal todo este tiempo, se que lastime mucho a Kara y ahora al saber que sigue teniendo pesadillas, al pedirme ayuda sólo puedo dar mi vida y todos mis esfuerzos para que pueda recuperar su vida, pero antes debo tratar de hablar con mi hermana, Meredith era todo para mi, compartíamos hasta los pensamientos, las mismas metas y puedo soportar todo, menos su decepción.
Me dirigí a su consultorio y pude ver que se encontraba sola.
Papá, iluminame estoy a punto de entrar a la jaula del tigre.
- Hola.- Dije entrando en la habitación
- Lea está embarazada?.- Preguntó sin levantar su mirada de su computadora... "¿Pero que mierda?"
- Porque me preguntas eso?.- Contesté con toda la sorpresa que ese momento reinaba en mi cuerpo
- No veo otra razon por la cual estes en el consultorio de una cirujana fetal, a menos que estés esperando.- Me dijo esta vez tomando un lapiz de la mesa.
- Espera, estoy ahora hablando con mi hermana, ¿Porque mierdas preguntas eso?.- Dije tratando de sonar calmado
- Todos sabemos que te revuelcas con Lea asi que seria de lo mas normal que ella se embarazace.- Dijo Mer con un matiz de ironía en su voz.- Eres un gran partido para ella, tener un hijo Montgomery para cualquiera que no tenga el imperio de Kara Ford también lo es, ademas un embarazo es lo mas frecuente cuando te acuestas con alguien.
- Yo no me acuesto con Lea.- Dije sonando derrotado o molesto.
- A ver Alex, lo que hagas o dejes de hacer con tu vida en este momento no me interesa, siempre y cuando no lastimes a mi amiga.- Dijo aun sin levantar la mirada hasta mi.
- Hablas como si fueramos unos desconocidos, somos hermanos ¿Recuerdas eso?.- Dije llevandome las manos a los bolsillos de mi pantalón.
- Somos hermanos... Si, creo que alguna vez fuimos hermanos.- Dijo y sus palabras fueron como puñal a mi alma, por el amor de Dios ¿Dónde está mi hermana?
- Me puedes explicar que hice para que estés asi conmigo? No es por Kara es algo mas, ¿Que hice para que me desprecies de esa forma? ¿Que hice para que reniegues asi de mi?.- Dije cerrando de golpe el computador.
- Olvidaste que a mi tambien me paso algo parecido, olvidaste que fuiste tu quien estuvo ahi apoyandome, olvidaste tu promesa de ser diferente... Eso hiciste, no es por Kara aunque este enojada contigo por ello, mas sin embargo no puedo olvidar que tu también eres igual.- Contesto Meredith y la rabia o tal vez el dolor se adueñaban de su voz....mierda
- Mer escuchame si?.- Dije sentandome frente a ella, se veia... decepcionada
- Te estoy escuchando no?.- Dijo con un tono de incredulidad que ella nunca usaba conmigo.
- ¡Maldita sea Meredith!.- Dije golpeando la mesa en un acto de desesperación.- Yo no me acuesto con Lea joder!
- Ya te aburriste de ella?.- Me preguntó con un tono de voz crudo, hiriente
- Meredith por Dios, soy tu hermano me conoces, no soy así.- Dije llevandome las manos a la cabeza.- Sabes perfectamente que no hice nada de eso, se que soy un imbécil, si lo se, pero nunca fue mi intención lastimar a Kara y mucho menos a ti, ni siquiera recuerdo lo que pasó
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La anatomia de un amor; Secretos
Romance2do libro de la saga anatomicamente unidos. " Las cartas para las despedidas" Luego de la jugada del universo en la vida de Alex y Kara con la repentina aparición de Lea Stevens, Alex se ve obligado a tomar una decisión que marcará la vida de todos...