Capítulo 5

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Para cuando terminamos de comer nuestros helados, aun estábamos enfrascados en una conversación, acerca de ir juntos a un parque de diversiones que quedaba como a treinta minutos de distancia.

Alejandra salió del mostrador y le pidió prestado el móvil a Marco, el se lo dio y Ale se puso de espadas a nosotros al parecer tomaría una fotografía.

-Sonrían - dijo con el móvil en lo alto, enfocándonos.
Todos pusimos nuestras mejores sonrisas mientras nos juntábamos tratando de salir bien. Yo puse una mano en la mesa, y Marco también, nuestros dedos se rozaron y otra vez sentí esa sensación cálida  por mi cuerpo, él se dio cuenta, miró su mano, elevo su mirada a mis ojos y me sonrió en el momento que su hermana tomaba la primer fotografía, obviamente ni él ni yo salimos viendo hacia la cámara ( pero ¿qué mujer podría ver otra cosa que no fuera el rostro del chico de sus sueños?) . Pero Alejandra siguió tomando otras y en esas si vimos hacia la cámara.

Cuando nos despedíamos de Alejandra, Marco dijo que regresaría a su casa con nosotros, ya que vivía a tan solo unas casas alejado de la casa de la abuela de Deysi.

No puedo creer que en todo este tiempo que he visitado a doña Siomara, mi hombre nórdico se encontraba a unos cuantos pasos de distancia.

- No sé ustedes pero yo, quiero tener las fotografías que Ale nos tomó.- dije. Aunque la verdad era para iniciar una conversación con Marco y lograr así conseguir su numero de teléfono o al menos correo electrónico.

- Yo también- dijo Deysi.

- Yo se las paso, aunque no tengo el contacto de Elizabeth- dijo

- Pero te lo puede dar- dijo la bocaza de mi prima. Aunque a veces si agradecía que abriera la boca.

- Claro - dijo él - Elizabeth ¿Me podrías dar tu correo electrónico o tu número de móvil para enviarte las fotos por WhatsApp?-

, había logrado que me pidiera mi número de teléfono.

- Por supuesto- dije restándole importancia, aunque estaba que daba saltos en plena calle

-¿Tú también las quieres Deysi?- le dijo a mi prima.

- Claro, pero solo enviaselas a Eli, te aseguro que ella me las pasara a mí- dijo ella, y tenía razón, claro que se las enviaría.

- Esta bien, también te las enviare Áron. Elizabeth ¿cuál es tu número telefónico?- al parecer ya tenía el número de mi prima.

Se lo di, y prometió enviarme las fotografías cuando llegara a su casa ya que ahí tenía internet.

Cuando entramos a casa de doña Siomara, les dijimos a nuestras madres que habíamos quedado con unos amigos, en ir a un parque de diversiones.

Pero lamentablemente no habíamos quedado en un día en concreto. Aunque Deysi sugirió que lo hiciéramos hoy por la noche, no sonaba mal, pero... Eso significaba regresar demasiado noche a Adanta, doña Siomara dijo que podríamos quedarnos a dormir ahí. Nuestras madres accedieron debido a que Áron iría también, y él es el más sensato de nosotros tres, Áron es algo así como la mente sabia en Deysi y yo. Y era por eso que nuestras madres confiaban en él.

Amor Secreto ( En Edición.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora