Alexander
El aire se hace pesado, la vida misma pesa... Un hijo de Kara y yo.
- ¿Que dijiste Emma?.- Pregunto en trance detenido en la puerta del baño del avión, la mano de Amy en mi brazo y una de Jack en mi hombro me mantienen en pie, Kara esconde su mirada de mi y Emma es sostenida por Sean, todo esta oscuro y necesito saber que esta pasando.- ¡Ya basta de mentiras! ¿Que acabas de decir?
- No te atrevas a repetir media palabra Emma.- Le dice Kara a punto de arremeter contra ella, Sean se coloca en medio de ambas y las lagrimas se hacen presentes.- Emma no
- Kara ya no tiene caso.- Dice Emma escondiendo su cabeza en sus manos.- Ella estaba
- Emma no.- Le suplica Kara entre lágrimas, Amy corre hasta ella y la sostiene entre sus brazos.- Por favor
- Kara estaba embarazada.- Dice Emma y se desvanece, Sean y Tyler la sacan de la pequeña cabina, estoy viviendo los segundos en cámara lenta.
Kara estaba embarazada...
Kara estaba embarazada...
Kara estaba embarazada...Las palabras se repiten en mi cabeza y siento las fuerzas desaparecer de mi cuerpo.
- Dejennos solos.- Digo en medio de mi trance, escucho la puerta cerrarse a mi espalda y pego una patada en el metal.- ¿Porqué no me lo dijiste?
Ella permanece callada, sus lagrimas no cesan y son como un puñal para mi alma... un hijo.
- ¡Kara respondeme!.- Le grito con frustración, llevo mis manos a mi cabello y los halo.- ¡Maldita sea Kara ya basta!.
Su silencio es como puñal, necesito que hable, necesito que me mire.
- ¡Kara basta!.- vuelvo a gritarle, la desesperación me está matando y necesito saber que pasó con mi hijo.- Te lo ruego
Las lágrimas corren por mis mejillas, el pecho duele y el aire está pesado... Kara háblame.
- Ya no tiene caso hablar de esto.- Dice con la voz rota.
- Si lo tiene.- Digo acercandome a ella, da un paso atrás y no me mira.- ¿Que pasó?
- Lo perdí.- Dice en medio de un sollozo.- Listo ya lo sabes, ahora dejame en paz.
- Kara por favor.- Suplico frente a ella, las lagrimas corren por mis mejillas, mi pecho duele, sus ojos avellana se encuentran con los mios, sus lagrimas me duelen.- te lo suplico.
Ella se aparta de mi, me da la espalda, seca sus lágrimas y suelta un pesado suspiro.
- A eso fui a tu casa el dia que te encontre con Lea.- Dice y es justo en ese momento cuando maldigo infinitamente toda mi existencia.- Decidí irme de viaje sin saber a donde iba, me cuidé muchísimo hasta la noche en la que me secuestraron.
- Kara yo...- Empiezo a decir pero me detengo, nada me justifica.- Lo siento yo...
- Te perdone todo.- Me interrumpe girandose hasta mi, sus ojos están apagados, perlados por las lágrimas, su rostro esta pálido y sus palabras duelen.- Perdoné todo lo que me hiciste pero no me perdono a mi misma haber matado a mi hijo, te amo mas que a mi, en mi gran afan de amarte me olvide de que yo también existía, me olvide de mi, ahora solo déjame en paz.
- Kara no.- Digo tomandola por el brazo, ella no hace nada solo agacha su cabeza.- Por todo el amor que hay entre nosotros.
- Alex, no eres tu.- Dice con su voz rota.
- Somos nosotros.- Digo derrotado.- Siempre fuimos nosotros, no quiero perderte, me rehuso a tener una vida sin ti, un futuro en el que no estes tu sonriendo, este deberia ser el mejor dia de nuestras vidas, pero nada importa si tu no estás.
- Te diste cuenta tarde.- Dice mirandome a los ojos, sus ojos empañados por las lágrimas que se obliga a no derramar.- Debiste darte cuenta de eso hace meses, no ahora cuando ya no queda nada.
- Quedamos nosotros.- Digo tomando su rostro en mis manos.
- Quedas tu Alex.- Dice obligándose a no alzar la voz.- Solo quedas tu porque yo ya no existo, no siento, solo respiro, quedas tu y los recuerdos.
