Me acomodé en mi cama, asegurándome de quedar bajo mis sábanas y estar lo más cómoda posible, para hablar con mi casi rubio.
Deslice el mi dedo por la pantalla del móvil para responder la llamada del chico que me hizo mierda el corazón, pero que eventualmente me había sentir muchas sensaciones con tan solo una mirada.
- Hola Marco- respondí en tono seductor.
- Vaya... Creí que no ibas a responder como todas las veces en las cuales he llamado- respondió en tono sorprendido.
- Bueno, digamos que no esperaba tu llamada tan pronto, ¿Aún éstas enojado?- hablé como una niña inocente.
- Llamaría aun más veces si respondieras mis llamadas- su tono de voz había cambiado a uno más calmado- Y no, no estoy enojado.
- Si contestara cada una de tus llamadas, ¿Qué me dirías?- aun seguía hablando con voz seductora.
- Por lo que veo tienes ganas de hablar.-
- De hablar y de muchas otras cosas más-
- ¿Cómo qué otras cosas Elizabeth?- su voz de pronto estaba ronca.
- Como esas cosas en las que eres bueno Marco- le dije, mi juego es saber hasta que punto puedo hacer a Marco hablar, quiero saber exactamente que siente por mí. Si es obsesión o atracción.
- Dime una en específico lindura-
- Como tus besos.-
- Yo sé que te gustan mis besos, pero aun así, no olvido qué no quisiste besarme en casa de Charlotte.- su tono había subido un poco al enojo.
- Lo siento, dime ¿Por qué entraste al baño?- cuestioné, porque realmente tengo mis dudas.
- Creí que lo tenías claro lindura- respondió y ahora su voz era seductora.
Y ¡Joder! Esa voz va hacer que moje mis bragas.
- Pues no lo tengo. ¿Podrías decírmelo tú?- inconscientemente la mano con la que no sostenía el móvil fue bajo la oscuridad de la sabana llegando a mí abdomen.
- Fui tras tuyo por que ansiaba besarte, tocarte, sentirte mía, como cuando probé tus labios por primera vez- me gusta lo que estoy escuchando sin duda alguna.
-Continua, me gusta escuchar tu voz-
- Elizabeth ¿sabes qué deseo en este momento?- cuestionó de repente.
- Si no me lo dices no podría saberlo.-
- Lo único que quiero es estar contigo en este preciso instante, besarte y que correspondas a mis besos, a mis caricias, a mi cuerpo.- sus palabras estaban teniendo un efecto en mi entrepierna.
Un pequeño gemido intencional salió de mis labios, para qué el pensara que estoy haciendo algo candente.
Pero nooooo, estoy desilusionada con mi casi rubio y tocarme por él, sería darle el gusto que no pienso darle.
- ¿Qué éstas haciendo Elizabeth?- creo que ya sospecha mi supuesto gemido.
- No estoy haciendo nada, solo estoy en mi habitación, en mi cama, bajo las sabanas y completamente sola.-
- ¿Te éstas tocando?- preguntó con la voz aun más ronca.
- Tal vez...- le dije, sin afirmar pero también son negar.
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Amor Secreto ( En Edición.)
RomanceTodos nos hemos "enamorado " de alguien que no nos corresponde o ni siquiera llegó a saber de nuestro encanto por él o ella. Pero en éste caso él solo buscaba una cosa y no era amor, el amor estaba destinado para alguien más. Eso es lo que le pasó...