I found you (TERMINADA)

Capítulo 10.

Lunes, 3 de Junio.

Cher sonó como llevaba haciendo todo el año. Respiré hondo y apagué la alarma, aquel día estaba algo triste. Cogí el móvil y lo encendí para ver la hora, era temprano… Empezaron a entrarme todos los mensajes y las llamadas perdidas de gente con la que no hablaba desde hacía siglos. Puse los ojos en blanco, no leí ninguno, no importaban. Busqué el mensaje de buenas noches de Niall, pero no lo encontré.

Me levanté de la cama y subí la persiana. Abrí el armario y saqué lo primero que pillé; mis viejos pantalones vaqueros (con los cuales había conocido a los chicos), mi camiseta con el símbolo del ying y el yang y mis converses bajitas negras.

Salí de mi cuarto arrastrando la mochila. No hice la cama, no tenía ganas. En la cocina mi madre me había preparado un cola cao caliente, le di las gracias y me lo tomé lo más rápido que pude. Entonces pensé en las fans y me dio miedo ir al instituto sola. Le envié un mensaje a Ángela.

‘’¿Vamos juntas al insti? Me da miedo.’’

‘’Ok.’’

Respiré tranquila. Al menos tendría a Ángela si me decían algo. Antes de salir cogí una sudadera, no quería que me viesen. Me despedí de mi madre y bajé por las escaleras con la capucha tapándome el rostro, así llegué a casa de Ángela.

Toqué al timbre de su piso, tenían cámara. Una voz se escuchó desde arriba.

- ¿Encapuchado, quién eres y por qué tienes tan buen culo?

- Rubén, haz el favor de decirle a Ángela que baje- la risa de Rubén se escuchó-.

- Ya baja, peque.

- Gracias- le dije-.

Ángela bajó y ambas intercambiamos una media sonrisa. Estuvimos hablando de temas sin importancia, ella me contó que apenas entraba en twitter, ya que la deprimían los comentarios. Yo le conté que me pasaba igual, demasiado drama y todo era que era por nuestra culpa. Lo único bueno era que no sabían que éramos nosotras, ya que nuestros twitters no eran personales.

Íbamos de camino al instituto cuando una chica se nos acercó.

- Hola…

- Si vienes a insultarnos, te puedes ir. No somos las novias de ninguno de ellos, gracias- las palabras de Ángela sonaron claras y seguras de sí mismas-.

- La verdad es que… ¿Tenéis horas?- miré a la chica sonriendo, Ángela empezó a reírse, se había adelantado-.

- Son las ocho menos diez- le dije con una sonrisa, ella me dio las gracias y se fue-.

Me quedé pensando, Ángela se puso sus cascos y yo la imité. ‘Cry me a river’, de Justin Timberlake, comenzó a sonar en mis cascos. No pude evitar fijarme en cómo nos miraban las chicas de la calle, aquello era lo que me esperaba a partir de ahora. Ángela y yo habíamos sido las chicas de One Direction en España, y aquello suponía una ‘’fama’’ a su costa.

En cuanto llegamos al instituto todas aquellas ‘’directioners’’ se nos pegaron como abejas en mil. Puse los ojos en blanco e intenté ocultarme más aun en mi capucha. Subí el volumen de mis cascos y pasé sin prestarles atención. Chicas que nunca nos habían hablado, chicas que nos habían criticado, con las que nos habíamos peleado… Ahora querían se nuestras mejores amigas. ¡Menuda locura!

Aunque lo peor fue cuando entramos en clase, aún faltaban cinco minutos para que la campana tocase y la gente estaba hablando en corros, como siempre. Cuando Ángela y yo traspasamos el umbral de la puerta, se hizo un silencio rotundo y todos nos miraron. Ángela agachó la cabeza y se fue con las xoxos, yo me quité la capucha y les miré.