- Kara yo te amo por favor.- Digo suplicante, siento mis mejillas humedecerse y como mi corazón colapsa.- Se que tu me amas.
- En mi afan de amarte, me perdí a mi misma.- Dice dejando las lágrimas correr por sus mejillas desgarrando mi alma, odio verla llorar.- En mi afan de amarte desgarre mi alma, me deje caer en un abismo y cuando por fin crecia dentro de mi algo que me daba fuerzas para todo, tu engaño lo arruinó, no es tu culpa que mi hijo...
- Nuestro hijo.- interrumpo al escucharla nombrarlo y hacerlo solo suyo.- Nuestro, de tu y yo, se que todo esto es mi culpa, Kara yo soy un ser humano y estoy jodidamente enamorado de ti, no me hagas esto.
- ¡¿Cuantas veces me lastimadte tu Alex?!.- Me grita mientras gruesas gotas de lágrimas salen por sus ojos como rio desbordado en una tormenta.- ¿Cuantas veces perdoné todos y cada uno de tus desplantes? ahora soy mala porque simplemente entiendo que existo? Si ahora soy asi lo aprendí de ti Alex, tu me lastimaste desde que eramos niños y yo siempre como una tonta dándolo todo por ti mientras tu nunca sacrificaste ni un suspiro a mi favor, eso se terminó Alex, ya no mas, no.
La tomo entre mis brazos y me aferro a ella, sus pequeños sollozos resultan como puñales a mi corazón, todo se hace mas confuso y mas doloroso, busco sus labios dulces, calidos y tiernos, pero ella no me deja, la lastime toda mi vida y nunca me di cuenta.
- Ya no es amor Alex.- Dice y me desarma, su voz suena rota y cruel.- Ya no es amor.
- ¿Co...como?.- digo en medio de tanta confusión.- ¿Estas diciendo que no me amas?
- Ya no te amo.- Dice quitando una lágrima que se ha colado por sus mejillas.- Ya no es amor porque todo lo que puedo tener hasta ti es rencor, repugnancia.
Me odia, me quedo pasmado ante sus palabras, es comprensible porque le hice mucho daño, nos hice mucho daño, las lágrimas de frustración ahora se sienten picosas en mis ojos, y sus palabras siguientes hacen que en mi vida todo pierda sentido.
- Hiciste feliz a Lea, ella te ama y tu te enamoraste de ella.- Dice en medio de un doloroso susurro.- Solo hazla feliz, como no lo hiciste conmigo.
La puerta se cierra de un portazo desgarrador, la engañé, se fue de viaje, la secuestraron, la violaron, la golpearon y encima perdio a nuestro hijo... Matate Alex.
Me dejo caer en el suelo, las lágrimas no dejan de salir, un hijo con ella, ¿Que hice?.
No estoy orgulloso de mi, no estoy orgulloso de nada de lo que he hecho hasta ahora.
Me dijo que volviera a Lea?, no puedo hacer feliz a nadie mas si no es ella... Pero ya no me ama.
La vida me pesa, al fin soy traumatologo pero todo sin ella pierde sentido, la perdí completamente y mi sueño de tener mi familia con ella estuvo tan cerca de mi y en mi inconsciente egoísmo lo eché a perder.
¿Que nos hice? ¿Que te hice pequeña? Tu no merecias nada de lo que te pasó y yo no tenía el derecho de herirte como lo hice.
Alguien toca a la puerta del baño y siento como vuelvo a mi dolorosa realidad, me pongo de pie y camino al lavabo, me rocío la cara con agua fría, respiro profundo y salgo.
- Vamos a aterrizar deber tomar asiento.- Me dice la azafata, asiento en silencio y camino hasta uno de los asientos lejanos a mis amigos, miro hasta donde debe estar sentada Kara, nuestros ojos se encuentran y una punzada de dolor arropa mi pecho.
Si esto es vida, prefiero la muerte.
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La anatomia de un amor; Secretos
Romance2do libro de la saga anatomicamente unidos. " Las cartas para las despedidas" Luego de la jugada del universo en la vida de Alex y Kara con la repentina aparición de Lea Stevens, Alex se ve obligado a tomar una decisión que marcará la vida de todos...