Obliviate

parte 51

-¡¡Te felicito, Hermione!!- La castaña se da vuelta y se ve envuelta en los brazos de Luna.

-¡Luna! Que alegría verte.- Sonríe.

Le da un fuerte abrazo con mucha efusividad. Cada vez que llegaba un nuevo alumno, ex alumno, profesor o cualquier persona mago que hubiera colaborado en la guerra mágica Hermione se ponía muy contenta de que estuviera vivo.

-¡¡Estás ayudando a un montón de personas y esto es algo increíble!! Gracias por ser así de generosa... En tu condición tendría que estar descansando y sin embargo mirarte cómo estás.- Le sonríe y suspira con esperanza.

La castaña le sonríe devolviéndole el gesto y la mira con un interrogante en su mirada, sólo lo saben Draco y Harry, ¿Cómo llego su amiga a enterarse?

-¿Cómo es que?- Arruga su frente con una sonrisa que no puede ocultar.

La rubia suelta una carcajada y apoya lo que traía en sus manos sobre una de las comodas donde descansan alumnos del segundo año de revenclaw,

-¡¡Draco lo grito a los cuatro vientos!!- Sonríe y sube sus hombros.

-¡Bueno eso explica muchas cosas!- Se ríe ruborizada.

-Jamas vi a ese chico tan sonriente.- Asegura.

Hermione muerde su labio y sus mejillas se ponen coloradas.

-¡Creo que somos dos!.- Muerde su labio inferior, nuevamente, aún tímida.

-¡Es una bendición para todos nosotros!- Asegura palmeando sus manos contenta...

-¡Lo es!- Infla su pecho con orgullo y sonríe con su mirada llena de deseo y amor.

-Realmente estoy muy contenta por vos, por los dos.- Sonríe siendo totalmente sincera... -Esto es un gran inicio.- Asegura inflando su pecho con esa increíble positividad que siempre la rodea...

-¡Voy a matarlo por ser tan chismoso!- Toca su plano vientre y sonríe mientras niega con la cabeza y se concentra en chequear que todos estén bien allí adentro.

-¡No seas tan dura con el!- Bromea con un movimiento de su mano derecha.

-Recien nos enteramos hace pocas horas, y él ya se lo contó a medio Castillo.- Sube sus hombros tímida, aún no pudo parar y ponerse a pensar en aquello...

Luna toma su bolsa y saca unos floreros decorado con los colores de la sala común, los pone a cada lado de las camas y sonríe contenta...

-En el medio de una guerra un nacimiento así Hermione es algo maravilloso.- Asegura iluminando su rostro.

-¡Era algo impensado Realmente!- Aprieta sus labios.

-¡No lo retes porque lo haya contado, le salió del alma decírselo a su amigo!- Infla su pecho.

Hermione asiente y abre las ventanas para que la luz ingrese a las habitaciones...

-Es un lindo detalle.- Mira los floreros..

-¡Podemos hacer que con poco se sientan como en casa.- Wonríe y mira orgullosa.

-Cuando despierten se sentirán en su casa, y cuando nos avisen que el castillo está en condiciones podremos trasladarlos allí dado a que san mungo debe de estar atestado de casos.- Asegura mirando todo el trabajo que Draco y sus amigos hicieron, no puede no sentirse orgullosa de él...

La sorprendió completamente, trabajando en silenció junto con sus amigos y ayudando a todos aquellos que alguna vez incluso lo miraron mal o con miedo... Incluso ahora se siente algo avergonzada por haberse portado de aquella manera tan histérica cuando llegaron a su departamento, de sólo recordar aquel momento su mejilla se ruborizan.