2. Papeleos.

9.5K 584 164
                                    

Odiaba darle las malas noticias a Yoongi. Tenía un temperamento terrible.
Suni, una de las chicas mejor pagas y más solicitadas de acá, renunció.
Había tratado de que se quedase, la lleve a la oficina para aclarar las cosas y prometerle que nunca más le pondrían un dedo encima, si era para golpearla. Fue en vano.
La chica se fue.
El problema no era que ella se fue, sino que las mayores ganancias de acá eran gracias a ella, a su agresividad, cuerpo y experiencia sexual. Ahora no tenemos eso, eso que a todos les gusta.
Toqué la puerta.
No una, ni dos. Siete veces. Sé que Yoongi está con una de las chicas, pero esto es importante y nuestro lema es primero la amistad, inclusive si estamos en un revolcón.
Vi el cuerpo de Hani caminando donde estaban todas las demás chicas, no sin antes ver su trasero desnudo caminar por el pasillo. Wow.

Yoongi, tenemos que hablar- sentencié.
¿Que pasó ahora Nam?- Dijo subiéndose el zipper de su pantalón.
Suni...
¿Que pasó con ella? ...¿la embarazaste?- asomó su sonrisa.
No, Suni renunció.

El rostro de Yoongi se transformó en todos los colores existentes, golpeó la mesa y maldijo a todo quien atravesó su mente.

¿Hablaste con Hoseok?- Dijo afirmándose el puente de la nariz.
Sí, firmó el acuerdo de confidencialidad y si habla, estará en grandes problemas con la ley... debemos buscar a otra chica- Dije buscando alguna solución.
¿Con quién se ha ido Park?- Dijo enfurecido. -Park paga millones por Suni...
Se fue con la Tailandesa- Dije tratando de recordar el rostro de la chica, pero por más que intentara recordarla, no podía.
¿Quién?- Dijo Borde.
No se, la Tailandesa, es lo único que me ha dicho Jinha- Dije levantándome del asiento para poder seguir con mi trabajo.
Solo esperemos que haga un buen trabajo- Dijo mi amigo cerrando la puerta detrás de mi.

Mientras revisaba los papeles de ingresos del mes de diciembre del año pasado, la puerta sonó tres veces. Con un fuerte adelante de abril la puerta, dejando ver a esa joven delgada, desaliñada, de rostro perfecto y ojos tristes.

¿Sí?- Dije sacándome los lentes, dejando los papeleos en su carpeta de nuevo.
Vengo de parte de Ming- tímidamente habló.
Siéntate- hice ademán que entrara y se sentase frente mío, Ming es una de las señoras que me cuido en mi infancia. Aún cuida de mi, sin que yo me entere.
¿Experiencia trabajando en Bares? -Dije mientras buscaba en el computador la hoja de empleados para ingresar a la chica.
No, pero he trabajo en restaurantes, fui cajera de un centro comercial y se cuidar niños- Dijo atropellando cada palabra que decía.
¿Puedes en una semana? -pregunte.
No, necesito partir hoy. No tengo donde... quedarme- Dijo apagando su voz a medida que hablaba. Al parecer habló de más.
Esta bien- Suspiré.

Esos ojos tristes me recordaron a mi madre, no pude decirle que no. A ella no.

¿Nombre?
Jisoo, Kim Jisoo- Dijo arreglándose ese juego de brazaletes.
¿Edad? ¿Cumpleaños?
23, 3 de enero m de 1995- Tuve que chequear el calendario de mi computador para saber que estaba en lo correcto.
Hoy es tu cumpleaños- sentencié, mirándola de nuevo.
Si
Hoy es tu cumpleaños y estás buscando trabajo en ves de celebrarlo- Dije.
Si- sólo asintió con timidez.
Vaya...

Después de ingresar toda su información personal, entregarle el uniforme de trabajo e indicarle el baño de la oficina para que se vistiera la volví a sentar en el asiento frente al mío.

