13. Eres libre

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No podía creer que estaba borracha con Taehyung hablando de la vida. De todo los que nos ha tocado vivir. Casi le cuento que pagué un dineral por fingir mi muerte en Tailandia. El me contó sobre su matrimonio fallido.
Nos habíamos hecho cercanos en a penas unas cuantas horas.
Pero podía notar que el sueño lo consumía, a mi también. Fue un día agitado.
Por mucho que ahora estuviera con Taehyung, no paraba de pensar en Jungkook y en mi que me dijo. Me dolió. Me dolió que después de todo el solo pensara que soy... fui una prostituta.

¿Tienes sueño?- Dijo Tae mientras bostezaba y se acomodaba en el sofá.
Aha...- asentí.
Ven...- nos levantamos del sofá y nos dirigimos a una habitación. Era grande, ordenada y azul.- Duerme acá... dormiré en el sofá- Dijo el sacando del armario una playera y arrojándola a mi rostro, el saco un pijama, que supuse ser para el.
Gracias Tae- Reí.- Enserio gracias
No hay por qué Lisa- me sonrió sincero.- Después de esto... creo, podremos tener una cena normal... para conocernos- divagó por un momento.
Es un trato- le dije.

Taehyung se fue de la habitación. La observé por un momento, estaba lleno de fotografías de dos pequeños, tenían sus mismo rostro, supuse que eran sus hermanos menores, y en la mesa de noche solo había una foto en blanco y negro con una anciana adorable y una muchacha, hermosa, muy hermosa. Ella era su prometida, lo supe en el instante que vi la foto.
Me despojé de mi vestido y lo metí al bolso, donde había otra muda de ropa interior. Toqué mis heridas y gemí ante el dolor. Me puse la playera de Taehyung, por un segundo o quizá más sentí su aroma peculiar. Olía estupendo.
Me abrigue bajo las mantas de la cama y al recordar todo lo que sucedió hoy no pude evitar derramar un par de lágrimas.

El olor a panqueques me despertó, vi el reloj de al lado 8:30 de la mañana, vaya que madrugaba Taehyung.
Caminé hasta la cocina y ahí estaba el, con su uniforme de policía. Se veía... excepcional. El y el desayuno.

Buenos días... no quería despertarte, te veías muy cómoda durmiendo- Sé que me sonroje al escuchar sus palabras.Nunca he tomado desayuno con algún chico. Era mi primera vez en esta situación.
Se ve delicioso- le dije mientras mi estómago rugía por el hambre.
Adelante- me sirvió un plato.
¿Trabajas temprano?... ¿no tienes resaca?- le pregunté mientras aún tenía comida en la boca, a lo que el río.
Si, debo ir a la oficina y claro que tengo resaca... Lisa bebimos tres vimos entre los dos- Río.
¿Te importaría irme a dejar al bar?... debo hablar con Jin y pedirle disculpas- Sonreí.
Claro que no... vayamos los dos, después de todo debo entregarle esta carta a Jin- movió el papel frente a mi. - Mientras te vistes y duchas lavaré los trastes- sonrió.

Me aseé y vestí, al salir todo estaba ordenado. Yo también el ordene su cama. El trayecto en auto fue divertido. Lleno de música y chistes. Ambos prometimos que si nos veían bajar juntos del auto debíamos decir que el me encontró camino acá y que me ofreció irme a dejar.
Y frené en seco al entrar al bar.
Ahí estaba el, acompañado de mínimo cinco chicas.
Estaba tan borracho que no se podía el cuerpo. Taehyung solo me miró, asegurando que estuviera bien.

Con que ahora te acuestas con Tae ¿no?- fue lo único que dijo antes de caer al piso.

Al llegar a casa Jin me ayudó a entrar todas las bolsas de compra al armario, que ahora estaba vacío.
Se despidió de mi, como un caballero, inclusive ordenó una pizza a mi nombre. Todo pagado.
Estaba lista para dormir cuando sentí vibrar el celular.
<<Jin Oppa>> Reí cuando vi que el se guardó así mismo como Oppa.

Jin Oppa
¿Duermes?

Jisoo
Me haz despertado

Jin Oppa
Lo siento Jisoo... vuelve a dormir

El pacto || blackpink x BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora