Alexander
¿Qué demonios fue eso?
Esa es la misma pregunta que todos nos hacemos al ser víctimas del arrebato de nervios de Kara.
Se fue, nos gritó, nunca había escuchado a Kara gritarle a alguien, nunca había perdido los estribos de esa manera confirmando mis sospechas.
- Ella no está bien.- digo mis pensamientos en voz alta y me dispongo a ponerme de pie cuando la reprobatoria voz de Emma frena sin ningún remordimiento mis planes de correr a buscar a Kara a donde quiera que estuviera.
- Eres la última persona que ella quiere ver ahora.- Me soltó sin más Emma, sin moverse de su sitio pero al ver su rostro una mezcla de enojo y lástima arropaban si expresión.- La ayudaremos más dejándola sola y arreglando todo esto.
Dudé, se que para Emma no soy santo de devoción desde que se les arruine la vida sin ningun tipo de intención a ambas, pero siempre ha sido sincera conmigo y debo aceptar que esa chica de rostro dulce y ojos tristes, es hasta ahora la única persona que sabe todo lo que Kara paso, quiere y piensa.... Porque ella también pasó lo mismo por mi culpa.
Escuchala menso me grita la poca coherencia que aún habita en mi, más yo por lo contrario sigo teniendo el impulso de salir a corriendo de esa sala y encontrarla, ayudarla.
O Ayudarte? Me interrogó mi conciencia enojada, dejala ser Alex.
- Alex, ella tiene razón.- escuché a Jack a mi espalda y mi conciencia también me lo seguía diciendo a gritos.- Mejor ordenamos todo para el caso.
El caso en el que ella nos había metido sólo para escapar de la realidad. Pensé para mi apretando con fuerza mis manos.
Recuerdo su sonrisa, la que llevaba consigo a donde quiera que iba sin importar que el mundo se estuviera destruyendo a sus espaldas... Como extraño su sonrisa.
- Ella quiere estar sola Alex.- Me dijo Amy por primera vez con pena hacia mi, sin ningún atisbo de enojo, sólo... comprensión.
Permanecí de pie unos segundos, mi mente estaba con ella, esa necesidad inmensa de correr junto a ella y estrecharla contra mi pecho, protegerla de ella misma, protegerla como debí hacerlo antes, amarla como antes no lo hice...
Kara, ¿Qué pasa contigo pequeña?
- Dr. Montgomery, nos explica que haremos?.- Me interrumpió Davis en un claro intento de ocupar mi cabeza, esta es la única forma en la que puedo ayudarla... ejerciendo medicina.
Solté todo el aire que sin ser consciente llevaba rato conteniendo en un pesado suspiro, un suspiro cargado de miles de emociones, arrepentimiento y una inmensa sensación de culpabilidad.
Mire a las personas que estaban a mi alrededor, buscando en ellos algún asentimiento para correr y buscarla, pero en ello sólo había expresiones tristes, preocupadas, caras llenas de angustia pero ansiedad a la vez.
- Dr. Montgomery esperamos por usted.- Reclamo Tyler mi atención, en sus ojos habían comprensión quería darme ánimos con su mirada pero yo sólo necesitaba ir con ella... Mi pequeña
Resignado caminé hasta la parte frontal de la mesa, encendí el proyector y modere la iluminación.
- Tomen las carpetas azules que estan sobre la mesa.--- Ordene tratando de apartar a Kara de mis pensamientos y centrándome en algo que ella va a necesitar... salvar una vida aunque no sea la suya.--- Este es el expediente de Lucille Steward una mujer embarazada de 27 años, atropellada, llega la noche de ayer a la sala de Urgencias del Hospital General de Massachusetts, inconsciente, Glasgow 10, laceracion profunda en el cráneo, neumotorax, posibles hemorragias internas y fracturas.
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La anatomia de un amor; Secretos
Romance2do libro de la saga anatomicamente unidos. " Las cartas para las despedidas" Luego de la jugada del universo en la vida de Alex y Kara con la repentina aparición de Lea Stevens, Alex se ve obligado a tomar una decisión que marcará la vida de todos...