Jisoo, acá solo hay tres reglas- Dije levantándome y caminado para llegar frente a ella e intimidarla con mi altura, aprovechando que ella estaba sentada.
¿Cu Cuáles?- tartamudeó y tragó saliva.
La primera es que te dirijas a mi ante cualquier problema con algún cliente o personal, la segunda es el horario, no aceptamos la impuntualidad y la tercera y más importante nunca... Jisoo, nunca debes entrar a la puerta roja-  Jisoo quería preguntar porqué, se me notaba, aún así no lo hizo. Signo de sumisión algo que odiaba de mis empleados pero en ella me causaba intriga.
Esta bien- se limito a decir.
Ah, y otras dos que son más bien la reglas de oro, a los chicos Yoongi, Hoseok, Namjoon, Junín, TaeHyung y Jungkook debes tratarlos con cordialidad, son amigos... si te preguntas quienes son- apunté a la gran foto que adornaba mi pared.
Ok...- volvió a decir analizando cada rostro de la fotografía.
Y última, debes tratarme de Oppa  o de Oppa Jin- sonreí a medio lado.- solo a mi, siempre.

Ella me acompañaba detrás de mi, nerviosa, este sería su primer día de trabajo, pues en el Bar solo trabajan hombres, ella sería la primera mujer que trabajaba para mi en el Bar. La mayoría venia por Yoongi, no por mi. Es por eso que deseo que me llame Oppa.
Debía encargar un traje de empleada que le haga justicia a su cuerpo y belleza.
El pantalón liso negro y la camisa a tono, no la benefician.

Servirás solo los tragos de esta mesa Jisoo- Dije gritando, pues el Bar están repleto como era de costumbre. Gente bailando, bebiendo o besándose.
¿Porqué?- preguntó acercándose a mi para escuchar mejor .
Esta es mi mesa y la de mis amigos, siempre estamos acá, de hecho llegarán en un momento más- me senté y Jisoo me observaba. - Debes estar atenta a nuestras acciones, siempre que pedimos no levantamos la mano o algo por el estilo, somos los dueños
Esta bien Oppa- Qué bien se sentía escuchar eso, pero se sentía mejor verla con sus mejillas coloradas.
Ahora, tráeme un whisky Honey de la reserva

Enfurecido.
Esa era la palabra que definía mi situación actual.
Observaba a Jimin quien trataba de descifrar mi estado anímico.

Es una idea idiota- Le dije.- Quieren que renuncié a mi libertad, mi vida.
Quieren que renuncies al sexo alocado Jungkook, a parte es el último deseo de su abuelo... A parte casarse no significa fidelidad- finalizó Jimin.
Es cierto... pero es la anónima hija de Park- Dije enfurecido.- Nadie conoce a la hija de Park, a parte el es un monstruo, gordo, sin cabello y abusador de poder, sé que es una alianza de influencias, pero tengo ciertos estándares- Jimin rio.
Solo diré existes las amantes y las chicas de Yoongi- subió sus hombros- llegamos casanovas.
No molestes- Dije borde.

La mansión nos esperaba con al menos cincuenta guardias, y yo llevaba mi escolta.
Los guardias me dijeron que la joven estaba en su cuarto el segundo a la derecha subiendo por la escaleras, el señor Park no estaba.
Ordené a mi escolta a esperar afuera y demandé que los guardias del señor Park se quedarán fuera, si me iban a casar sin mi autorización sería bajo mis órdenes.
Solo quería entrar con Jimin.

Toqué la puerta esperando una respuesta, dentro se escuchan cuchicheos, había más de una chica ahí dentro. Después de veinte minutos de espera al fin me abrieron.
Una chica alta y delgada de cabellos largos, vestía ropa de marca y olía perfecto me abrió la puerta, era hermosa. Sé que Jimin opinaba lo mismo que yo, pues me codeo para dar su aprobación. La hija del señor Park era perfecta.

Hola...- Dijo ella tímida, llevando un mechón de cabello detrás de oreja.
Hola, soy Jungkook y el es Jimin- señalé a mi amigo.

——————-

Sé que deben hacer gangs ortográficas pero cuando termine la historia las revisaré así que si ven una coméntenmela :)❤️

El pacto || blackpink x BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora