Diferentes Estrellas #1 [Justin Bieber]

Capítulo 39.

·Narra Justin·

Me agobiaba verme rodeado de tantas personas, aunque esta fuera mi propia fiesta y la mayoría eran conocidos, pero también existía un alto porcentaje de gente con la que en mi vida había cruzado ni una palabra. Y es que había tenido que invitar a personas por puro compromiso o porque Scooter había insistido en que era lo correcto y así no quedaríamos mal.

-Él es Thomas Harrison -nos presentó mi representante.

-Encantado -le tendí la mano.

-Igualmente.

Ni si quiera me detuve a hablar más con él, no sabía quién era ni qué hacía aquí y no era muy partidario de perder el tiempo. Yo solo quería irme hacia donde estaban todos y pasar un buen rato con ellos, aunque sabía que iba a ser algo complicado.

Scooter y ese tal Thomas iniciaron una conversación y yo me hice a un lado, dejándoles su espacio. Además, no me interesaba ni lo más mínimo.

-Por fin te encuentro -escuché una voz a mi espalda y enseguida me volteé.

-¿Me estabas buscando? -le pregunté, alzando una ceja.

-¡Claro! -Hannah me rodeó con sus brazos, a modo de saludo-. Hoy eres el protagonista, no lo olvides.

-Ah, ya -rasqué mi nuca-. Aunque tampoco me importaría pasar desapercibido, eh.

-No digas eso -arrugó su frente-. A mí me encantaría tener mi propia fiesta y no solo las de cumpleaños.

-Pues organízala -comenté con despreocupación.

-No acudiría tanta gente -dijo mirando a ambos costados.

-Mejor, así sería más privada -moví mi cabeza.

-No me des ideas, Bieber -habló divertida-. Tú serías el primer invitado.

-Wow, me siento importante -exageré a modo de broma.

-¡Idiota! -rió-. Lo digo en serio.

-Está bien -alcé mis manos en señal de defensa.

-Oye, ¿qué te parece si paso a revisar que estén todos los invitados? -propuso, sujetando una carpeta con lo que supuse que sería la lista donde salían todos los nombres.

-No hace falta, ya está todo controlado -dije con convencimiento.

-Prefiero asegurarme -sonrió-. Ya que me he encargado de todo, prefiero que todo salga perfecto y no haya ningún fallo.

-No lo habrá, no te preocupes... -insistí.

-Déjame a mí, soy muy perfeccionista y me gusta hacerlo todo bien -guiñó su ojo, divertida.

-En ese caso, haz lo que quieras -reí.

-Solo un pequeño detalle -se acercó a mí, colocándose a mi lado-. ¿En tu mesa os sentáis todas estas personas, no?

Leí los nombres que aparecían ahí y asentí con mi cabeza. Estaba todo correcto: Ryan, Layla, Bibi, Aira, Fredo, Nick, Chaz, Scooter y Yael.

-Todo en orden -le hice saber.

-Genial -sonrió y se dio media vuelta-. Iré a comprobarlo.

Observé cómo se marchó a un paso acelerado, como si le fuera la vida en ello, y cuando me volví hacia Scooter ya no estaba con ese tal Thomas.

-Tenemos que empezar con el discurso que hemos preparado, ¿estás listo? -me informó.

-¿Pero ahora mismo? -rasqué la parte superior de mi cabeza.